ATRAPADOS

◇Capitulo 2◇

EL SUPUESTO HOTEL

MORGAN WOOD

Es impresionante como el tiempo pasa tan rápido sin que nadie se de cuenta.

Se preguntaran por que lo digo; pues aquí les va su respuesta.

Las últimas dos semanas de universidad pasaron tan rápido que entre tantas tareas, proyectos finales y los populares exámenes. El tiempo no era parte de la vida.

Agradezco y tengo fe a la divinidad por dejar que yo y mis amigas pasáramos bien las materias. Aunque no saque las mejores notas del mundo, pero lo importante es que pase ¿no?.

Era de noche y nos encontrábamos con las chicas en la habitación de Elizabeth arreglando su maleta para el viaje de mañana.

-No puedo creer aun que sean nuestras vacaciones- dijo Juliet tirándose a la cama.

-Ni yo-dije, imitando su acción pero a diferencia de ella yo quede boca arriba y ella boca abajo.

Elizabeth saco una maleta de su pequeño armario y tiró toda su ropa encima de Juliet.

-¿¡Pero que te pasa?!- Gritó Juliet, tirando la ropa que le había caído en su cuerpo a otro lado.

-Estas estorbando- dijo Elizabeth para empezar a doblar su ropa y meterla en la maleta- Espero que ustedes dos tengan todo listo para mañana no pienso atrasar ni un segundo de viaje por ustedes- dijo seria.

-Por mí no te preocupes que de las tres yo soy la más emocionada- hablo Juliet- Preocúpate por la chica que tengo a la par- Se refirió a mi y estaba completamente en lo cierto.

Ya habíamos planeado ir al hotel que nos enseñó el amigo de Juliet y yo no llevaba nada empacado ni siquiera sabía cuáles eran las "actividades" que Juliet había planeado que según ella no nos arrepentiríamos de sus opciones.

Sinceramente yo ya me estoy arrepintiendo que habérselo dejado a ella pero no hay vuelta atrás.

Lo que se hizo ya se hizo.

Salí de mis pensamientos y me levanté de la cómoda cama de Elizabeth.

-Escucha Morgan si tu no tienes la maleta lista para mañana yo misma te mataré con mis propias manos- dijo Elizabeth tan agresiva como siempre.

-Yo nunca fallo- Dije para finalizar la conversación con ella.

Salí de la habitación y entre a la mía rápidamente para empezar a ordenar toda mi maleta para el viaje de mañana.

No tengo ni la mayor idea como Elizabeth se dejó influenciar tan rápido para ir a ese hotel, aunque el hotel parezca de ricos y se asemeje al mismísimo cielo no debería de tomar la decisión tan ligera.

No pude opinar mucho de mis propias molestias ya que eran dos contra una y como dice todo el puñetero tiempo la mayoría manda.

Me dispuse a ordenar mi maleta con mis mejores prendas de vestir doblando todo ordenadamente.