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*3 horas después*

*8:00 p.m.*

Narra Raymond

Llegué a la casa de Emily, bajé del auto molesto y fui directo a la puerta, toqué el timbre un par de veces pero nadie salía.

Raymond: abre maldita!. Digo enojado.

Estuve así un rato hasta que mi paciencia llegó a su límite, paté la puerta hasta que la logré derribar, entré a la casa y empecé a buscar a esa maldita.

Saqué mi pistola y estuve atento por si la veía y así poder dispararle, busqué en la sala, en la cocina y nada, entonces subí al siguiente piso y busqué en las habitaciones.

Busqué una por una, hasta que llegué a la última y al parecer era la de Emily, entré y empecé a buscar, estuve así un rato pero no la encontré.

De seguro debe que estar escondida en algún lugar de Puerto Rico, pero tarde o temprano la encontraré y haré que pagué por lo que hizo.

Por el momento debo dedicarme a buscar a Tn___, después me encargaré de Emily.

Salí de la casa y subí a mi auto, miré esa casa por una última vez y ahora me pregunto, ¿dónde podrá estar la maldita de Emily?, se perfectamente que ella tuvo algo que ver con la desaparición de Tn___, y tal vez haberme drogado también era parte de su plan.

Puse en marcha el auto y me fuí directo a la mansión, y así poder descansar un poco.

*2 horas después*

Llegué a la mansión, bajé del auto y fuí a la entrada principal, entré y al parecer todos ya se habían ido a dormir, entonces decidí ir a mi habitación.

Llegué y me fuí a recostar a mi cama, esto realmente a sido un poco difícil, mantener la calma se me está dificultando, ya que lo único que quiero es que Tn___ aparezca, volver a estar con ella, tenerla en mis brazos y volver a besar sus dulces labios.

El que la haya secuestrado, verá de lo que soy capaz, y más si le ha hecho algo indebido a mi princesa, no tendré piedad al momento de asesinar a la, o las personas que la secuestraron, no la tendré.

Estuve pensando en todo lo que a pasado por un rato hasta que el sueño me invadió y mis ojos se fueron cerrando y quedé profundamente dormido.










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