¡Si quieres paz, prepárate para la guerra!

Capítulo 36. La paz se acerca.

Capítulo 36. La paz se acerca.

Habían pasado tres días, su padre le había quitado su celular, su ipad y su tablet, Cara estaba incomunicada del mundo, debido a que sus guardaespaldas, Tom y Marcus se encargaban de que la chica no comprara nada y no se escapara tampoco. Afortunadamente su madre y April avisaron a Zoy y Emma para que las alcanzaran, era lo único que le servía de consuelo. Se encontraban en un hotel en el centro de la ciudad, su padre se habia encargado de dar instrucciones extrictas para que su habitación y la de April no tuviera ningún aparato electrónico para comunicarse con el exterior, sentía que estaba en cautiverio, sentía que le faltaba el aire, le faltaba Jace.

No había hablado con Jace, sentía que su mundo se caía en mil pedazos, no habían aclarado las cosas y eso la tenía muy preocupada, se reprendió para sus adentros por haber sido tan débil y haberse dejarse llevar por sus impulsos carnales, cuando Jace estaba cerca, ella perdía la cabeza, no pensaba con claridad, se sentia muy enojada por haber cedido y por no mantenerse firme ante su desición de arreglar las cosas con palabras, al mismo tiempo, estaba muy confundida porque lo odiaba por ser tan... tan... "JACE" y al mismo tiempo lo amaba por ser "JACE", estaba enmedio de un conflicto interno. Y por si fuera poco en menos de una semana contraería matrimonio con Logan, ella no quería eso, pero al menos no estaba tan deprimida como April, no paraba de llorar, en los tres días que llevaban en París, su hermana parecía un zombie viviente, sus ojos estaban hinchados de tanto llorar y las bolsas bajo sus ojos eran muy grandes y de color purpura. A Cara le estaba hartando el hecho de que su padre fuera tan retrograda y orgulloso, tenía que pensar en algún plan para evitar esa boda, estar casada a los 19 años definitivamente no era opción y mucho menos con alguien que no amaba.

Emma y Zoy estaban en una habitación, Cara, su madre y su hermana en otra y el tío Ignazio en otra. Todas las habitaciones eran suits presidenciales, lo mejor de lo mejor, el lujo se derrochaba por todas partes. Eran las 9 de la mañana y todo el mundo se encontraba en la suit de nuestra protagonista. April estaba acostada en la cama llorando, Cara estaba sentada en una silla, veía por la ventana la gran ciudad, con los ojos idos; su madre comía un bocadillo sentada con las chicas, Emma y Zoy en una sala de piel, su tío estaba de pie caminando de un lado a otro.

-Chicas no pueden seguir asi, su madre y yo estamos muy preocupados por ustedes, no han comido nada, ¡Eleonor por favor diles algo! -dijo el tío Ignazio muy preocupado.

-Mis cielos, ¡ya verán que todo se solucionará! en vez de pensar en las cosas malas, deverían de disfrutar de este viaje, estoy segura de que todo saldrá bien. Ustedes nunca han permitido que su padre se salga con la suya y estoy segura que esta vez no será la excepción.

-¡¡WAAAA!! ¡Pero mamá!- dijo April entre sollozos- ¡Yo quiero ver a Dilan!

-Y yo quiero ver a Jace- suspiro Cara.

-Por cierto, ¿dónde esta Logan? ¿No se supone que vendría hoy?-preguntó Emma.

-Me llamó y dijo que llegaría un poco más tarde- respondió el tío Ignazio.

Zoy se le quedo viendo.

-¿Por qué te llamo a ti? Acaso...

Ignazio carraspeó.

-Ejem... vistanse, tengo toda una lista de actividades programadas para hoy, después iremos a ver los vestidos de novia a las 5, me costo muchísimo mantener una conversación en francés con la encargada del lugar, poder sacar una cita en ese lugar me fue muy dificíl, así que no desperdicien mis esfuerzos, ¿de acuerdo?

Todas asintieron.

-Bien, ahora cambién esos rostros chicas, que nos espera un día espectacular.