CAPÍTULO 26

58 5 0
                                    


"- Tenemos que hablar, Daniel - dije sin mirar nada en particular - tenemos que hablar sobre Damián Masters –"

...


Sam escupió del vaso que bebía mientras Paulina y Damián retrocedían un poco

- ¡Ew! ... ¡Fíjate por donde escupes! - chilló la morena - vamos Damián, te presentaré gente que si vale la pena conocer - y diciendo esto, arrastró al chico que antes de irse nos dedicó una rápida mirada

- ¿Escuchaste eso? - Preguntó Sam limpiándose

Pero poco le escuchaba en ese momento.

El hijo de Vlad Máster... ¡De Vladimir Master!... su hijo, ¡su hijo estaba aquí!... En la misma ciudad.

¿Podría ser cierto? ¿Sería ese chico, el hijo de aquel gusano? Pero, ¿no lo confirmaban sus ojos? ¿No era esa su misma forma de sonreír? ¿No era esa su manera galante de mirar? ¿No era ese su porte fino y educado de vestir y hablar? ...

Eso era lo que trataba de recordar, ese chico tenía la misma estampa de su padre, como una sombra de alguien que quería olvidar. De alguien que había deseado no volver a ver jamás.

Ahora su propio hijo me perseguía como una jurada venganza. Como una sombra, acorralándome en la misma ciudad. En la misma escuela.

¿Podría ser cierto? ¿Sabría él toda la verdad? ¿estaría aquí bajo el legado de su padre?

- ¿Ani? ... ¡Ani! ¡Responde! –

- ¿Eh? ¿Que? - Me incorporé mientras la imagen de Sam frente a mí volvía a enfocarse

La gótica estaba tan cerca de mí que parecía querer sofocarme

- Ani, tus manos... - volví la mirada viendo cómo entre mis dedos una luz verde comenzaba a resplandecer - Tienes que calmarte, amiga -

Parpadeé varias veces y traté de respirar, aunque el aire se sentía pesado y las luces y las voces de hacían distantes

- Es su hijo... - Comenté

Sam se apartó un poco y una sombra cubrió su rostro

- No. no puede ser cierto –

- Jamás super que Masters tuviera un hijo – comenté pensativa

- Tampoco yo. Pero, no es algo que él contaría... -

- ¿Será verdad? –

- ¿Qué hace aquí? –

- ¿Crees que vino por...? –

- ¿A qué otra cosa vendría, Sam? –

- Ani, tus manos. ¡cálmate! ... Habló de un intercambio... no podemos creer que... –

- ¿Enserio le crees? A ver, Sam. Un bastardo multimillonario gasta toda su fortuna en conseguir algo y es derrotado por una adolescente, ¿crees que dejara el juego tan fácilmente? –

- Pero Damián no parece... –

- Por favor Sam, apenas lo conoces. Es obvio que quiere... –

- Tú igual - cortó Sam – sí, todo es demasiado extraño... pero no puedes jurar enemistad a alguien sin conocerle primero... Creí que no te había gustado cuando Daniel había hecho lo mismo contigo –

The Ghost   [ Re subiendo ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora