Capítulo 28. No tengas prisa

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Me desperté aturdida oyendo unos ruidos que procedían del salón, cuando pude despejarme y escuchar de que se trataba tan solo pude escuchar un Adiós de Mimi con un tono alto y que parecía algo enfadado antes de que la casa quedase completamente en silencio ¿Qué coño estaba pasando? Apenas pude pensar en lo de anoche, por un momento había pasado por alto todo eso, hasta que fui a levantarme de la cama para ir a ver qué estaba sucediendo cuando me di cuenta que aún seguía desnuda- ¡Mierda! -cogí rápidamente lo primero que encontré para vestirme no sin antes recordar lo sucedido hacía apenas unas horas. Fue increíblemente precioso, era mi primera vez con una chica, y por lo que intuí, Mimi ya se conocía el terreno. Tengo que decir que, a pesar de ir algo pasada de vuelta, recuerdo la noche con todo lujo de detalles, y la verdad, debo agradecer haber tomado algo de más porque sino jamás me habría atrevido a dar el paso. Cuando terminamos, quedamos las dos tumbadas en la cama, descansando, no recuerdo cuando me dormí, solo sé que estuvimos un buen rato una al lado de la otra, disfrutando de lo más simple, de la forma más intensa- ¡Joder! -no pude evitar sentir algo de miedo al cruzar esa puerta que me llevaría de nuevo enfrente de Mimi, ¿que pasaría después de aquello? ¿Seguiría todo igual?

- ¿Pasó algo?

- Nada, ¿por?

- Me despertaste con tus gritos...

- Perdón, estaba hablando por telefono

- ¿Hablando? -dije sin creerme lo que me decía, era evidente que estaba discutiendo con alguien, y la notaba algo preocupada por eso, así que intenté sonsacarle de qué se trataba.

- Sí, hablando.

- Mimi, estabas gritando, si no no me hubieses despertado, ¿que pasa? -dije sin tapujos para que me lo contara.

- Ya te he dicho que lo siento, además que son las doce así que ya era hora que te despertaras ¿o no? -dijo Mimi zanjando el tema- Voy a ducharme

¡Joder! La había cagado de nuevo ¿qué había pasado entre anoche y ahora para que Mimi estuviese así? ¿Era culpa mía o me había perdido algo mientras dormía? Quizás tenía todo eso demasiado idealizado, no todo era como en las películas, pensar que saldría por la habitación y que Mimi estaría esperándome para tomar un delicioso desayuno como un feliz matrimonio era de ser una ingenua total y quizás también algo gilipollas. Debería haber pensado que, existía la posibilidad de que después del polvo no sucediera nada más, que Mimi fingiera como si no hubiese pasado nada o que actuara como una gilipollas conmigo, quizás no pensé en que algo podría salir mal porque sino no me hubiese atrevido a dar el paso. Y allí estaba, sin poder retroceder en el tiempo y sin poder saber que coño le pasaba a Mimi, necesitaba pedir un consejo a alguien, y esta vez iba a confiar con alguien que jamás hubiese imaginado.

Ana Guerra

Buenos días!

Perdona que te moleste...

¿Puedes hablar?

Necesito comentarte una cosa

Es sobre Mimi...

Ricky (Amigo Mimi)

Buenos días Ana! 

Ya casi tardes... 

jeje que bien vives

Que sorpresa que me escribas

Dime!

Ana Guerra

¿Sabes si le ha pasado algo a Mimi?

Atrapadas en Madrid | ‪WARMIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora