HONOR, DEBER Y AMOR

Bruner

Sophie

Era viernes por la noche y ya casi no quedaba nadie más que los aspirantes y el personal de guardia, aprovechamos para descansar de seis a ocho de la noche y luego fuimos a cenar al comedor principal.

Johnson y Smith estaban en la misma mesa que el resto del pelotón bravo. No entendía por qué no se habían ido también, necesitaría una charla extensa con mí hermano para que me dé unos cuantos datos así no me siento tan desorientada.

Smith me hace seña para que me siente con ellos y voy sin dudarlo, lamentablemente no tengo casi diálogo con las otras aspirantes ya qué solo las veo cuando voy a dormir.

- semana dura verdad?- comenta cuando me siento a su lado.

- ni hablar, aún se me acalambran los músculos cuando voy a dormir. No sabes cuándo nos dejarán lavar el uniforme y la ropa de gimnasia, ya no tengo que ponerme?

- el teniente Lowell dejo la orden de que se nos permita lavar todo para mañana a primera hora.

- gracias al cielo.

- oye maddox, queremos disculparnos contigo por nuestro comportamiento, no sabíamos que eras una aspirante bravo.- escucho decir a uno de los mastodontes que tengo de compañero de entrenamiento, aunque todos me están mirando.

- es cierto creímos que estabas de paso por la sección. Además de que el teniente nos correrá si existe una próxima vez. Queremos que no hallan malos entendidos comprendes- habla otro quien creo que se llama Levis.

- No necesito las disculpas, pero de todas formas me alegro que no se seguirán comportando como primitivos. Soy solo una mujer que pateara su trasero en cuanto quieran desubicarse de forma vulgar e irrespetuosa. Así que de ahora en más estamos en paz.

La cena continuo entre bromas y risas. Si bien el equipo Bravo era personal destacado y ya perteneciente a la fuerza, no nos hacían de lado ni nos trataban de menos. Cada uno ahí sabía su lugar y la función que cumplía. El ambiente era como el de cualquier viernes con un grupo de amigos y eso me encantó.

- al menos nos dejaron ver la tele hasta las once- dice Johnson

- yo iré a dormir colegas la verdad es que no doy más del sueño y mañana toca fajina toda la mañana

-escucha Maddox el lunes comienzan las evaluaciones teóricas, si quieres podemos reunirnos en los tiempos libres para leer que dices, nosotros tres no pienses mal. Dice Smith

- claro me encantaría. Solo avisen cuando y donde.

Sali del comedor y fui directo a la cama. No habia muchas chicas durmiendo por dos cuestiones: primero que estaba permitido dormir más tarde hoy y segundo porque en esta unidad solo son quince aspirantes femeninos contando conmigo.

El domingo a la noche llego en un abrir y cerrar de ojos, entre los apuntes que teniamos que estudiar y la cantidad de ropa y sábanas que lavamos. No nos dio tiempo a quejarnos por masque quisiéramos.

Me enteré por mis compañeros que el teniente Lowell había llegado, no quiero ser molesta pero me había dicho que existía la posibilidad de que pudiera hablar con mí hermano, de todas formas no seré yo quien toque el tema.

Estaba lustrando mis borcegos cuando un sargento femenino entro a la unidad de mujeres, y todas saltaron de la cama. No tenía idea de quién era o que debería hacer yo así que solo me puse de pie al igual que las demás aspirantes.

- Soy la sargento Bruner, y eh sido designada a esta unidad para verificar cada paso que hagan y supervisar que se cumpla cada sanción que se les otorgue. De ahora en más no interesa con quien estén en formación si les pido que se arrastren un kilómetro así lo haran. Cómo serán mi responsabilidad cualquier problema o novedad primero la tendré que saber yo antes que nadie, me han entendido?