ADICTIVO ... 1 ✔

CAPÍTULO 119:"ANGUSTIA DE MEDIANOCHE"

Una vez que regresaron a casa, Bai Luoyin se dirigió directamente al baño para ducharse mientras Gu Hai fue a sentarse en el sofá. Trató de calmarse mientras miraba la bandeja de fruta frente a él, había varios racimos de uvas ensartados.

Después de que Bai Luoyin se duchó, salió solo para encontrar a Gu Hai sentado en la misma posición, sin embargo, había una bandeja más de fruta en sus manos. Las uvas que una vez se habían juntado cuidadosamente habían sido arrancadas de sus ramas, una por una, y el jugo que fluía de ellas cubría toda la bandeja.

¡Qué asombrosamente listo era Bai Luoyin!

En solo unos segundos, fue capaz de descifrar los pensamientos de Gu Hai. Después de abrir la puerta del dormitorio, no pudo evitar maldecirlo clandestinamente por solicitar problemas, pero justo cuando estaba a punto de entrar, la voz helada de Gu Hai sonó, obligandolo a detenerse.

"¡Regresa!" Gu Hai gritó, sus manos golpearon duramente la mesa mientras sus ojos ardían.

Bai Luoyin se quedó quieto frente a la puerta mientras sus ojos se dirigían a Gu Hai. Preguntó fríamente, "¿Qué?"

"Dame una explicación".

La preocupación a la que Gu Hai aludía era tan clara como el día, es decir, con respecto a que Bai Luoyin había llevado a Shi Hui sobre su espalda para arrancar uvas en ese entonces.

"¿Qué hay para explicar? Estábamos saliendo en ese momento. Es normal hacer ese tipo de cosas. ¿Qué derecho tienes para reclamarme? ¡Te acostaste con Jin Lulu! Si quieres decirlo de esa manera, ¡¿no debería cortarte tu jodido pene?!

Al escuchar esas palabras beligerantes, Gu Hai no tenía nada más que decir.

Para cuando Bai Luoyin se metió en la habitación y se acomodó en las sábanas, ya eran pasado de las once. Justo cuando cerró los ojos, el agotamiento abrumador que lo alcanzó durante todo el día finalmente se activó con toda su fuerza.

Mientras intentaba dejar que sus ojos descansaran, un par de piernas molestas se estiraron y se entrelazaron sobre sus piernas antes de descansar, esas piernas se frotaron contra las suyas, molestándolas una y otra vez hasta que su cuero cabelludo se entumeció de ira.  Finalmente, Bai Luoyin ya no pudo soportarlo y enojado grito.

"¡Déjame dormir en paz!"

Ante esas palabras, Gu Hai puso sus manos sobre la cabeza de Bai Luoyin y la giró hacia él. En la noche oscura, los ojos completamente negros que lo miraban estaban saturados de brillantes rayos de luz que sin duda asustarían a cualquiera que los mirara.

"¿No puedes hablarme un poco más amable?"

Forzando algo de fuerza en su mano, Bai Luoyin agarró firmemente la muñeca de Gu Hai. "¿No te he estado hablando así?"

"¿Estás seguro? Has tenido esa actitud conmigo."

Gu Hai fue casi golpeado por Bai Luoyin debido a esas palabras acusadoras.

"Dime, ¿con quién he tenido este tipo de actitud?" Bai Luoyin preguntó mientras fruncía el ceño."

"¡No tienes esta actitud con ella!"

Sabiendo que Gu Hai buscaría problemas nuevamente, Bai Luoyin se había estado preparando mentalmente, pero ahora que lo estaba enfrentando, todavía estaba extremadamente enfurecido por él.

"¿Qué tipo de actitud me viste tener hacia ella? Cuando se puso de pie y esperó fuera del aula, ¿me viste ir y acompañarla? Cuando comimos, ¿elegí comida para ella? ¿O estás diciendo que intenté evitar que ella se fuera hace un momento?