House Of Cards (Desilusión). "Taehyung or V"

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Aguantándote más, sosteniéndote. Es tan difícil. No podemos

***

Lentamente, bajé por la empinada calle buscando con la mirada el lugar en el cual habíamos quedado. Después de un viaje de autobús y unos minutos andando, me encontraba en un barrio lujoso, con hermosas casas bien hechas, y bien protegidas; cabe de recalcar. Era la monstruosidad de los excesos de algunas personas en una sola zona. Todo lo que me rodeaba era solitario y muy calmado, cosa muy entendible debido a las dificultades de vivir en el centro de una concurrida ciudad. De igual forma, esa soledad era abrumadora para mí.

"La desigualdad se siente más al entrar a estos sitios" pensé, deteniéndome.

Me apoyé de una pared y acomodé mejor uno de mis zapatos, por andar viendo fijamente un pequeño conjunto departamental, casi hacia que mi zapato se saliera de mi pie. Había quedado atónita, al ver que uno de los edificios era igual a uno que estaba por la zona en la que vivía; la única diferencia era que la rente y el valor de esas tierras debían de ser abismales. Ya lista, proseguí mi camino buscando ese lugar de encuentro donde algunas veces habíamos quedado para vernos, aunque en esos momentos siempre habíamos estado acompañados por nuestro grupo de amigos. Que extraño.

Apresuré mi paso viendo a lo lejos un pequeño parque, adornado por un limpio camino empedrado, y que tenía en el medio una estructura roja que se asemejaba a una cabaña sin paredes al estilo asiático; además, también había las típicas estructuras para que los niños jugaran en ellas. En todas las veces que había ido a ese sitio nunca había visto un niño jugar en ese parque. Cuando me hube acercado cada vez más, pude ver la cabeza de un joven sentado debajo de la estructura roja, mientras testeaba unas cosas en su teléfono.

La costumbre y la diversión casi me hicieron gritar su nombre, pero me contuve; me sentía extrañada al no estar acompañada de Hoseok, quien se unía siempre a mí en esa particular forma de llamar la atención de nuestros amigos. Contuve la respiración, debía escribirle a Hoseok, se me había olvidado por completo. Con el estuche de maquillaje en una mano y con mi teléfono en la otra, corrí hasta estar al frente del pequeño parque.

Me detuve por unos segundos calmando mi respiración, para luego voltearme hacia donde estaba el chico que había visto hace segundos. Él se había dado cuenta de que había llegado, y por eso me estaba mirando con una sonrisa mientras agitaba su mano en mi dirección. Hice una rápida inclinación desde donde estaba, y de ahí, caminé apresuradamente hasta donde estaba Taehyung tranquilamente sentado esperándome; sonreí alegremente.

—¡Ey! Taehyung-ah, cada vez que te veo por fuera del trabajo me impresiona tu dualidad.— hablé inmediatamente que Taehyung y yo estábamos de frente. Él sonrió de forma tímida tomando mi estuche de maquillaje entre sus manos, para después volverse a sentar en donde estaba, pero estaba vez manteniendo ese gran estuche negro en sus muslos mientras se sujetaba a este. Yo, por mi parte, me recosté cansada en una banca de madera que había debajo de la estructura roja— Antes de que se me olvide, ahí está lo que me pediste.

—¡Oh dios! Gracias, tu desmaquillaste natural es mejor que él que nos dan en el trabajo— con su voz profunda, pero con su mirada de niño, Taehyung observo con alegría el pequeño envase de desmaquillaste que había en mi estuche. Luego de eso, y por su entusiasmo, aprovecho la oportunidad para tomar mi mano y apretarla suavemente.

—No hay de que, aunque debería empezar a cobrarte al igual que lo hago con Hoseok-ah.

Con aire de suficiencia, me dirigí a Taehyung sonriendo como el gato de Alicia en el país de las maravillas. Hacia unos días había hecho lo mismo con Hoseok, justo en el momento que pretendía abordarme para pedirme algo. Ahora me interesaba ver como reaccionaba Taehyung, ya que ambos tendían a ser muy expresivos cuando los tomaban por sorpresa.

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