Capítulo 11

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Sooyoung se encontraba conduciendo, habían pasado aproximadamente dos días enteros para poder llegar a su destino, en el camino ocurrieron sucesos que los hicieron retrasarse, pero nada de lo que tuviesen que preocuparse.

Según ellos.

Al fin, después de tanta espera se encontraban frente a una grande mansión en Seúl, ahí pudieron visualizar una camioneta y una motocicleta lo que causó confusión en las chicas, estos no estaban ahí cuando se fueron a toda prisa para ayudar a los chicos. Más que nada por instinto desenfundaron sus armas mientras se ponían en posición listas para atacar si era necesario.

—¿Qué pasa? —preguntó el chico de cabello violeta.

—Los vehículos, no estaban aquí cuando nos fuimos —respondió Jennie sin dejar de estar alerta.

—Tal vez alguien vino de visita -dijo Hoseok nervioso.

—Tranquilo Hope, ellos tienen todo bajo control —Jimin sostuvo la mano del pelirrojo logrando tranquilizarlo y ganándose miradas molestas, ni siquiera sabían si hay una amenaza.

Ambas chicas se dispusieron a entrar apuntando sus armas listas para vaciarlas si es necesario; al hacerlo se encontraron con un grande hombre rubio quien sin problema alguno les arrebato el arma y les apuntó directo a la cabeza, ellas se quedaron quietas.

—¿Quiénes son?

—Eso deberíamos preguntar nosotros —dijo Jungkook molestó— Si quieres seguir viviendo baja las armas —el rubio sonrió burlón.

—Con una mano herida y golpeado, claro chiquitín.

—Ya basta Namjoon, ellos están de nuestro lado —de mala gana obedeció a la chica de cabello corto que oportunamente llego al rescate de sus amigas.

—Es bueno verte Sunny —dijo contenta la de cabello blanco.

Los chicos se dirigieron a la amplia sala encontrándose al castaño de ojos avellana, junto a un pelinegro con una cicatriz, ambos conversaban sin percatarse de su presencia. Las chicas salieron del lugar.

—¡Taehyung! —Jimin y Jin gritaron emocionados mientras corrían a darle un amoroso abrazo, a lo lejos un pelinegro de ojos grandes y nariz prominente sintió como su alma volvía a su cuerpo llenándolo de alivio al ver que su castaño estaba a salvo, pero una pregunta cruzó por su mente ¿Cómo escapó de los Kim? en todo su tiempo de conocerlos nunca nadie se libró de sus garras y si lo hacían solo eran unos cuantos pasos antes de caer muerto.

—Pensamos lo peor, me tenías muy preocupado jovencito —dijo Jin mientras le regalaba un nada tierno golpe en la cabeza.

—Estoy bien hyung, soy Kim Taehyung nadie se librará de mi tan fácil —mostró una adorable sonrisa que hizo palpitar como loco el corazón de dos pelinegros.

—Mira, él es Hoseok también está con nosotros —alegremente el pelirosa tomó de la mano de este para acercarlo a su amigo.

—Un gustó, me hablaron mucho de ti —estrecharon sus manos.

—Me alegró que se lleven tan bien, así será mucho mejor —dijo un hombre de traje totalmente intimidante, que salía de su despacho.

—Usted es el famoso Choi —fue más confirmación que pregunta y eso lo pudo notar.

—Así es, es un placer tener a un Kim de nuestro lado Taehyung —eso desconcertó a todos los presentes a excepción de un hombre moreno que se tensó.

—Te equivocas Choi, en esta sala hay tres Kim —habló Yoongi llamando la atención de todos.

