ALICE
Después de un día en el hospital me dieron el alta, Laura había pasado todo el día conmigo, se disculpó un millón de veces y aunque sí que me enfadé con ella, al final la tuve que perdonar, pero le hice prometer que iba a beber menos y se centraría más en los estudios.
—¿En serio, acabas de llegar del hospital y ya quieres ir a la biblioteca a estudiar? —me regañó Laura —tienes que descansar
—Ya he descansado un día entero, y ya que no puedo ir a trabajar al menos haré algo de provecho, además tú te vienes conmigo, sin rechistar —añadí cuando vi que abría la boca
Cogimos nuestras cosas y nos fuimos, al llegar allí vi que él estaba sentado en una mesa con u libro.
—Lau, coge sitio por favor.
—Hola, perdona que te moleste —le dije al chico de la biblioteca al acercarme
—No molestas, me alegra ver que estás en pie fuera del hospital —me respondió
—Si, por suerte solo ha sido un esguince en el brazo. Quería darte las gracias por ayudarnos el día del accidente...
—Ojalá hubiera podido hacer más —me interrumpió, y realmente parecía que le dolió no poder evitar el accidente, como si alguien hubiera podido —me llamo Ian, por cierto
—Es un placer, yo soy Alice, y de verdad que muchas gracias. Voy con mi amiga, que me está esperando —me despedí
—Espera, si quieres podemos tomar un café algún día
—Si, porque no, ya quedamos
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Ian
¡Que cojones acababa de hacer! Lo primero, porque narices sigo viniendo a la biblioteca, y lo segundo, encima de todo la invito a tomar algo. ¿Pero que pasa conmigo?
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Quiero estar a tu lado
Romance¿Que harías si la persona de la que te enamoras no es lo que parece? ¿Y si tienes prohibido enamorarte y te encuentras con la mujer de tu vida? Todo esto y más es lo que vais a encontrar en esta historia de amor y amistad
