El cuento favorito de Soren

capítulo 11 "regreso"

Cuando se dio cuanta de que el animal ya no tenía vida, vio inutil volver a Neolandia, coma ayuda de Corvus hicieron una tumba en honor al animal, y regresaron caminado a la casa.

- Soren...- el rubio sólo lo miro sin dejar su andar.- ¿no deberías avisarle a tu madre que volverás a tu casa?.- el otro no se detuvo, pero lo que le sorprendió fue que no soltara ni una sola lágrima al enterarse del fallecimiento del animal.

- no, después de todo es lo que ella quería, regresarme con mi padre.- una ves llegaron a la casa, el rubio no dijo nada y se fue a tirar al sillón.

- la general Amaya esta buscando reclutas.- dijo de la nada sentándose en el suelo.- podrías pedirle entrar a ser uno de sus seguidores y eso te daría "referencias" en la guardia real.-

- con que la general Amaya ¿eh?- puso un dedo en su barbilla y comenzó a dar vueltas alrededor del cuarto.- ¿tu vas con ella no es asi?-

- si, ella ve sea a recogerme en unas horas, puedes venir conmigo.- se levantó y detuvo al otro.- me estás poniendo nervioso deja de hacer eso...- con cuidado, lo guió asta el sillón y lo hizo sentarse.- ella también va a Katolis así que puedes pensarlo en el camino.-

Salto de tiempo (edad actual: 18 años)

- no sostienes bien tu espada Callum.- con flojera y sin esfuerzo volvía a vencer al castaño frente a el.

- ¡te dije que no soy un guerrero! ¡yo soy un artista!- se levantó ofendido y sacudió su pantalón.- no...no creo...poder manejar la espada...- miro a la peli-negra con puntas moradas quien estaba distraída con su libro de magia.

- ah.- lo miro divertido ante la boba reacción con su hermana.- te aré quedar bien, dame tu mejor golpe.- una ves Callum tomó de vuelta su espada dio un tiro fallido a un costado de Soren, evitó reír, con fuerza sujeto la espada con su antebrazo y se tiro dramáticamente al suelo. - ¡oh no! Callum me venciste, tu poderosa espada y tu fuerza me dejaron sorprendido...-

Cloudia veía el drama que organizaba su hermano, Callum no sabía que hacer al ver reír a Cloudia, sus ojeras estaban rojas de vergüenza, la azabache cerró su libro y se fue riendo de hay.

- bien, la tienes bajo tus encantos medio principe, se acabó el entrenamiento por hoy, creo que Están te estaba buscando.- se levantó con las dos espadas y vio al castaño irse. - niños...- acomodo su espada en su cintura y la otra la guardo con las demás espadas mientras tarateaba una cansionsita.

- ¡Soren! Uno de los guardias vio elfos asesinos en el bosque.- Viren camino apoyando en su bastón, venía con un extraño cofre y al parecer había tenido otra discucion con el rey Harrow

- ¿debo preguntar que fue esta ves?- tomó el cofre y siguió a su padre dentro del Palacio.

- sólo otra discusión sobre lo arrepentido que esta por lo del huevo del rey dragón y mi usó sobre la magia oscura.- Soren hizo el típico "hujum" de que el tiene razón.- ¡sólo trato de ayudarlo!, ¡de ayudar al pueblo!, Cloudia lo entenderia...-

- pues deberías decirle a Cloudia que busque más cuernos de unicornio para mantener tu macabro poder...- el mayor lo miro con una ceja alzada y el otro sólo leva yo los hombros.

- ¿aún sigues molesto porque "daño" a tu amiguito?- la carcajada de Viren rebotó en las paredes, Soren se escondió de su mirada apenado, no le gustaba que llamara así a su "caballo".- es un animal Soren, debiste dejarlo morir.-

¡tu le quitaste su fuente de magia! Gritaba la mente de Soren, pero si desobedecia a su padre no tendría más el cuidado del rey, aunque espero mucho por ese título Viren podía arrebatarselo con sólo tomar sus dedos.

- no podía hacer eso... no es correcto.- miro el suelo recordando a su maestro, la guerra pudo más que su voluntad y la muerte decidió llevárselo cuando Katolis tuvo problemas en los terenos de Xaidia, en una expedición que obviamente su padre dirigió.

Dejaron el tema ahí pies Soren estaba perdido en sus pensamientos y Viren noto eso, decidió dejarlo para que no le diera una re-caída, pues después de volver de su peque travesura de viajar a Neolandia, se concentró en su entrenamiento con Amaya pero una ves mas el título le fue negado con la escusa de siempre, la general Amaya fue la única que noto el cambio en Soren y no lo dejo entrenar más, descubriendo que se hundió en la tristeza, los síntomas variaron, unos días no quería comer y otros se la pasaba comiendo, algunos días salía a cabalgar con su caballo y otros sólo se tiraba al sillón a comer panesillos, en los entrenamientos era muy rudo y les hacía más daño del necesario a sus compañeros y nadie quería entrenar con el.
Cuando "mejoro" actuaba como un niño impulsivo, con los constantes cambios de humor de su padre empezó a confundir las cosas, como lo bueno y lo malo, su maestro trato de ayudarlo a recuperarse pero no se dio por su muerte 1 año después.

- Soren... En ese cofre hay una polilla de luna, es capaz de rastrear la energía lunar, mandaré una expedición a buscar a los asesinos y quiero que tu los guíes.- el rubio sólo asintió, busco a sus compañeros, prepararon los caballos y cuando estaban a punto de salir un muy gracioso Callum llegó con una armadura arriba de un caballo.

- yo iré con ustedes, se lo que esta pasando y ¡quiero ir con ustedes! - todos lo miraban serios, menos Soren, el si se burló y lo miro como si fuera un bufón.

- niño, esa es una armadura ceremonial, es 3 veces más pesada que una normal.- el más pequeño resbaló del caballo cuando el rubio se acercó arriba del suyo. - mejor quédate aquí, será peligroso.- se dio vuelta y se puso frente a sus compañeros, abrió lentamente el cofre y de el salió una enorme polilla que se poso en su mano.- bien amiguito, tu guías.- levantó su mano con algo de inpulso para que el insecto emprendiera en vuelo. - siganla que no se les pierda de vista.- los caballos fueron atrás de el insecto.

Callum sólo podía ver a los demás irse y a El caballo que llevaba el ir a comer heno de una careta. Se levantó del suelo y se quitó la pesada armadura, ¿eso sintió el rubio cuando rechazaba sus invitaciones a entrenar con el?
No era el mejor entrenador, pero siempre estuvo para el...haciendo en ridículo para que el quedara bien, pero al fin de cuentas lo apoyó en sus ideas tontas.
Rendido fue a la biblioteca, le interesaba la magia, pero no podía hacer magia porque en no pertenecía a Xaidia.