WHY WOLFHARD? [Finn y tú]

Capítulo 2

Finn se veía muy lindo, tenía unas pecas lindas adornando su nariz, pero creo que me gustaban mas sus chinos. Él se veía un poco incómodo y raro, así que decidí hablarle para salir de ese momento incómodo.

—Así que eres Finn—mencioné con una sonrisa.

Finn asintió con un gesto molesto.

—¿Y qué te trae por esta escuela Finn? —pregunté sin perder la paciencia.

—¿Enserio tienes que ser tan molesta?—frunció el ceño— Acabo de sentarme con ustedes y ya me estás interrogando. ¿Qué no me puedes dejar solo? 

me sorprendí ya que usualmente cuando alguien es nuevo hace lo imposible para encajar pero al parecer Finn no era como los demás.

Me di la vuelta y presté atención mejor en los nuevos niños. Tal vez ellos no eran tan extraños como ese tal Finn. Enserio quería conocerlos...

La clase acabó y justo antes de salir el profesor me detuvo.

—Espera _____ , ¿Podrías mostrarle la escuela a Finn y a Noah por favor? —el profesor tomó mi hombro. 

Con que así se llama, Noah.

—Si claro—dije—Vamos chicos, síganme.

Mientras caminábamos por los pasillos sin decir nada. Finn molesto dijo:
—Yo me largo.

Sinceramente yo no hice nada para detenerlo, no le rogaría que se quedara conmigo. Lo acabo de conocer. Me quedé sola en los pasillos con Noah, el chico era muy lindo y no paraba de sonreír.

—Te llamas ____,¿cierto? —preguntó Noah con una voz tímida.

—Si y tu Noah ¿no? 

—Así es, y perdona por lo que acaba de hacer mi amigo Finn, aveces puede ser un idiota— admitió.

—Si ya lo noté—los dos reímos.

—¿Pero qué es lo que le pasa?, fue muy grosero—pregunté.

—Está un poco presionado y él no quiere estar aquí— respondió Noah.

—¿Pero por qué?, ¿entonces por qué se metió a esta escuela?— volví a preguntar.

—_____ nos obligan a estar acá—contestó Noah, bajando la mirada.

No quise preguntar el por qué, sentía que no me correspondía saber eso así que decidí cambiar de tema. 

—Ven—jalé de su brazo— te presentaré a mis mejores amigas—dije sonriente.

Las vi comiendo en una banca así que nos sentamos con ellas.

—Ella es Sophia y ella es Emma—dije señalándolas.

—Hola— dijo amigablemente alzando su mano. Emma agarró mi brazo y me habló en mi oído.
—Es muy guapo ____.

Por alguna razón cuando dijo eso, voltee a buscar a Finn con la mirada. Lo vi sentado en un escalón viendo su celular.

—¿Te gusta?— Escuché una voz preguntándome eso. Voltee y era Noah mirándome  divertido.
—¿Qué? Nooo—respondí un poco incómoda.
El solo rio y volteó para seguir hablando con Sophia.

Es una estupidez, cómo podría gustarme Finn, acabo de conocerlo, además fue muy grosero conmigo. No, no me gusta el idiota de Finn.

Ya era hora de las salida y mis amigas se van en los autos de sus padres. Mi mamá nunca viene por mi, siempre esta ocupada en su trabajo y llega a la casa siempre a los 8:00 pm. Aveces me molesta que no se haga cargo de mi, pero sinceramente me gusta quedarme sola en casa. Mientras voy saliendo de la escuela para dirigirme a mi casa, escucho que alguien grita "_____" y toma mi hombro.

voltee y vi que era Finn. Molesta volví a voltear para el frente.

—Déjame en paz—dije.

—No espera, solo quería disculparme—Finn dijo tomándome del brazo para evitar que me fuera.

—Esta bien, estas perdonado— dije poniendo mis ojos en blanco y zafándome de su agarre.

Finn me miró sonriendo y bajó la cabeza. Mierda cómo puede ser tan lindo.

—¿Ya me puedo ir? —dije fingiendo que no quería hablar con él. Pero claro que quería.

—No, sé que me porté como un idiota cuando trataste de mostrarme la escuela y sé que ya no me la puedes mostrar ahora mismo, pero estaba pensando que podrías hablarme de ella—dijo encogiéndosela de hombros.

—Pregúntale a Noah, ya que él no me dejó y tampoco me ignoró. Él te hablará sobre ella—dije un poco sarcástica.

—Ya lo hice, pero Noah me dijo que tenía prisa y se fue— contestó.

—Bien entonces te lo diré por mensaje, dame tu número y te diré todo lo que tengas que saber—dije tranquilamente.

El negó y me dijo:

—_____ estás caminando sola, por qué no mejor te acompaño a tu casa mientras... en el camino me vas hablando sobre la escuela.

Trataba de no sonreír mordiéndome el labio, no podía mostrarme a Finn como alguien que se muere por su carisma.

—No—dije histérica— qué tal si eres un maldito secuestrador o asesino y me acompañas a mi casa... Ya sabrías mi dirección. ¿No?—dije sería, tratando de no reír.

La sonrisa de Finn se desvaneció y puso una cara de confusión,  se quedó callado viéndome raro.

—Estoy bromeando—dije riendo—Vamos tonto, acompáñame.