ADICTIVO ... 1 ✔

CAPÍTULO 63: 'EL FEROZ CONTRAGOLPE DE GU HAI'

Alrededor de las diez de la noche, Gu Hai invitó al Director del departamento de la oficina administrativa urbana a tomar un té.

"¿Cómo está el comandante Gu?"

Gu Hai permaneció inexpresivo y respondió: "Muy bien. ¿Qué hay de usted?"

"¿Yo? estoy bien,  estoy muy bien."

"Puedo ver eso. No está mal, tanto física como mentalmente."

El director sonrió tímidamente: "¿Mentalmente? La cuestión es que algunas cosas sucedieron recientemente, así que ...

"Si tu mentalidad no es buena ... ¿cómo puedes liderar con éxito un equipo tan excelente?" Gu Hai interrumpió al Director.

La expresión facial del Director cambió repentinamente, su sonrisa se volvió cada vez más incómoda.

"Joven maestro Gu, por favor ve directo al grano. Si hemos hecho algo, no duden en hacérnoslo saber".

Gu Hai entrecerró los ojos mirando al Director en silencio.

Aterrorizado por la mirada feroz de Gu Hai, el corazón del Director latía tan fuerte como si saliera de su pecho. "¿Le hice algo?" Pensó para sí mismo.

"El puesto de desayuno de mi tía estaba siendo destruido por tus oficiales, y ella todavía está en el hospital.  Ahora tu dímelo."

"Esto ..." La cara del Director se puso pálida mientras tartamudeaba, "Esos malditos imbéciles ... ¿Cómo se atreven a hacerle eso al puesto de tu tía? Por favor no te enfades. Una vez que regrese, hablaré con su capitán y haré que todos vayan allí para disculparse con su tía.

"Entonces es así, si no fuera mi tía, ¿simplemente seguirías adelante y destruirías los negocios de la gente?"

"No es así. No nos atreveríamos a hacerlo. La palma del director estaba cubierta de sudor, "fue un error de su parte tener un comportamiento tan bárbaro. Les he enseñado antes; ganas a las personas con ética y compasión, no con violencia, pero no escuchan..."

Gu Hai le dirigió una fría mirada de piedra: "Entonces llévame a la sede de oficina administrativa urbana".

"¿A... ahora mismo?" Con los ojos puestos en el reloj, el Director tartamudeó "Están fuera de servicio en este momento, ni siquiera puedes verlos si vas allí".

Gu Hai sonrió débilmente, "¿Fuera de servicio? Entonces, ¿incluso la oficina administrativa urbana tiene horas de trabajo?"

"Lo hacen", el Director sonrió incómodo, "la oficina administrativa urbana es una ocupación, por supuesto que tienen horas de trabajo.

"Entonces, ¿a qué hora vienen a trabajar?"

"Nueve de la mañana."

"Pero llegaron a la tienda de mi tía a las seis".

El director no pudo volver con una respuesta y tragó en silencio.

"Todos se han reunido aquí. ¿Qué quieres que haga con ellos?

El Director, que hace unos segundos estaba actuando con humildad frente a Gu Hai, se dio la vuelta y gritó a los cuatro oficiales, maldiciéndoles con todas las duras palabras que pudo pronunciar.

Gu Hai los miró con indiferencia y dijo 3 palabras en voz alta.

"Todavía falta uno."

Sudores fríos corrían por la cara del Director.  El que faltaba, era el oficial calvo  con las cejas torcidas,  que de hecho, era su sobrino.

"¿Te acuerdas correctamente? Solo había cuatro de ellos en servicio ese día.

Al escuchar eso, los cuatro oficiales rechinan sus dientes en silencio.