El Arte De Amarnos. (Amores que curan # 3)

Capítulo 44

Si eres un lector fanstama, quiero que sepas que sigo esperando tu voto wey 😂🙃❤️

Todo estaba realmente oscuro y era verdad que no podía ver nada, y eso era raro, muy raro porque entonces siempre se podía visualizar al menos algunos movimientos o bordes en la oscuridad, no sabía realmente como explicarlo sin sonar estúpida, pero aquella oscuridad era la oscuridad más tenebrosa que alguna vez hubiese apreciado —Si, todo sonaba jodidamente redundante pero no podía explicarlo de mejor manera— No podía decir ciertamente donde estaba, sin en una casa grande y sobria o en un pequeño y estrecho apartamento, lo cierto era que lo único que podía asegurar aparte de la ya mencionada oscuridad, era que en cuestión, realmente no estaba sola y eso en vez de tranquilizarme, lo cierto fue que me aterró como nunca.

Traté de poner de pie pero entonces me di cuenta de que estaba en una cama, era suave, tenía que admitirlo, pero entonces era tan pero tan helada, que incluso heria mi suave y clara piel, pensé en abrir mi boca para llamar a alguien pero también fui muy consiente de que no había a nadie a quien pudiese llamar realmente, porque incluso, en aquel vació lugar carente de nitidez, supe que estaba más sola que nunca y eso, de igual manera, también me aterró.

—Shhhh, todo esta bien, todo estará bien — Dijo de repente una voz alzándose sobre la potente oscuridad, traté de ver al dueño de la voz pero entonces me fue totalmente imposible —Estoy aquí, siempre he estado aquí — Me aseguró y por primera vez en aquella ocasión, fui realmente muy capaz de sentir seguridad y un poco de consuelo, porque al parecer no estaba tan sola como creía, nada que ver, después de todo él estaba ahí conmigo y siempre lo estaría.

—¿Brian? — Lo llamé casi desesperada, estiré mi mano para tocarlo, pero entonces no lo hallé y eso me llenó de ansiedad, traté de ponerme de pie, pero me fue imposible, no podía hacerlo, era como si realmente estuviera adherida a la fría cama. —No sé que pasa, tengo miedo, enciende la luz, odio esta oscuridad, odio...

—Estoy aquí, no debes temer — Aseguró de nuevo con esa ronca pero al mismo tiempo templada voz que tanto lo caracterizaban a él, iba a abrir mi boca para reprochar, pero enseguida sentí el suave roce de una mano en mi mejilla y eso fue de nuevo alguna clase de tranquilizante para mí, yo reconocía ese toque, era la suave caricia del amor de mi vida, del hombre que siempre había amado, del hombre que aún amaba, de mi Brian — En esta vida hay cosas mucho peores que la oscuridad amor, créeme, es mejor así, al menos en esta oscuridad no serás capaz de ver las cosas feas que nos rodean, no serás capaz de ver cuando la gran bestia del pasado se arroje sobre nosotros y nos obligue a separarnos... Créeme, es mejor así.

—¿Qué dices? ¿De qué hablas?

Quise saber desesperada, pero entonces cuando volví a abrir mi boca para seguir con las preguntas, de repente sentí un suave y delicioso roce en mis labios y por supuesto que supe que ese roce provenía también de los labios de él, me estaba casi besando y no pude resistirme, no cuando él estaba tan cerca y por fin después de tanto tiempo lo tenía de nuevo a mi lado; el beso fue suave, dulce, casi bondadoso, pero entonces después de unos segundos se tornó más desesperado y hambreado, su boca atacó la mía y yo respondí con exactamente la misma urgencia, sus besos eran una medicina para mí, no podría vivir sin ello, estaba casi segura de ello.... Aunque pensándolo mejor, por más dependiente, estúpido y raro que sonara, estaba segura de que yo no podría vivir sin Brian y eso era jodido.