- ¿Khanna esta todo bien?- Maia me había tomado del brazo y me había alejado del grupo con la intención de hablar- No es que tenga algo en contra de que te diviertas... o tomes...- Agitaba lentamente las manos mientras hablaba- Pero creo que fue demasiado repentino- me miro y se quedo en silencio esperando una respuesta.- ¿Estoy siendo aguafiestas?- Frunció el ceño hablando mas para sí misma que dirigiéndose a mí.
- ¿Es eso una pregunta retórica?
- No... bueno si, si es - sacudió la cabeza- pero ese no es el punto amiga- poso ambas manos sobre mis hombros y me miro- Solo quiero saber que todo esté bien- sonrió preocupada.
¿Cómo le explicaba a Maia la situación? Era imposible. Comenzando por que el chico del que de alguna manera estaba huyendo, era probablemente uno de los mas populares entre las chicas de la universidad, incluyendo a Maia. ¿Quién creería que aquel personaje tenía un alter ego que no era del todo agradable y carismático?
-Maia- sonreí posando mi mano sobre su brazo izquierdo- todo está bien.
-¿Segura?- frunció el ceño
- Si- reí levemente- Ya sabes- hice una pausa y la solté- solo me di cuenta que la única forma de sobrevivir la noche, era uniéndome al lado oscuro- le pique un ojo burlona.
¿Enserio?¿lado oscuro?
Maia se rio y me abrazo- Oww está bien, vamos- me soltó y enseguida volvió a tomarme de ambos brazos- hay que disfrutar la fiesta- sonrió y enseguida nos encaminamos de nuevo hacia el grupo.
Procure no alejarme de ellos en ningún momento. Había pensado varias veces en irme y dejar la fiesta, sin embargo la idea de salir y caminar sola por el campus a esas horas me llamaba muchísimo menos la atención que el que Levi estuviera bajo el mismo techo que yo. Además, poco a poco sentía que el estar con amigos de alguna u otra manera me hacía sentir mejor.
Eso o que probablemente los dos vasos de "no-se-que-tipo-de-asquerosa-bebida-era-esa" ya comenzaban a hacer su efecto.
Con el tiempo empecé sentirme levemente mareada, sin embargo, no mareada mal, si no más bien como si estuviera flotando, como si de repente mis extremidades hubieran comenzado a perder peso y a desatarse de la tierra.
Unos chicos super random habían venido al grupo a preguntar si queríamos jugar "Beer-pong" con ellos y por muy extraño que sonara, fui yo quien sin siquiera pensarlo dos veces había aceptado el reto.
Idiota.
Después de jugar piedra papel o tijera, Miles y yo terminamos siendo pareja para jugar en contra de los otros dos estudiantes, que a distancia se veían mayores que nosotros.
- Bueno- dijeron los chicos al otro lado de la mesa- metemos la pelota, ustedes toman, meten ustedes la pelota, nosotros tomamos- hizo una pausa y rio- fondo blanco obviamente.
- Miles- susurre- ¿Qué es fondo blanco?
Miles me miro desconcertado esperando a que la pregunta fuera una broma. Enseguida se hecho a reír. – ¿Enserio?- siguió riendo- a ver- respiro y se acercó a mi oreja sin quitarle el ojo a los vasos frente a nosotros- significa que si la pelota toca el vaso, tienes que tomarte este mismo de una sola vez- se separo y me pico un ojo seguido de reírse un poco más.
- Ah- observe los vasos e inconscientemente hice una mueca de asco.
¿En qué me metí?
- ¿Están listos?- exclamaron los chicos.
Varios estudiantes se habían posicionado a nuestro alrededor para mirar el juego que evidentemente íbamos a perder con todas las de la ley.
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¿Han oido hablar de un chico llamado Howl?
Novela Juvenil¿Alguna vez han pensado en la posibilidad de encontrarse con alguien a quien podrían comparar fácilmente con un personaje ficticio? Bueno... pues yo sí, de hecho, hace un tiempo lo conocí. Su nombre es Demian Carter, un chico misterioso al que todo...
