30. ¿Cambio de ambiente? (Parte 1)

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A las cinco pasadas me encontraba frente el dormitorio de Maia, justo como habíamos quedado.

-¡Khanna!- No habían pasado ni siquiera segundos de haber tocado el territorio cuando ya veía a Maia salir por la puerta principal. -Lo lograste, vamos, ven- agarro mi mano enseguida y me arrastro prácticamente hacia el interior del edificio.

Los dormitorios regulares de la universidad tenían un ambiente mucho mas social que los privados. Mientras que donde yo vivía el edificio consistía de solo puertas cerradas y escaleras, el de Maia tenía un pequeño Lobby en la parte baja donde mas que nada los estudiantes podían pasar su tiempo libre y... socializar con otros.

Pero en su defecto, las habitaciones no tenían baño propio.

Maia me llevo a un conjunto de sillones donde a las únicas personas que reconocí eran obviamente Miles, Franschesca y Peter. No obstante, habían quizá otras cinco personas más allí reunidas, de las que quizá solo medio había visto sus rostros en clase.

- No me mencionaste que iba a ser un grupo tan grande- agregue casi al oído de Maia procurando que nadie más lograra escucharme. Ella simplemente se encorvo de hombros y sonrió sentándose enseguida en un sillón e indicándome que me sentara a su lado.

- Bueno chicos, ya que llego Khanna, podemos comenzar- menciono super emocionada y deslizándose al borde del sillón.

- ¿Comenzar con qué?- susurre confundida

De repente observe como uno de los chicos sacaba de su bolsa una botella y unos vasos de plástico rojos, seguido de que otros dos del grupo hicieran exactamente lo mismo.

Fruncí el ceño y reí nerviosa.

-Bueno, ¿Qué vamos a jugar?- agrego una chica peli castaña que tampoco reconocía pero que me parecía haber visto en clase de guion.

- Ya, pues yo me he descargado esta App buenísima- Respondió uno de los chicos mostrando su celular.

Si mis instintos bien no me engañaban, lo que ellos planeaban hacer: uno, era prohibido en el campus y dos, no iba para nada conmigo. La única vez que había bebido en mi vida había sido quizá en la preparatoria y ni siquiera sabía si a aquello se le podía llamar "beber".

Solo había sido una copa de vino con tía Mandy en su cumpleaños y ni siquiera me la había bebido completa.

-Ehm Maia- le toque el hombro y mirando al resto con una sonrisa, me puse de pie y la cogí del brazo obligándola a ir conmigo.- Yo no bebo, no puedo, de hecho, nunca lo he hecho de verdad... no creo que sea una buena idea- agregue a una distancia prudente para que el resto no pudiera enterarse.

- Ohh- enarco ambas cejas- Ehm, bueno, yo tampoco es que tome demasiado.- poso su mano sobre la barbilla.- No tienes que tomar si no quieres

- Pensé que era un pequeño festival, no pensé que uno se preparaba de esta manera para ese tipo de eventos- Fruncí el ceño.

- Bueno- Hizo una pausa y movió la cabeza de un lado a otro- más que un festival es algo así como una "Pequeña" fiesta de bienvenida...- Se encorvo de hombros sonriendo divertidamente.

- No creo que-

-Ow, vamos Khanna- me interrumpió tomándome ambas manos- va a ser divertido- sonrió- además- hizo una pausa- necesitas salir de tu mente por un rato- golpeo suavemente con su dedo índice mi frente y sonrió comprensivamente- necesitas refrescarte, una pausa, ya sabes.

Por muy poco cómoda que me sentía con la situación, Maia tenia razón. Si me quedaba mas tiempo encerrada en mi cuarto o encerrada simplemente en mi cerebro, iba a quemar mis neuronas. Necesitaba respirar un rato... necesitaba un cambio de ambiente y que mejor que asistir a una "pequeña" fiesta de bienvenida en la universidad.

¿Han oido hablar de un chico llamado Howl?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora