𝔹𝕝𝕠𝕠𝕕 𝕝𝕚𝕟𝕖: 𝔽𝕒𝕝𝕝𝕖𝕟 𝔼𝕞𝕡𝕚𝕣𝕖

Capítulo 1

Choi Wooshik se levantó de su asiento golpeando fuertemente el escritorio de su amplió despachó, sus hombres retrocedieron al ver su rostro desfigurado por la rabia.

"¿Cómo es posible que hayan robado sus cargamentos de droga y armas?" se preguntaba una y otra vez.

No era la primera vez que pasaba, un mes atrás comenzaron a desaparecer cualquier tipo de mercancía sin importar si la entregaban por cielo, mar o tierra; eso alarmó a los líderes, pero C1 los tranquilizo diciéndoles que se encargaría. Después de una semana del primer incidente su seguridad aumento, pero eso no parecía ahuyentar a los ladrones. Regresaban y se iban sin dejar alguna huella solo las cabezas de sus hombres colgadas como si de trofeos se tratasen.

Hartó de esta situación llamó a su mano derecha Jeon Jungkook o como todos lo conocen "La Parca", un peligroso sicario que no conoce la piedad, es difícil encontrarlo ya que vive en las sombras. Es muy conocido por su destreza con las armas al igual que en combate cuerpo a cuerpo, él estuvo con los Choi desde que pasaron a ser herederos del gran imperio, los ayudó a ser una de las mafias más temidas mundialmente.

Wooshik estaba más que seguro que si dejaba que se encargará de eso no le defraudaría y no lo hizo, luego de unos días Jungkook entró a su oficina mientras sujetaba por el cuello a un hombre totalmente golpeado, no hizo más que sonreír con satisfacción por la eficacia de su trabajo.
Pero ahí no acabó, aunque en sus manos estuviera uno de los ladrones el tipo no había hablado por más que lo torturaran, era agotador. Los robos disminuyeron con Jeon al mando, pero no podía estar en todas partes.

Actualmente no han logrado sacarle información al tipo, pero no falta mucho para que ceda.

—Llama a Park, dile que esperé en la mansión y se contacté con mis hermanos —ordenó a la chica mientras peino con frustración su cabello— ¡Ahora! —Seohyun salió despavorida del lugar.

Acomodó su saco y salió de ahí dirigiéndose al estacionamiento, no pudo evitar sonreír al ver a un chico pelinegro, alto, de complexión mesomorfa, con una distintiva cicatriz en su mejilla y con su tan típica expresión seria.

—Me voy unos días y todo se vuelve un desastre —dice burlón— Pensé que ayudaría el dejar a Jonghyun a cargó, pero veo que no lo fue —camino hasta la puerta del copiloto para entrar al auto mientras que C1 lo imitó, pero sentándose en el asiento del piloto.

—¿Estás admitiendo que te equivocaste Jk? Me sorprendes —el contrario negó.

—Yo nunca estuve de acuerdo, pero el idiota de Joonhyuk, es bastante terco —Wooshik no hizo más que reír bajando la guardia, sin darse cuenta que a unos metros un auto lo seguía— Pero es mi jefe, tuve que obedecer.

Al llegar se estacionaron, bajaron del auto para luego entrar a la grande mansión dónde ya debería estar Park en su despachó hablando con los otros Choi.

—Señor —hizo una reverencia cuando estuvo frente a él.

—Chanyeol nos avisó que nuevamente han robada mercancía —se escuchó al otro lado de la pantalla dónde también se logró apreciar su rostro de molestia— ¿Qué se supone que haremos?

—Si esto sigue así comenzaran a hablar, el respeto y miedo que nos tienen se ira a la mierda —habló C2, se veían totalmente desesperados.

—Se muy bien lo que está en juego, solo hay que esperar un poco más, estamos a nada de hacer que ese tipo hablé —C1 dijo en un intento de tranquilizarlos.

—No hay tiempo Wooshik, las ganancias en Gwangju bajaron un 40%, si esto sigue, se acabó...

El Choi mayor estaba a punto de hablar cuando se cortó la llamada y la luz del lugar se fue, por inercia Jungkook se acercó a él para protegerlo. Chanyeol tomó su arma quitando el seguro; fuera del lugar escucharon un sonido muy familiar, disparos.