Padrinos.

455 24 1
                                    

Ya siendo las siete y media de la mañana del día lunes, yo estaba peinando a mis hijos para arreglarlos y llevarlos a su primer día a la escuela. Liam pasaría por nosotros ya que él quería estar presente en esto así que debería estar por llegar.

Cuando terminé de peinar a los niños, les dije que se sentaran en la mesa porque les prepararía algo para comer, fui a la cocina y comencé a preparar el desayuno, sus leches y unas tostadas. Les hice sus loncheras con sus colaciones, sus mochilas ya estaban listas y ellos también lo estaban aunque con un poco de sueño pero estaban listos.

Les llevé su desayuno y en eso justo sonó el timbre. Fui a abrir y me encontré al padre de mis hijos, como siempre bien vestido y con un buen perfume.

-Hola - me sonrió coqueto y luego me besó la mejilla. Lo hice entrar y los niños lo vieron.

-¡Papá! - se bajaron de las sillas y se acercaron a saludarlo.

-Hola niños -se puso a su estaturas y besó la frente de ambos -¿Listos para su primer día? - Isabella asintió pero Agustín no -¿Por qué tú no campeón?

-Tengo miedo - me miró a mí y a Liam.

-Oh bebé - me puse a la estatura de ellos -Sé que estás nervioso pero nada malo va a pasar. Y si llega a ocurrir algo, no dudes en decirmelo a mi o a papá ¿si? - vi como Liam asentía.

-Ni mamá ni yo permitiremos que les pase algo o alguien les haga o diga algo - Liam deslizó un brazo por la cintura de mi hija -Nosotros siempre estaremos con ustedes.

-Porque ustedes dos son lo más hermoso que pudimos haber tenido - hice lo mismo que hizo Liam pero con Agustín.

-Los amamos - dijeron ambos.

-Y nosotros a ustedes - dijimos nosotros dos, antes de que nos dieramos un abrazo.

Como una familia.

Una linda y verdadera familia.

(...)

-Los amo, pasaremos por ustedes en la tarde - les dije a ambos, ellos asintieron.

-Espero que hagan muchos amigos y se diviertan - les habló Liam -No olviden que los amamos - los niños volvieron a asentir. Besamos a ambos en las frentes.

Los mellizos se tomaron de la mano, dieron la vuelta y comenzaron a caminar para ingresar al jardín, con Liam nos paramos y vimos como se iban, a mí me se me llenaron los ojos de lágrimas.

-Oh amor - oí una risa tierna por parte de él. Me envolvió en sus brazos y yo comencé a llorar de emoción.

-Es que cada vez crecen más rápido, recuerdo como si hubiera sido ayer cuando ambos estaban en mis brazos, su primer día de jardín, hoy su primer día de escuela y después la universidad - ahora entiendo la emoción de mi madre.

-Lo sé amor, pero así es la ley de la vida - me besó la frente -Ven, vamos te voy a dejar a tu trabajo - me acarició la mejilla, yo asentí y nos subimos al auto.

(...)

-Al haber llorado se me corrió todo el maquillaje - estaba afuera de mi trabajo aún en el auto de Liam, arreglándome el rostro para entrar.

-Sabes que nunca has dependido del maquillaje - me habló Liam. Yo lo miré y le sonreí.

-No es eso, pero no puedo entrar así - me estaba retocando un poco el maquillaje, para entrar un poco más presentable.

La Tercera es la Vencida. [L.P]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora