-¡padre cuenta la historia! - el rubio pidió con su dragón de peluche en brazos.
El hechicero soltó un suspiro, Cloudia ya dormía en sus brazos, pero Soren seguía despierto.
- Sólo una ves mas y espero y esta ves estés dormido cuando acabe. - El ech...
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- Kasef ten cuidado.- con ayuda del gran tamaño de su amante subió a su hombro para protegerlo de la segunda lluvia de flechas.- Kasef.- el príncipe bajo la mirada, no podía ver a su amante pelar.- Kasef mirame.- No pudo continuar al sentir el aire más pesado, asustado miro al cielo, un desfile de dragones levantaba guardias de roca para tirarlos desde las alturas.
- es Ezran.- murmuró el pelirojo, la general sólo le dio una mirada para entender lo que quería.- Soren, cuando Ezran baje debes cuidarlo.- el rubio asintió, le dio dos palmadas a su amante y este lo miro confundido.
- te nesesito.- con cuidado se sentó en el hombro se su amante para tomar su rostro.- tratare de dejarte como antes si me dejas ayudarte.- su mirada aún verde veía como su amante eternas su espada en los monstruos que se acercaban a atacar.
- cuidaré tu espalda, cuida de tu rey.- aún en su hombro vio bajar al dragón rojo al que le pidió cuidar del niño.
- Soren, seguiré desde el cielo, no te preocupes por mi.- no lo dejo replicar cuando volvió a las alturas, sin darse cuenta de la persona que montaba a caballo peleando a su espalda.
- ese mocoso va a matarme un día de estos.- siguió batiendo su espada, acompañado de su pareja. Un rugido se escuchó desde el cielo, el dragón rojo bajo y se puso frente a la pareja de amantes, cubriendolos del ataque.
- ¿¡Que fue eso?!- el rubio miro asustado a la dragón, su ala estaba algo herida y se sintió culpable al no verlo venir.
- el hechizero intento atacar a tu amante.- murmuró la dragón, bajo su ala para que el rubio pudiera sacar la lanza.- esta poseído.- gruño con fuerza ante el dolor.
- esto es absurdo Soren.- grito con su baston en manos y el enorme cien pies en su cuello.- aún puedes permanecer a mi lado... hijo.- la dragón ya no tenía al niño en su cuello, lo noto cuando está se preparó para escupir fuego de ser necesario.
- miente.- ziseo molesta el animal rojo.- ese gusano en su cuello lo manipula a su antojo.- ella podía ver la sombra a la espalda del echizero, este sonreía ampliamente, sería libre así matará a su propia reina.
- padre...- dio un paso adelante, pero la cálida mano de su amante lo detuvo, la mirada suplicante y preocupada del mismo lo detuvieron.- yo...- sin creerlo vio a su madre, montando su fiel llegua, la rubia mujer se puso en medio de los dos amores de su vida, protegiendo a su hijo.
- alejarte de mi hijo Viren.- el caballo siguió sin ella, sus ojos brillaban en furia al enterarse de el circo que ocasionó su marido.
- nuestro hijo querida Olivia, nuestro.- avanzó lentamente, tenía tantas ganas de abrazarla y decirle cuanto lo sentía.
- no.- murmuró enojado el ente.- ella sólo estorba en tus planes, debes acabarla, sólo Nesesitamos a Cloudia.- el hechizero parecía no escucharlo, eso le molesto, Olivia seguía a la defensiva.
