ADICTIVO ... 1 ✔

CAPÍTULO 149: "BUSCANDO UN DESCANSO"

Ni una sola vez Sun Jingwei había imaginado que Bai Luoyin lo invitaría a una reunión. El propio Sun Jingwei siempre había estado interesado en qué tipo de persona era Bai Luoyin, ya que era, después de todo, el segundo hijo del general. Específicamente, lo que sabía de este joven, se basaba en lo que Gu Wei Ting le había mencionado. Muy poco era lo que sabía de Bai Luoyin, así como lo poco que sabía de su madre. Aunque era la esposa del general, rara vez tenía contacto con ella y, por lo que sabía, se la consideraba una mujer inteligente. Entonces, sin mucha interacción con ninguno de ellos, ¿cómo podría identificar adecuadamente sus personalidades?

Después de sentarse, Sun Jingwei tomó la iniciativa de hablar primero.

"¿Cómo son las clases? ¿cansadas?"

"Está bien."

Sun Jingwei sonrió suavemente antes de tomar un sorbo de su té.

"Mi hija está en su tercer año de secundaria. Ella siempre está ocupada con un montón de tareas. Parece que, por mucho que haga, nunca termina.

"Eso es inevitable ya que ella está en su último año."

Al mirarlo, Sun Jingwei notó que Bai Luoyin era un poco más tranquilo que Gu Hai. Y en comparación con los militares más jóvenes que había entrenado, parecía más serio y apasionado en su forma de hablar.

"He estado en el ejército durante mucho tiempo, así que la mayoría de las personas con las que he interactuado son de allí. Cuando hacemos algo, siempre es claro y al grano. De esa manera, avanzamos                  más rápido de una tarea a la siguiente. Debido a eso, es bastante raro que todos nos sentemos y charlemos tranquilamente. Entonces, cuando se trata de momentos en los que tengo que sentarme así y no sentir la necesidad de tomar una decisión rápida y decisiva, me resulta mucho más difícil hablar. Esto sucede especialmente cuando hablo con niños de tu edad, ya que hay una gran diferencia en la forma en que pensamos. Por lo tanto, si he dicho algo mal, perdóname.

"Tío Sun, eres demasiado educado. Eres un anciano, debería haber sido yo quien dijera esas palabras.

Sun Jingwei se echó a reír a carcajadas y le dio unas palmaditas en el hombro a Bai Luoyin: "No nos andemos más por las ramas; no tiene sentido esta conversación. No viniste a buscarme solo para platicar, ¿verdad?

Bai Luoyin se enderezó y miró severamente a Sun Jingwei, con los ojos llenos de curiosidad.

"¡Si! Hay algunas cosas que quiero preguntarte.

Esas palabras despertaron en Sun Jingwei su curiosidad mientras miraba a Bai Luoyin con gran interés: "¿Qué quieres preguntarme? ¿Sobre quién se trata? ¿El general?"

Bai Luoyin se detuvo brevemente, procesando cuidadosamente sus pensamientos: "La difunta esposa del general."

Una vez que esas palabras escaparon de sus labios, no pudo retractarse. Esas palabras aparentemente simples se pronunciaron en un tono tan firme y fuerte que la atmósfera a su alrededor se volvió algo pesada. Tanto es así, que incluso la expresión de Sun Jingwei se vio afectada por ella. En solo una fracción de segundo, ahora estaba plagado de seriedad. Sus ojos fueron tocados instantáneamente con un aura sombría que se negó a irse.

"Se trata de la madre de Gu Hai", repitió Bai Luoyin una vez más. Esta vez su voz tenía un tono más serio ya que el nombre de Gu Hai estaba adjunto a la oración.

Sun Jingwei permaneció en silencio por unos segundos más, claramente sorprendido antes de sonreír torpemente. "¿Qué te hizo querer preguntar sobre esto?"

Bai Luoyin respondió con calma: "Creo que existe un gran malentendido entre Gu Hai y su padre. Y ese malentendido reside en su madre. En lo profundo del corazón de Gu Hai, hay una relación directa entre su padre y la muerte de su madre.