Me Casé Con Mí.. ¿NiÑERA?

Capítulo 15

Juls: —Wow– dijo ella —¿tú preparaste todo esto y además la cocina quedo intacta? –Dijo riendo— has mejorado mucho princesa –dijo.

Val: —Voy mejorando de apoco –dije, sirviendo jugo en nuestros vasos.

Juls: —Y.. ¿Cómo amaneciste? –Preguntó tomando un sorbo de su jugo.

Val: —Mucho mejor que ayer –dije.

Juls: —Me alegro princesa—dijo—y se puede saber ¿a dónde iremos?—preguntó curiosa.

Val: —Pues, pensaba salir a buscar más soluciones y esperanzas a lo que te dije ayer –dije con brillo en mis ojos.

Juls: —Me parece estupendo—contestó.

Terminamos de tomar el desayuno, ella muy amablemente se ofreció a lavar los platos y yo soy tan buena que no pude rechazar una gran oferta como esa, subí nuevamente las escaleras y tomé mi ropa la cual que había dejado lista en la mañana que me levanté, me la puse, cepille un poco mi cabello y rocié un poco de perfume sobre mi cuello haciendo que la habitación entera se impregnara de el maravilloso aroma.

Narra Valentina

Juliana y yo ya nos encontrábamos en un nuevo hospital el cual no había consultado, entramos al gran edificio con la esperanza de que hubiera una solución a mi problema, aunque la doctora Román había sido muy clara al decir que tenia 1 oportunidad en 10000 de poder tener un sólo hijo, Juliana y yo no estábamos decididas a darnos por vencidas.

Juls: —Estas nerviosa ¿cierto? –Preguntó, tomando mi mano en forma de apoyo.

Val: —Si, lo estoy y no sabes cuánto –respondí.

Juls: —Aunque no lo creas, yo también lo estoy, pero hay que tener fe y veras que todo esto tendrá una solución –dijo.

Val: —Te amo –dije.

Cruzamos las grandes puertas del Hospital y nos dirigimos hacia el ascensor y Juliana se paro petrificada frente a el.

Juls: —No pienso subirme ahí –dijo.

Val: —¿Por qué? –pregunté, yo misma sabia el por qué y no me explicaba porque había hecho esa tonta pregunta.

Juls: —No preguntes que bien sabes que soy Claustrofóbica–dijo.

Val: —Bueno señorita yo me subo a los ascensores, por allá –le señalé —se encuentran las escaleras, puedes empezar subiendo tu sola, no pienso subir 15 pisos arriba caminando –dije, llamando al ascensor.

Juls: —¿Me dejarás que suba yo sola 15 pisos?– dijo.

Val: —Sí –respondí indiferente –a menos que quieras subirte al ascensor.

Juls: —Tú muy bien sabes que no puedo, no sé ni porque sigo parada junto a ti –dijo molesta y se marchó hacía las escaleras, para empezar su largo recorrido.

Las últimas palabras que el pronuncio “no sé ni porque sigo parada junto a ti” en verdad me dolió, no sé si para ella hubiesen sonado con doble sentido pero para mí si lo fue, pero preferí no tomarle importancia, el ascensor ya estaba abierto frente a mi, pero reflexioné y decidí empezar a subir las escaleras para poder alcanzar a Juliana, lo admito no fue muy cortés de mi parte responderle de ese modo y no es una forma de pagarle lo que ha hecho por mí y la tengo que apoyar en todos sus miedos al igual que ella lo ha hecho estos últimos años.
Subí corriendo hasta el piso numero 4 casi corriendo, pero en realidad Juliana era rápida, la logré alcanzar casi en el 7 piso.

Val: —Espera y ten piedad en mí, no estoy acostumbrada a esto –dije y le regalé una sonrisa. Ella se paró y dio media vuelta al verme me regalo una de sus hermosas sonrisas.

Juls: —No tienes que hacer esto por mí—dijo.

Val: —Tú te has sacrificado muchas veces por mí, y ahora es justo que lo haga por ti. ¿No crees? –le pregunté.

Tomó mi mano y juntas caminamos o más bien subimos los 8 pisos que a un nos quedaba por delante.

Val: —Por fin llegamos –dije.

Juls: —No seas dramática—dijo sonriendo.

Val: —No soy dramática, acabo de subir 15 pisos caminando –dije.

Juls: —No te quejes te acostumbraras –dijo, yendo hacia la secretaria.

Val: —¡QUE!–dije angustiada.

Juls: —Jajaja debiste ver tu cara princesa—dijo en tono burlón—no te preocupes que la próxima vez te subiré en mi espalda.

Val: —Que esperanzas –dije sarcástica— pero ya que, es mejor que subir casi muriendo—dije.

Juls: —Buenos días –saludó muy amablemente a la secretaria.

Secre: —Buenos días Joven. ¿Cómo está?– Preguntó ella muy coquetamente.

Juls: —Muy bien Gracias y usted –respondió, esto a mi ya me estaba comando un poco la paciencia.

Secre: —Ahora Excelente ya que vi un mujer tan guapa y educada como usted—dijo ella, esto definitivamente era la gota que derramó el vaso, yo no dije nada quería ver la reacción de Juliana, pero por dentro quería matar a la puta secretaria.

Juls: —Gracias –dijo, ella estaba a punto de decir otra cosa pero yo lo interrumpí.

Val: —Basta –dije un poco molesta—Juliana venimos aquí a una consulta no a que esta tipa te coquetee –dije—y si vas a coquetear con alguien ten el respeto de hacerlo cuando yo no esté presente –dije ahora si enojada, di media vuelta esta vez sí subí al ascensor.

Juls: —Espera –dijo—Ya me cansé de tus celos absurdos—dijo molesta y gritándome.

Val: —Absurdos—dije—no son absurdos, solamente que eres un descarada.

Juls: —No me vengas con eso ahora, –dijo— además ella solamente estaba siendo amable conmigo y yo le estaba correspondiendo.

Val: —Que bien –dije—ve síguele correspondiendo que yo no te necesito mas –dije, para mi suerte el ascensor en ese momento se abrió y me subí a el.

Juls: —Por favor Valentina–dijo—espera.

Val: —No tengo nada que hacer aquí –dije, el ascensor en ese momento se cerro y dejé a Juliana ahí parada frente a ella.

Genial nuestra primera pelea como pareja que habíamos tenido, además me grito ella jamás lo había hecho, esto me confundió demasiado, lágrimas corrieron mis mejillas de solo recordar aquella escena, el ascensor llego al último piso de aquel edificio, baje de él con lágrimas en mis ojos, estaba a punto de salir del edificio pero alguien me tomo de la mano haciéndome imposible que diera un paso más.

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Bebecit@s dis