PODEMOS EXPLICARLO

CAPIULO 15

-toga cállate- dijo Leonardo mirando al chico para luego ponerse a llorar eso solo hizo reír mas al joven, llevándose una mirada del tigre mayor que pareciera como si en cualquier momento estaría listo para matarlo y el menor dejo de reír conocía a su padre y conocía como era cuando se enojaba en cualquier cosa que involucrara a su madre.

-hay cachorro- susurro tora acariciándole la cabeza, Leonardo al sentir a su gato con él se lanzó a sus brazos y lo apretó mientras lloraba a todo pulmón, tora se sentía desolado al ver a su amado de esa manera tan triste, su corazón se encogía y se entristecía con solo escuchar los sonidos que salían de su boca- ya tranquilo amor, todo estará bien- susurro mientras le acariciaba el caparazón, se sentó en el suelo y acomodo a Leonardo arriba de sus piernas para poder consolarlo de mejor manera, se sentía completamente inútil.

-no me dejes por favor- fue el único susurro que el gato logro entender que salía de los labios de la tortuga, el tigre lo separo con cuidado y le limpio las lágrimas con su lengua haciendo reír al menor, luego froto sus mejillas mientras ronroneaba, era su manera de mostrarle todo el amor que tenía por él y que nunca en su vida pasaría por su mente la siquiera idea de apartarse de su vida.

-nunca te dejaría, eres mi vida y mi mundo al igual que los que están hay dentro- le susurro en el oído como quien guarda su secreto más importante y para el de pelaje eso era la tortuga y los pequeños que estaban dentro, eran su tesoro y como buen pirata no dejaría que nadie lo tocara, el protegería lo que es suyo con dientes y garras.

-tora- chillo con lágrimas ahora de felicidad genuina y lo abrazo con una sonrisa, el felino ronroneo y lo abrazo mientras que todo su cuerpo demostraba lo feliz que se encontraba, tendría cachorros y con el amor de su vida, eso lo volvía intensamente feliz y teniendo en cuenta como era tora se alegra saber que sabrán como criarla.

Doni y toga se encontraban apartados mirando a ambos con cariño y ternura, doni esperaba que fuera así cuando él y Mike tuvieran hijos, deseaba con gran potencia saber cómo serían esos niños que crecerían de su amor, pero bueno...el futuro es algo que él tenía que esperar aún no era tiempo de esos sucesos y él lo entendía, por ahora solo disfrutaría con Mike y le demostraría todo lo que lo amaba, todos los días del año por todos los años.

Toga por otro lado miro como el aura de sus padres se mezclaban con la suya y la de su hermana, bueno los ellos que aún no habían nacido, eso lo hacía feliz era raramente hermoso la forma en la que su familia desde antes se amaba y los amaba a ellos, era una información que lo alegraba de sobremanera.

Todos voltearon al escuchar un ruido, de pronto tres sombras llegaron desde lo más alto del cielo, en un momento la luna estuvo detrás de ellos mostrando la elegancia y la gracia que sus poses. Las tres sombras cayeron en el suelo con sus capas tapándoles el rostro. El tigre mayor gruño mientras se levantaba y de forma lenta se colocaba al lado de la otra tortuga y el otro tigre.

-tenían que hacer su maravillosa entrada ¿verdad? – dijo el menor de los tigres caminado hasta las tres sombras, al mismo tiempo las tres se bajaron la capa mostrando unos rostros ya conocidos.

-leo grande- dijo doni haciendo reír al mayor de los Leonardo, la cara que había colocado el menor era sorprendentemente graciosa, olvidaba lo divertido que podía llegar a ser su hermano más inteligente.

-soy yo- dijo mientras se acercaba al tigre que tenía cargado a Leonardo que de tanto llanto había caído rendido hace unos pocos minutos. Toco el rostro del menor y suspiro un poco aliviado, todos los del pasado lo miraron expectante- ya recupero el calor de su cuerpo, doni el por ahora seguirá teniendo la temperatura alta, pero es necesaria, tomara varias características de un felino, así que no te preocupes si te gruñe o aruñe, será normal si no está con tora- explico el Leonardo del futuro, esa época le fue muy dura, eso era algo que recordaba a la perfección, pero en ese tiempo solo tenía a tora, ahora tenía a sus hermanos menores y eso le causaba gran alegría.