Diferencia de Edades. [Larry Stylinson]

Capítulo Veintiséis

ADVERTENCIA: Contenido fuerte sobre escenas de violación, por lo que realmente pido discreción al momento de leerlo, gracias.

Perdón.

Pov's Louis

Una vez más, me encontraba en mi preciado automóvil conduciendo hacia mi trabajo. Me sentía completamente feliz, de algún modo, es como si hubieran pasado años desde que conocí a Harry.

Me hizo cambiar, me dio alegría, además de muchas cosas. Pero, sin duda, no me arrepiento de tenerlo en mi vida, y, si fuera por mí, lo tendría por siempre a mi lado, siendo solo mío.

Este auto, aunque no lo parezca, también pasó por muchas travesías conmigo, llegué a chocarme unas cuantas veces, pero, por suerte, ninguna fue con gravedad, sin embargo, llegué a asustarme en algunas ocasiones pensando que si fue serio y que no volvería a ver a mi auto.

Muchas veces me dijeron que lo cambiara, que podría tener uno mejor, pero esa jamás fue mi intención, porque aunque todos lo vean solo como un objeto material, para mí tiene mucho valor.

Debería proponerle a Harry que hagamos un viaje con esta belleza, anteriormente había salido de la ciudad, pero siempre fue estando solo. Ahora tener algo de compañía sería maravilloso mientras recorremos diferentes partes del país.

Aun falta para que sean las vacaciones de los estudiantes, pero podría programar desde ya mis días libres para esas semanas. Solo espero que Harry no tenga que necesitar cursos de verano, debo decirle que no repruebe ninguna materia, sé que puedo convencerlo de ponerse a estudiar.

Puedo reírme por horas ahora mismo, sí que ha pasado el tiempo. Antes no podía imaginarme programando citas, menos estando con alguien que me ame, una persona que corresponde mis sentimientos.

Es tan inusualmente raro. Pero es mi Harry y lo que más quiero en el mundo, es su felicidad.

Mi trabajo ya se veía a la distancia, ya iba a llegar, una nueva semana estaba comenzando, un nuevo día empezaba y yo solo podía sonreír ante mi futuro.

Estacione mi automóvil en el lugar de siempre y salí con mi portafolios en la mano, acomodé un poco mi saco mientras caminaba lentamente hacia la entrada de mi edificio. Saludé a las pocas personas con las que me cruzaba en el estacionamiento y me dirigí al ascensor.

Cada vez que estoy en él, recuerdo a Harry. Mi sonrisa creció al mismo tiempo que las puertas se cerraban, pero ellas nuevamente se abrieron en el primer piso, sin embargo nadie entró. Sin embargo, eso no quitó mi ánimo, en cambio, las vi volver a cerrarse, pero una mano las detuvo.

—¿Señor Louis Tomlinson? —preguntó un oficial de policía.

—Sí, soy yo, ¿qué sucede? —cuestioné con el ceño fruncido. Esto no podía estar pasando.

—Venga con nosotros —dijo el oficial, agarrando mi brazo para sacarme del ascensor.

No entendía, realmente no comprendía lo que estaba sucediendo, pero apenas salí del cubículo recibí una fuerte bofetada en mi mejilla izquierda que me hizo ladear la cabeza.

Ni siquiera pude levantar mi mano hacia el golpe, para aplacar un poco el ardor que estaba sintiendo, ya que uno de los policías agarró mis muñecas y las llevó hacia atrás.

Sin embargo, al levantar la mirada lo primero que observé fueron unos ojos llenos de tristeza, dolor y enojo, en el rostro de una persona que conocía, pero que no entendía porqué me veía así.