Porn Star 🌟 [Markson]

Capítulo 8

- Mark Tuan, un gusto - Jackson dudó pero por cortesía y educación tomó la mano del pelirrojo sintiendo los dos una corriente por sus cuerpos, Mark sonrió por eso y Jackson se asustó soltando la mano de inmediato no siendo tan evidente.

- Bien, ¿le gustaría pasar á mi oficina para hablar mas acerca de su caso? - Mark después de dos minuto en donde notó la mirada curiosa de Jackson por que no respondía se espabiló un poco para asentir - Por aquí, por favor - señaló el de cabellos chocolate oscuro y Mark dispuesto tomó camino hacia dónde le señalaba el abogado.

Para Mark era gracioso ver hombres y mujeres jóvenes y a puestos, sobre todo hombres que eran su preferencia, todos parecían unos malditos modelos, el hace unas horas pensaba que el compañero de Jaebum iba a ser un viejito cascarrabias canoso, calvo y un traje gris apagado con un portafolio de los años 50. Vaya sorpresa se llevó al ver un Adonis en su lugar, lo peor de todo era que aquel hombre frío y distante era su maldito tipo, en casi todos los aspectos.

Jackson le abrió la puerta para que entrará y Mark ingresó con las indicaciones del abogado quien le dijo que se sentará  en una de las dos sillas frente a su escritorio pulcramente organizado, el castaño oscuro se desabrocho el traje y Mark notó aquellas manos grandes y venosas que le hicieron morderse el labio inferior por sólo imaginarias encima de su cuerpo.

- Bien, que tal si comenza... - No pudo continuar ya que Mark con un chillido hablo de algo que desubico un poco a Wang, regresando a su sistema sus nervios.

- Dios santo, ¿como es que hay tanto manjar en este Bufet? - dijo con una sonrisa coqueta viendo a los demás abogados pasar a través del cristal que mostraba gran parte del pasillo, casi ronronea al ver a un moreno caminar aún lado con sus ojos en el teléfono, Jackson fruncio el ceño.

- Señor Tuan, le pido que se controle... - Casi suelta un gruñido, pero lo contuvo, no era momento, y más sabiendo que el monumento frente a él tenía "dueño". Joder Mark era a un más hermoso en vivo y en directo, era un ángel con las alas teñidas de negro.

Un hermoso Ángel caido.

- Pideme lo que quieras bombón, pero nunca le pidas a un lobo que deje de cazar por hambre... - Sonrió socarrón y le guiño un ojo coqueto,  Jackson carraspeo, no se esperaba aquello, se suponía que estando en una relación con Jaebum, Mark seria mas recatado, pero se equivocaba - Supongo que conoces mi caso... - Jackson prestó su atención al pelirrojo, que a sus dudas con la relación que este llevaba con su mejor amigo.

- Si, estoy enterado de su caso - Si supiera que sabía de él antes de que su nombre rondará por la boca de Im. Por otra parte Mark no borraba su sonrisa mientras seguia detallando a Jackson, pensaba que entre más lo miraba más caia en aquel Adonis.

No lo juzguen, Jaebum era un gran tipo, pero el solo era un acostón de momentos, Mark nunca dijo que serían algo serio y si eso llegase a pasar Jaebum tendría que ser el amor de su vida, su media naranja, su hilo rojo, cosa que no era ni sería, Mark era un alma libre que probaba de todo un poco y era feliz con eso, y esperaba que Im entendiera su estilo de vida, ¿Por que pensaba todo esto? Pues por que al detallar a su nuevo abogado algo en su estómago se removia y sus ganas de tener al castaño entre sus piernas aumentaba cada vez que el tiempo avanzaba en aquella oficina. Cosa que Jackson no se percataba.

O tal vez si, intentaba que sus nervios no se notarán ya que cuando comenzó hablar sobre el caso de Mark este no hacía nada mas que mirarle con cierto deseo y contestar con "Si" y "No" cuando era verdaderamente necesario, cosa que incomodaba a Jackson ya que el "Novio" de su mejor amigo no debería de mirarle de aquella forma. Además tenía que admitir que quería colocar a Mark en cuatro encima de su escritorio y realizar todos sus sueños frustrados sin importar si alguien los descubría, pero el sabía controlar sus impulsos.