Scott
-Teniente Lowell, el comandante lo espera en su oficina.
El soldado de los recados así lo reconocía al pobre joven que siempre andaba deambulando de un lado a otro buscando a los superiores para notificar sobre algo.
-bien soldado en un momento voy, gracias por avisar.
Sin más salió corriendo de la cuadrilla, eran las nueve de la mañana, y apenas me había dado tiempo a lavarme los dientes. Anoche me había acostado a dormir muy tarde, y casi no pude pegar el ojo debido a los recuerdos que llegaban a mí mente sobre Sophie, no cabía mí sonrisa en la cara y de solo pensarlo otra vez estaba durísimo y con ganas de ir a buscarla.
Tanto ella como Smith no corrieron con la misma suerte de poder descansar un poco más debido a que tenían que controlar a los soldados que aún seguían internados. Nuestros jefes querían enviarlos a América cuánto antes, y así poder traer al relevo, eran doce del personal que se mantenía inactivo y eso solo significaba descontrol de distribución del personal. Doble guardias y patrullajes con menos seguridad.Nosé si decir lamentablemente, porque en verdad no lo lamentaba, anoche cuando volvíamos me enteré que Brown junto a su equipo habían reducido y podido sacar a Mohammed de su refugio. El único problema es que el sujeto nosé como pero logro atacar a un soldado y tuvieron que matarlo, le habían volados la tapa de la cabeza y se trajeron el cuerpo para la base, fue una estupidez. Ahora solo había que abstenerse a las consecuencias y estaba seguro que la reunión con el comandante se debía a eso.
- permiso comandante, me mandó a llamar.
- pase teniente, y tomé asiento.
Me senté frente a su escritorio y al instante Williams y Brown junto a otro tipo que no conocía entraban a la oficina también.- los mandé a llamar, ya que debemos limpiar el error de anoche.
- señor todo tiene una explicación- se apresuró a defenderse el Seal.
- claro que la tiene, y Lowell como el jefe de operaciones me la dará no es así Teniente?- cerré mis ojos y apreté los puños intentando calmarme y no explotar ante tal idiotez, yo no tenía idea que traíamos un cadáver hasta cinco minutos antes de llegar a la base. Ahora debía inventar una buena justificación para salvar a todo el equipo. - comandante lo que paso no fue intencional, el teniente Brown junto a su gente traían con vida al prisionero, pero este fingió un ataque epiléptico y en el intento de socorrerlo quiso atacar a uno de los hombres y no hubo más remedio que liquidarlo, lamentablemente esto sucedió a unos kilómetros de aquí, y no teníamos otra opción. No podíamos solo tirar el cuerpo en medio de la carretera, eso sería imprudente de nuestra parte y nos dejaría mal parados.
- entiendo. Ahora, ustedes están concientes que esto podrá traer represalias.
- lo sabemos comandante y estamos preparados para responder cualquier tipo de ataques.
- JODER!! DE QUE ME ESTA HABLANDO.- grito mientras caminaba de un lado a otro.- tenemos doce hombre menos, con que se supone que vamos a responder, si la mitad de la base está de patrulla constantemente.
Esto era inaudito, un comandante de alta jerarquía con miedo de unos terroristas. Era algo nuevo!
- con todo respeto comandante, no estoy entendiendo cual es el problema que acaba de descubrir y que antes no supo ver. De aquí mismo salió la orden de capturar vivo o muerto a ese terrorista de mierda. Fue su orden y la tengo firmada por escrito, acaso no pensó antes las consecuencias de tal acto. La represalia la tomarán ya sea que lo hallamos matado aquí o en su maldita guarida. Así que no entiendo por qué nos plantea esto. Anoche dimos nuestro informe al capitán y estaba más que conforme con los resultados, fuimos a arriesgar el pellejo por esas dos personas y las hemos traído de regreso. La misión se cumplió con resultados éxitos- así era como cualquier hombre podía perder su sonrisa en cuestión de segundos- No tengo más nada que decir comandante, ahora me retiro tengo cosas que hacer- me puse de pie ante la mirada atenta de todos-, ni bien tenga la sanción me pondré en contacto con usted- dije saliendo del lugar y dando un portazo digno de película.
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HONOR, DEBER Y AMOR
RomanceSophie Maddox una joven doctora recién graduada de la Universidad de Harvard. inicia su carrera profesional creyendo tener su vida asegurada, con un alto puesto en el mejor hospital de la ciudad de Boston, una hipoteca y una boda a tan solo meses...