Noche estrellada

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El sol había descendido, y en el cielo nocturno comenzaban a surgir pequeñas luces que lo iluminaban. El adolescente pelinegro de 16años estaba sentado frente a una fogata viendo como las cenizas se alzaban hacia aquel cielo que parecía infinito, siempre se había sentido pequeño hacia aquella inmensidad que lo acojonaba. Ladeo la cabeza y observo como su amigo de 17 dormía plácidamente dentro de la casa de acampar, suspiró, esa tarde habían entrenado muy duro, ¿para qué?, para proteger el mundo de una posible amenaza que vendría en cualquier momento.  Aunque no eran los únicos que estaban entrenando, también estaba su padre, Vegeta, los demás guerreros Z y Mirai Trunks, esa persona. 

 -¿Goten te pasa algo?- susurro dulcemente el chico pelila en su oído, al escucharlo Goten se sobresalto, y fue sacado de sus pensamientos. - No te preocupes Goten, estoy seguro que nuestros padres son bastantes fuertes, así mismo, nosotros hemos entrenado muy duro, estoy seguro que podremos defender a cualquiera de aquella amenaza, sea lo que sea. - hizo una pausa y luego puso su mano sobre la cabeza de Goten- Y si las cosas van mal, te juro que te protegeré de lo que sea, aunque claro, no creo que necesites que te protejan.

-Trunks...- aquel chico lo conocía demasiado bien, siempre sabía que decir, y era el único que no veía a Goten como alguien débil o inferior, Trunks siempre estuvo en los momentos más traumaticos de Goten, a diferencia de su hermano, Trunks  a pesar de ser arrogante, no lo veía como alguien débil o delicado, le daba la confianza que el necesitaba, y lo protegía de una manera distinta, de una manera más cálida. Jamás lo comparaba con Gohan. - Y-yo también te protegeré de cualquier mal, Trunks.

Goten le sonrió de la manera más cálida posible, eso era de lo que mas le gustaba a Trunks, aquel chico era realmente transparente con sus emociones y sentimientos, era un chico puro y de corazón noble, le encantaba que estar a su lado le hacia querer ser una persona noble, aunque él era consciente de la verdadera naturaleza orgullosa, arrogante y egocéntrica que se encontraba dentro de él. Aun así, teniendo a Goten enfrente, sonriendole de esa manera, hacía que odiara aquel orgullo que le impedía acercarse y besar aquellos labios perfectos para él. 

-Olvídalo Goten, no necesito que me defiendas, recuerda que soy un tipo muy fuerte.- comentó Trunks volteando su rostro sonrojado hacia el otro lado.

-oh, es cierto, Trunks realmente es un tipo fuerte.- dijo Goten riéndose y volviendo a mirar al cielo, charlar con Trunks siempre le daba valor, a pesar de que este siempre terminara diciendo algo arrogante después de haberle dado ánimos.

Los dos adolescentes se fueron a dormir en la casa de acampar, Goten no tuvo ningún inconveniente al dormir, en cambio Trunks, no podía conciliar el sueño. Su mente seguían en aquel momento en el que Mirai estuvo apunto de besar a Goten, el jamás se había atrevido a hacer eso por su estúpido orgullo, "ese insecto no tiene nada de dignidad" "¿cómo si quiera se atrevió en pensar en eso?"  pensaba.

Trunks se sentía molesto, volteó su cuerpo y quedo frente a frente a Goten, ese chico realmente parecía un ángel, de cierta forma comprendía a Mirai, nadie podría resistirse a aquel chico, sin embargo, no permitiría que nadie lo alejara de su lado. No permitiría que otra persona distinta a él fuera su primer beso.

Y entonces, lo contemplo dormir tan plácidamente, los celos se apoderaron de Trunks, se acerco a el y le dio un tierno beso en sus labios, al separarse se sintió triunfante, al menos el había sido su primer beso, aquella sensación fue la mejor de todas, mierda, estaba totalmente cautivado por él, pudo hacerle más cosas esa noche, pero se contuvo, por ahora se conformaba con haberle besado antes que nadie. Lo miró una ves mas y sintió como sus mejillas comenzaban a volverse rojas.

-Trunks...- escuchó susurrar al pelinegro, por un momento Trunks palidece, pero el color regresa, cuando ve que Goten solo estaba hablando dormido. 

Trunks suspiró, apenas se iba a dormir cuando sintió como Goten lo abrazaba, el siempre terminaba haciendo eso cuando dormían juntos, lo hacía desde pequeño, Trunks sonrió y su orgullo se permitió abrazar a Goten en ese momento, ahora si podría dormir en perfecta paz.

¿Porque Goten?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora