Domestícame (Omegaverse) [Editando]

10 - Mango

Se despertó en medio de la noche, encima del alfa. No tenían ropa, y no sabía si era el agua del baño o sudor lo que hacía brillar sus cuerpos, pero se sentía bien, se sentía fresco.

Se movió cuando sintió que el brazo derecho se le dormía por la posición de su brazo, Jonathan estaba despierto a su lado, tapado con la misma sabana.

- ¿Cuánto tiempo llevo dormido? - Se aclaró la garganta, le picaba.

- Diez minutos, - Se levantó hasta apoyar la espalda en el cabecero, llevandose consigo al pequeño omega. Cuando lo tenía bien sujeto, alcanzó en la mesita de noche un vaso de agua. - Bebe, necesitas hidratarte.

Sus parpados pesaban. Mientras bebía agua, sus ojos fueron al ventanal, calculó que sería media noche por el ruido en la calle, era muy sutil, apenas habían coches rondando. Cuando terminó de beber todo el agua, no le hizo falta buscar la mesita de luz, el alfa le había arrebatado el vaso dejándolo en el sitio de donde estaba. Nolan se volvió a acomodar en el hombro del otro buscando un poco de calor, miró su alrededor. La ropa estaba de camino al baño en el suelo, la cajita metálica estaba encima de la cama, en una esquina abierta. su móvil seguía en su lado de la cama, con la luz indicando la entrada de un mensaje.

Separó la espalda del brazo que lo rodeaba, sentado sobre sus piernas miró enfrantando a Jonathan. No dijo nada. Solo respiró profundamente.

- ¿Estás bien? - El alfa se adelantó, rascándose la espalda, había decidido no mirarle a la cara. - ¿Quiéres que vaya a por algo para comer?

- No. - Suspiró. - Gracias. ¿Tú...? - Trago saliva, estaba obligado a preguntar - ¿Tú estás bien?

Tardó en responder, buscaba la forma de quitarle importancia a esto. Siempre ocurría.

- Sí, no te preocupes.

Estaba sentado contra el respaldo para que no lo hiciese. Pero Jonathan sentía líneas en la espalda que picaban. Algunas ardían.

Era jodidamente incómodo. Como para no serlo. Jonathan había sido un imbécil, y Nolan lo había evitado lo máximo posible, y lo entendían.

- ¿Quiéres hablar de algo?

Jonathan estiró su mano, dejándola encima del colchón hacia arriba. Parecía la respuesta a su propia pregunta. También sabía que era su bandera blanca a esta contienda, que ellos consideraban, sin sentido alguno. A pesar que Nolan sabía que no era así, sonrió timidamente dándole la mano, el alfa aprovecho y estiró su mano, el pequeño cuerpo cayó encima, quedando de costado, pero sujeto por el mayor. El movimiento de cejas indicó que esperaba una respuesta verbal.

- Sí, - La sonrisa y el ceño fruncido del alfa le encendió las comisuras de los labios. - ¿Cuántas veces van?

Era cierto, no había preguntado. Siempre preguntaba. Pero las veces que se había despertado por la noche habían sido más bien efímeras, solo se removía en el sítio después del orgasmo.

- Tres, una en el baño.

Estaba cómodo en su cuello, pero después de escuchar su respuesta se sintió en la gloria, sería difícil verle las mejillas sonrosadas desde ahí. Jonathan no dijo nada, solo sonrió al sentir como las orejas se caldeaban en su clavícula derecha.

Habían pasado diez minutos, el hormigueo que sintió en la punta de los pies provocó que los moviese lentamente, Jonathan se había dado cuenta y con la mano que sujetaba sus rodillas, descendió por debajo de las nalgas, donde sabía que a él se le acumulaba el calor.

El celo volvía, sabía que por la lucidez de los ojos de Nolan, iba a doler.

Lo acomodó boca-arriba, Nolan dejó sus manos quietas encima de su estómago, esperando al alfa. Jonathan fue hacia la cajita que siempre dejaba el omega lista antes de que él entrase a la habitación, dudó en usar el inhibidor, todavía era temprano. Pero antes de nada le dió la pastilla que tomaba durante de celo a Nolan. Mientras este lo tomaba, el alfa siguió en la cajita, tomando un paquete de condones.

El olor fue mucho más intenso, muy dulce, sintiendo como se le acumulaba la saliva en la boca, cuando terminó de colocarse el condón, al girarse, vió como Nolan estaba listo, recibiéndolo con las piernas dobladas, los dedos de sus pies recogidos, doblando la tela, y el brillo adornando su piel, parecía dócil, pero no se atrevía apostar en negar de que Nolan era muy inteligente.

Intentó tragar saliva, pero tuvo que toser por que casi más se ahoga.

- ¿Quiéres que...?

Nolan no dijo nada, solo ahogó un gemido de súplica, además estaba apoyando la cabeza en la almohada, el dolor se acumulaba en sus caderas, y la piel de su rostro estaba roja. Cumplió la petición de su breve omega, descendió mordiendo el muslo derecho, notando la fragancia de mango.

Iba a comenzar a ser obediente, como nunca lo era fuera de la habitación, pero Nolan chilló bajito intentando cerrar las piernas.

Sabía que era.

Su celo era imprevisible, como un día de tormenta, cuando creía que podía llevar las cosas con calma, el golpe resultaba impetuoso, por eso el alfa sin decir nada, rodeó con las manos las delgas piernas, estirando, colocó al omega completamente acostado. No podía prepararlo, pero el olor y el calor de su cuerpo mostraba que no hacía falta, además se tranquilizó al escuchar el ruido del lubricante que comenzaba empapar la cama, necesitaba saber si el omega estaba bien por segunda vez, y ver si todavía estaba consciente.

No pudo verlo, sus ojos estaban cerrados y su respiración comenzaba acelerarse.

Decidió no pensar mucho más, así que se acercó, y con delicadeza que parecia ausente en un alfa de su caracter se deslizó en su interior con cuidado. Supo que iba todo muy bien con Nolan cuando tragó saliva y sus ojos le miraron. Sintió como su cuerpo se hundía hacia delante, con los dedos del pequeño omega clavándose con suavidad, tras afincarse encima de él, Nolan no tardó en rodearle las caderas con las piernas.

- Por favor. - Jonathan lo escuchó en un hilo fino de voz.

- ¿Mucho?

Se comenzó a mover sintiendo el calor en su miembro, Nolan comenzó a gemir asintiendo lentamente, recibiéndole con el calor que se asentaba en su cuerpo.

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¿como va el confinamiento en vuestro país?

en españa estamos desde el 11 de marzo.

se me está acabando el rooibos

besos, anaescapes :D