—No, no me equivocó —el líder sonrió desconcertado aún más— Muchos no saben por qué están aquí y no tengo mucho que decirles, pero sí que ofrecerles. A cambio de su ayuda puedo darles lo que me pidan, pero estoy seguro de que eso ya lo saben, si no, no estarían en esta sala. Comencemos por ¿Quiénes son los Kim? Bueno, es un imperio dirigido por dos hermanos, los cuales siempre estuvieron aliados a los Choi desde sus inicios. Pero hace poco estos empezaron a robar mercancía, tenemos la sospecha de que Kim Mingyu es la cabeza de todo esto ya que su hermano mayor en sí, siempre fue el más "correcto", en el sótano esta uno de los hombres de Kim, pero es tan leal como estúpido que ni siquiera nos ha dicho nada. Por lo tanto, nos rendimos con él.
Sea como sea la situación nos han declarado la guerra y aún más al llevarse a dos niños inocentes —el castaño bajo la cabeza al recordar que sus pequeños hermanos estaban en medio de todo— Los recuperaremos, ese será uno de nuestros primeros movimientos antes de acabar con ellos totalmente.

—¿Pero cómo encontraremos a los hermanos de Tae si ni siquiera sabemos dónde los tienen? —pregunto Jin, llamando la atención del ex militar.

—Llévenme con el hombre.

—Ya dije que es imposible hacerlo hablar, lo hemos intentado desde hace tiempo —contestó Choi al rubio— Hemos probado de las peores torturas y nada.

—Es porque no has mandado a la persona adecuada —sonrió burlón.

—Bien acompáñame, chicos están en su casa, vayan a descansar, hay suficientes habitaciones para todos —sonrió retirándose del lugar con Namjoon siguiéndole el pasó.

Todos salieron de la sala topándose a las chicas quienes los guiaron a sus habitaciones, la mayoría de estos entraron a ducharse aprovechando que había ropa en los armarios.

Jungkook

Perdí la noción del tiempo al estar bajo la lluvia artificial, mis músculos se relajaron, abrí mis ojos suspirando y sonriendo al recordar que él esta sanó y a salvo.
Enredo una toalla a mi cintura, saliendo del baño dispuesto a vestirme, pero me quedó inmóvil al encontrarlo sentado en mi cama, desviando la mirada algo sonrojado.

Sin tomar mucha importancia me quito la toalla quedando completamente desnudo frente a él, trata de ignorar el hecho de que estoy así y se levanta dándome una sorprendente vista se su bonito y redondo trasero. Me visto lo más rápido que puedo para luego sentarme en la cama, actuando lo más indiferente posible.

—¿Qué quieres? —este se giró regalándome una cálida sonrisa, de la nada brinco a la cama envolviendo sus brazos en mi cuello dejándome congelado— ¿Qué haces? —dije alarmado al sentir un calor en mis mejillas, ¿estoy sonrojado?

—Yo quería abrazarte desde el momento que te vi, pero sabiendo que seguirías tu papel de chico malo me golpearías, así que vine a tu habitación.

—¿Por qué estás tan seguro de que no lo haré ahora? —susurre cerca de su oreja, sonreí al sentir un leve temblor.

—Por qué has pasado tus manos por mi cintura y si no quisieras ya estaríamos separados —fruncí el ceño al notar que lo que decía era cierto, pero no me aleje— Aparte sé que estabas igual o más preocupado que yo cuando me llevaron.

Sin decir nada lo acerque más a mi cuerpo, me deje caer en la cama haciendo que Taehyung quedará casi encima de mí.

—Me alegró tanto que estés bien —lo dije sin pena alguna, realmente necesitaba esto.

En el momento en que nuestras miradas se cruzaron mande a la mierda todo, lo quería conmigo, lo quería para mí, aún cuando no estaba listo para decirlo, pero se lo demostraría, así que me posicione encima de él sin dejar de mirarlo.

Me acerque poco a poco hasta que por fin nuestros labios se encontraron.

𝔹𝕝𝕠𝕠𝕕 𝕝𝕚𝕟𝕖: 𝔽𝕒𝕝𝕝𝕖𝕟 𝔼𝕞𝕡𝕚𝕣𝕖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora