The Life of Abby {terminada}

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Eran las 9:00am y yo ya estaba despierta, muy agotada, por cierto, mi madre se había quedado en mi habitación y cuando volví de celebrar solo pude acurrucarme en sus brazos para que mi mente no me torturara durante lo que restaba de la noche.

Ya me había duchado y arreglado, había decidido extender mi viaje un poco más, por todo lo del desfile no pude divertirme y recorrer la ciudad y siendo que mi familia También estaría unos días más, me quedaría con ellos, Lucy por el contrario debía volver, tenía a su madre enferma y extrañaba a su esposo.

Tenía hambre así que ordene servicio al cuarto mientras terminaba de arreglarme, mi madre se había ido temprano a su habitación, por lo que tenía la mía completamente para mí.

-Buenos días, servicio al cuarto- hablo una voz detrás de la puerta, me levanté y fui a abrir la puerta.

-Muchas gracias- dije tomando la bandeja y luego le tendí una propina al chico quien me agradeció con la cabeza y luego desapareció por el pasillo.

Me senté en la mesa a comer el desayuno, destapé la bandeja y había un plato repleto de comida, desde huevos revueltos, jamón, hash Brown y un jugo de naranja al lado derecho. Al lado izquierdo había una tarjeta color crema, doblada, la desdoble y dentro estaba escrito a computadora un mensaje hermosos

Eres increíble, lo hiciste genial ayer.

Mamá, Caden, April, Coco y Caleb.

Sonreí, ellos son lo mejor que tengo en mi vida y siempre lo serian, me pareció un lindo detalle que hallan añadido Caleb.

Termine mi desayuno y ordene un café, ya había pasado un rato desde que no consumía cafeína. Me senté a esperar en el balcón, observaba todo y me sentía un poco nostálgica

Yo nunca te rompería el corazón Abby, claro.

Suspire y antes de siquiera poder suspirar tocaron la puerta, me levante y me dirigí a la puerta.

-Me dijeron que querías un café- hablo Caleb tan pronto como abrí la puerta.

-hola- salude -como supiste? -pregunte curiosa.

-entre a la cocinas por algo de comer y bueno, me dijeron que habías pedido un café, y me ofrecí a traerlo- contesto y yo sonreí, claro, es hijo de Melissa.

-pasa- dije y no fue hasta ese momento que me di cuenta de que estaba con la bata de baño blanca, me avergoncé un poco, pero al final era mi habitación y no pretendía sorprender a nadie. Solo me había dado tiempo a maquillarme por lo que no me veían del todo destruida, Caleb se sentó junto a mí en una pequeña mesa que había en una esquina de la habitación.

-qué piensas hacer durante el día? -pregunto Caleb mientras tomaba de su propio café, el cual por cierto tenía una taza muy bonita, era blanca completamente y en el medio estaba su nombre grabado en letras color oro.

-me quedare unos días más, para hoy estaba pensando salir a dar un paseo sin rumbo, para conocer un poco la ciudad, claro, luego de llevar a Lucy al aeropuerto, debe irse hoy- le conté y este asentía.

-debe volver por su esposo no? -yo asentí y lo miré confundida -hablamos un rato durante el desfile- dijo y ambos reímos, nadie podía hablar por 10 segundos con Lucy sin que esta sacara el tema de su esposos, me parecía un detalle muy tierno, Stephan tampoco era que pudiese quedarse mucho tiempo sin hablar de Lucy.

-si quieres podemos llevar a Lucy hasta el aeropuerto y luego llevarte a conocer la ciudad-se ofreció Caleb y yo sonreí.

-me encantaría, pero con mi familia hemos quedado en ir a llevar a Lucy, almorzaríamos aquí en el hotel y luego recorreríamos la ciudad juntos e iríamos andando- dije y este asintió.