Me Casé Con Mí.. ¿NiÑERA?

Capítulo 18

Narra Valentina

Val: —Andrés Bustamante estás loco– dije —no me pienso subir a esa montaña rusa, soy demasiado joven para morir de un infarto o algo por el estilo– lo miré temerosa.

Andrés: —Tranquila Junto a mí estás a salvo– contestó dándome fuerzas.

Val: —¿A salvo?– Pregunté —quieres que confié en un chico al cual las arañas le teme– dije burlona —por favor no me hagas reír.

Andrés estuvo un buen rato convenciéndome pero al principio pensaba que era una pérdida de tiempo que lo hiciera ya que estaba más que convencida que no lo haria, pero sus suplicas dieron resultado me convenció de subirme a esa enorme montaña rusa, seguro la más grande que hubiese visto en mi vida.

Val: —No tengo ni la menor idea de cómo me convenciste para hacer esta locura —dije sentándome en el carrito de la montaña.

Andrés: —Tengo mis encantos aunque no lo creas –se hizo el galán.

Val: —Por favor deja tú ego a un lado –dije mirándolo.

El carrito comenzó a avanzar, apreté con fuerza la mano de Andrés el cual sólo me brindo una linda sonrisa, el carrito iba aumentando la velocidad llegando a tal grado que sentía que saldría volando, me deje llevar por el momento y decidí disfrutarlo, todo iba bien hasta que una sensación se vino a mi mente y consigo a Juliana, aunque lo estaba pasando de maravilla con Andrés aun pensaba en Juliana pero decidí no mortificarme más y dejar de lado esos pensamientos estúpidos los cuales podían arruinar ese lindo momento, el carrito por fin paro, Andrés como buen caballero que se miraba se paró y luego me ayudó a pararme, me costó un poco ya que estaba un poco mareada por las extremas vueltas que el carrito hacia.

Andrés: —Cuidado –exclamó al ver que me tambaleaba de un lado a otro al bajarme del carrito.

Val: —no te preocupes, deja y me estabilizo porque ese chistecito tuyo me dejo mareada –le reclamé.

Andrés: —Pero te encantó –dijo.

Val: —No la considero la Octava maravilla del mundo pero debo admitir que estuvo maravilloso –respondí.

Estuvimos un rato más en el gran parque de diversiones, el cual cada paso que daba me recordaba la vez en que Juliana y yo venimos, la vez en la que ella se ganó un oso de peluche para mí, ese fue uno de los mejores días de mi vida y sin duda alguna este también aunque tenía sus partes malas, pero siempre lo recordaría porque fue el día en que encontré a uno de mis mejores amigos de la adolescencia, comimos algodón de azúcar, después Andrés me pidió que lo acompañara al súper mercado porque tenía que comprar unas cosas que su madre le encargo desde la mañana y yo accedí sin problema alguno.

Narra Juliana

Juls: —¿Madre estas aquí?–pregunté dirigiéndome a la cocina.

Lupita: —Sí Juliana aquí estoy –respondió divertida— que milagro que vienes a visitarme y.. ¿Dónde esta mi nuera querida?—preguntó buscándola con la mirada.

Juls: —No la busques, ella no vino y es probable que ya no lo haga mas –respondí cabizbaja.

Lupita: Juliana Valdés–dijo—¿Que le has hecho a la pobre de Valentina?.

Yo no respondí, porque sabía que si le decía todo a mi madre me culparía de todo lo que ahora le está pasando a Valentina.

Lupita: —Juliana respóndeme –dijo enojada—¿Que ha pasado con ella?.

Juls: —ella se fue de la casa y es probable que ahora este en el juzgado haciendo los trámites para nuestro divorcio—al decir aquello mi madre quedó impresionada y yo no pude hacer más que ponerme a llorar en su hombro como una niña pequeña el cual quiere un dulce.

Lupita: —¿Pero que cosas dices? dime que esto no es verdad– preguntó mi madre desesperada—¿Que le hiciste para que ella tomara decisiones fuertes?—.

Juls: —Fui yo y mis malditos celos, los cuales la orillaron a ser la persona en la que se convirtió—hubo un silencio en la cocina—si yo no le hubiese hecho caso a esa puta secretaria de seguro Valentina y yo aun estuviésemos juntas y yo no estuviera aquí ridiculizándome frente a ti como una completa imbécil– mi madre escuchó atentamente cada una de mis palabras y en algunas ocasiones habría como platos sus ojos al escuchar las cosas que salían de mi boca.

Lupita: —Tienes que hablar con ella y llegar a algunos acuerdos, tratare de que entre en razón haré todo lo posible para que ella pueda siquiera perdonarte, no la culparía si jamás lo hiciera porque eres una completa idiota y quiero que sepas que jamás pensé esto de ti, lo hubiera esperado de tu hermano Lucho pero Jamás de ti me has decepcionado mucho Juliana—.

Al escuchar todas aquella palabras de mi madre, cada una eran un puñado en mi corazón, me dolió escuchar que yo era una decepción para ella pero ella tenía toda la razón lo era y también era una completa idiota al tratar así a una maravillosa mujer como Valentina.

Juls: —No hables con ella –dije—le daré el divorcio si tanto lo quiere, no merece estar al lado de una mujer como yo, ella se merece a alguien que la valore y no sea una idiota celosa como yo— dije tirando lágrimas las cuales quitaba su rastro para que nuevas salieran y las sustituyeran.

Lupita: —Es tu decisión y la respetare –dijo mi madre seria—Necesito que me lleves al súper mercado tengo que comprar algunas cosas para mañana—.

Juls: —Está bien –respondí sin ánimos—te espero afuera en el auto—mi madre sólo asintió con la cabeza yo salí y me monté en mi auto al poco rato se montó mi madre en el y nos dirigimos al super mercado.

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Hola bebecit@s, ya por fin pude solucionar algunas cosas y el internet me llegó espero que no se vuelva a ir..
Como les dije prometí que se los recompensará por no subir varios capítulos así que aquí les dejo 5 capítulos de esta historia..

Espero que estén muy, muy bien y no se estén volviendo loc@s con la cuarentena.. Les mando besos y abrazos 🥰💕💙