Preguntó Lan Zhan, degustando una humeante taza de té, mientras Lan Wangji estaba sentado junto a la ventana con un libro en sus manos.
Después de salir de la zona de omegas habían ido a su habitación.
-Nosotros ya lo aceptamos como nuestro.-Habló Lan Wangji.- Nuestros alfas no entraron en conflicto aquella vez a pesar de ser un omega para nosotros dos.
-Los ancianos van a reclamar de manera insistente cuando sepan que los dos vamos por el mismo omega.
-Para lo que nos interesa. -Respondió Lan Wangji.
-Sus hijos...-Comentó Lan Zhan.
-Tu también lo sentistes cuando los vimos por primera vez ¿verdad?. -Lan Wangji miró a su hermano.
- Pensé que solo era mi imaginación, pero viéndolos bien...
-Son nuestros.
-Hnm...-Gruño Lan Zhan frustrado.
Habían encontrado al omega que rondaba sus sueños y ahora parecía que eran padres.
-Solo el nos puede decir, pero estoy más que seguro que sus edades coinciden con aquella fecha. -Dijo Lan Wangji.
-¡Capitanes!. -La puerta fue abierta de forma estrepitosa mostrando a Mian Mian.
-No grites dentro del palacio. -Gruño Lan Zhan.
-Pide permiso la próxima vez. -Dijo Lan Wangji.
-Oh, y yo que venía a ayudarles con el lindo Wei Ying. -Dijo Mian Mian mientras tomaba asiento.
Los dos alfas no pudieron disimular la sorpresa.
-¿Como...?. -Dijo Lan Zhan.
-Mis capitanes, no me gane este rango en este reino por mi bella personalidad. -Dijo esta sonriendo.
-Wei Ying. -Susurró Lan Wangji. Ahora sabían como se llamaba.
Habían pensado en sacarle el nombre a Jin Zixuan ya que este estaba detrás de la pequeña omega, que parecía ser amiga del pelinegro.
-Ahora. Él es el omega de aquella vez ¿verdad?, de cuando les llegó el celo en aquellas tierras. -Ella en verdad no necesitaba respuesta, estaba más que segura. -No la van a tener nada fácil con ese lindo omega, mis apreciados gemelos. -Mian Mian esquivó la mirada fría que Lan Wangji le daba.
-Por lo que me han contado. -Continuó. -No la ha pasado muy bien. Al parecer sus padres fueron asesinados por soldados de aquel reino. Y por lo que me dijeron la gente de ese pueblo y los omegas que traje, pasó su embarazo solo, ya que nadie sabía quién era el padre. -Mian Mian los miró a Lan Zhan y despues a Lan Wangji. -O padres de los niños.
Un dolor se alojó en el pecho de ambos alfas. Ellos no pudieron seguir buscandolo ese día.
Debieron seguir buscandolo.
Eso era algo que los carcomia por dentro y ahora sabían bien por qué.
-Ustedes no tenían forma de saber todo eso. -Dijo Mian Mian. -Estabamos en plena guerra. Ahora tienen que ver la forma de conquistarlo.
-¿Por que nos quiere ayudar?. -Preguntó Lan Wangji.
-Por que los aprecio mucho. -Dijo poniendose de pie. -Y para ver si por fin puedo ver una sonrisa en ustedes. -Dijo mientras salía por la puerta.
La habitación quedó en completo silencio.
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