Draco Malfoy, heredero de la noble casa de los Malfoy, próximo Lord Malfoy, hijo querido, amigo apreciado....
Su vida fue planeada por su padre, un matrimonio arreglado, y un solo destino...
Pero del mismísimo infierno llegaron dos diablillos dispu...
Draco despertó sintiéndose mucho mejor, su padrino estuvo toda la noche velando por su bienestar, observando cualquier reacción del rubio, cuando estuvo seguro de que Draco dormiría hasta el amanecer, el profesor tambien durmió un poco.
El profesor despertó primero que Draco, se levanto y aseo antes de ir a su pequeña cocina privada y hacerse un café antes de ir al gran comedor, tomo el profeta y se puso a leer, unos ruidos provenientes de su cuarto le indicaron que Draco estaba despertando.
Vio que su ahijado salía en ropa interior desde su alcoba, el mayor doblo el periódico a la mitad, Draco veía sobándose la nuca cuando vio a su padrino.
— Buen día padrino — Dijo con voz somnolienta.
— Buen día Draco, ¿Cómo te sientes? — El menor tomo asiento.
— Gracias a usted me siento mejor que ayer — Snape cerro sus ojos con cansancio.
— Pudiste evitarte ese dolor si hubieras venido desde un principio aquí y quizá podría haber curado esos cortes — Draco hizo una media mueca, un vaso con jugo de calabaza estaba frente a él, tomo bajo la atenta mirada de su padrino.
— De eso no te preocupes, yo quería una cicatriz — Dijo sonriendo, Snape para nada le hizo gracia, Draco se rindió y hablo enserio — No quería alarmarte, no es la primera ni la ultima vez que pasa — Snape suspiro sabiendo que era verdad.
— ¿Por qué fue esta vez? — Pregunto resignado.
— Astoria — Dijo sin mucho argüende.
— Tiene que ver por el incidente en Hogsmeade — Draco asintió — ¿Qué tuvo que decir esa mocosa para que Lucius reaccionara así? — Draco desvió la mirada.
— La que envió la carta fue su hermana Daphne, antes de eso, ella amablemente me informo que su padre se enteraría y por consiguiente este le diría al mío y me castigarían por no ser un caballero con su hija — Snape se sobo los parpados.
— Lo que paso con esa mocosa no fue para tanto, solo la histeria de la misma, yo tuve que aguantar sus alaridos por una sustancia que veden para hacer bromas, el único daño que tuvo fueron sus zapatos, no justifica que estés así — Draco volteo hacia su padrino.
— Lo sé, pero padre no pensó lo mismo, todavía tengo que comprar un obsequio por mi "falta" y dárselo a esa niña engreída — El rubio termino de beber su jugo.
— Tal vez Lucius la lo compro, por tu estado no deberías hacer muchos esfuerzos — Snape se puso de pie — Te llevare a tu habitación, mandare a un elfo para que te lleve cada comida, este día no saldrás, aun tienes que descansar de los crucios que te lanzo — Draco asintió con la cabeza gacha.
Snape con su varita atrajo las pertenecías de Draco, el se vistió y tomo su varita, Snape se puso su capa, antes de abrir la puerta Draco lo abrazo por la espalda.
— Gracias por cuidarme padrino — Snape rio discretamente.
— Siempre Draco... siempre — Ambas serpientes salieron del aula.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.