HONOR, DEBER Y AMOR

Roxi

Scott

- suena a que aspeta no poder salir de aqui, y que harás en acción de gracias faltan cuatro días?

- aún no losé es más no dieron la orden de poder salir aún así que no tengo idea que haré.

- sabes que puedes ir a casa, mamá estaría muy emocionada

- sabes que no iré prefiero ir cualquier otro día. Se cómo es la tía y lo sencible que se pone y yo la verdad que aún no manejo sus emociones, llámame tosco o insensible pero no tolero ver a una mujer llorar es algo que me supera.

- de acuerdo, la invitación ya está cumplí con mí misión además nos tenías preocupados a todos, hace meses que estás aquí y solo una vez fuiste a casa. Si no era por Marck que llamo para saludar en mí cumpleaños que por cierto no me saludaste, no nos íbamos a enterar.

- joder lo siento lo olvidé por completo. Estuvimos tan metidos con el entrenamiento que se me pasó. Prometo compensarte.

Roxi mí prima hermana y con la que eh pasado casi mí infancia completa era un caso sin igual, rebelde apasionada contestona pero muy divertida era una de las únicas personas que tenía en el mundo y con quién compartía mucho en común principalmente el gusto por las mujeres, si... Le fascinaban las mujeres y hubiera sido un perfecto soldado de no ser por qué ama el pelo suelto y no es capas de seguir una orden sin antes mandarte al demonio.

- lo olvidare solo si me dices quien santa mierda es esa mujer de infarto?

Me dice mirando disimuladamente hacia la entrada.
Maddox quien otra podía ser.

- si te lo digo promete que mantendrás la calma y no te irás ensima como un depredador.

-solo aumentas mis ansias primito

- jodidisima mierda es la hermana de Marck, pero no le hablaras sino pensara que estamos hablando de ella.

- y porque ese cabron nunca dijo lo buena que estaba.

- debe ser por qué estaba comprometida y porque es muy celoso.

No paso ni dos minutos que el nombre de Maddox resonó en todo el zoom, dejando en evidencia a aquella cadete quien parecía que iba a escupir espuma en cuestión de segundos.

Se sentó frente a él y yo como un idiota no pude despegar la mirada de dónde estaban. La charla con Roxi se estendio y en un momento quisimos salir al patio por pedido de mí prima.

- creí que dijiste que estaba comprometida.

- y lo estab...- mis palabras murieron antes de poder completarlas. ahí estaban ambos abrazados y besándose en medio del patio protocolar de actos.

Nosé que sentí en aquel momento, creo que una decepción mesclada con enojo. No podía que una mujer pudiera perdonar tan fácilmente.

La vi marcharse a la unidad no sin antes percatarse que la estuve observando en su gran espectáculo. Bien no era quien para juzgar pero hombre te fue infiel, estaban por casarse.

En fin Roxi se fue pero no dejo de Insistir en que le presentará a aquella mujer loca con facilidad de perdonar, cosa que prometí hacerlo en algún momento.

Teníamos el día libre, todos habían decidido ir a aquel bar donde fuimos por última vez, los cadetes también podían hacerlo pero debido a que el lunes habría un exigente examen decidieron quedarse.
Había lavado ropa sábanas y ordenado el uniforme para el lunes, aún no sabíamos que pasaría para acción de gracias de todas formas me quedaría aquí.