12

92 15 0
                                    

Amanda

Por primera vez en meses podría ver a mi fortachón y justamente tenía que ser de esta forma .
Yo seguía con la mirada gacha cuando  Eduardo salió de la casa azotando la puerta .

Joseph no dejó en ningún momento de tenerme agarrada de la cintura .

Pero fue después de escuchar la puerta cerrarse que levante mi mirada y lo vi.

Pero fue después de escuchar la puerta cerrarse que levante mi mirada y lo vi

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Era perfecto
El brillo de sus ojos es mágicamente embriagador.
Rostro entre angel y sensualidad hecha hombre.
Cuerpo poderoso, sus brazos bañados en tatuajes que lo hacían ver tremendamente sexi.


Me quedé tan embobada al verlo que ni la risa de Alex me sacaba de mi nube.

-Joseph que le hiciste a mi madre, hace mucho ... no nunca la había visto asi-

-Tu madre es una mujer impresionante,  no me quejo de que me esté devorando con la vista- dijo mi fortachón entregandome un lindo ramo de rosas blancas.

-Perdón por mirarte tanto,  es que no me la creo que por fin puedo verte- pasa , pasa la cena ya esta lista . Mis padres salieron -

Entonce Alex me interrumpe :

- Y yo  me voy al cine con uno amigos, el abuelo pasara por mi. Diviertanse -

Veo que tenían planeado esto entre mi padres y Alex dejarme pasar una velada con Joseph

Fui a cerrar la puerta después que Alex se despidió.
 
Al girar tenía a mi hombre de ensueño frente a mi .

- Solo tu sabes como enamorarme, como prender mi piel, como estallar con el solo eco de tu voz.-

Mis impulsos de saborear nuevamente esos labios no demoraron en hacer presencia.

Mis manos tomaron posesión de sus hombros y acerqué mis labios a los de el .

Joseph envolvió sus dos brazos en mi cintura  atrayendome  a su cuerpo.  El beso era impaciente , las ganas de quitarle esa polera oscura que traía me quemaban la piel .
Con cada caricia era era ver fuegos artificiales,  era tocar el cielo.

Creo que si no fuera que necesitáramos respirar estuviéramos horas basándonos.

Nos separamos algo acalorados entre risas nos fuimos al comedor a cenar .

Me gusta conocerlo más y más,  me gusta escuchar sus historias.

Siento que me enamoro pero tengo miedo, fueron muchos años de estar sola.
Me acostumbre,  guardaba fe de que Dios me enviaría al indicado aunque tarde.
Y ahora que al parecer llega tengo miedo.

LA MIRADA DE UN ANGELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora