⊞¡HEY DRACO!⊞

1.9K 201 23
                                    

Cierto rubio iba caminando por el amplio corredor directo a las duchas, el entrenamiento había sido agotador, estaban listo para su partido contra Ravenclaw, Draco había recibido una carta de su padre diciéndole que iría a verlo y esperaba entablar una conversación con Astoria, eso ultimo le molesto a niveles que Theo y Blaise le preguntaron si estaba bien, por lo rojo que se puso su rostro del coraje.

Draco llego hasta ahí, ya no había nadie, el rubio sonrió de lado antes de desprenderse poco a poco del uniforme de entrenamiento, desabrocho el equipo de seguridad dejándolo sobre una banca de madera, desabrocho su pantalón pero no se lo quito, tomo su playera de la base y la saco sobre su cabeza, dejando ver su piel blanca, ya las marcas habían desaparecido gracias a los cuidados de su padrino.

Draco sintió la pequeña brisa que corría por la habitación, volteo sobre su hombro viendo al par de gemelos que sabía que estaban en la entrada de las duchas, sonrió seductoramente antes de empezar a bajar su pantalón sacándolo por sus pies descalzos, cabe mencionar que se había quitado el calzado y los calcetines antes.

Draco volvió a darles la espalda, los gemelos compartieron una mirada cómplice, Fred se hizo cargo esta vez de los hechizos de privacidad, ambos caminaron haca Draco el Slytherin todavía mantenía su ropa interior, George llego por la derecha y Fred por la izquierda, tomaron el borde de esa ropa, Draco tenía una media sonrisa, esperando a que actuaran.

Al mismo tiempo bajaron la última prenda que les impedían presenciar a su ángel por completo, el miembro de Draco dio un leve tirón al sentirse liberada, apenas comenzaba a erguirse por las caricias de los gemelos.

Ambos se pusieron a cargo de su ángel, el rubio cerró los ojos disfrutando los besos sobre su piel, la textura de la ropa que mantenían puesta los gemelos, hacían que la piel de Draco se erizara.

- ¿Por qué tardaron tanto? - Dijo el rubio girándose para quedar frente a ellos.

- Lo lamentamos pequeño - Dijo George sobre su oreja.

- Teníamos algo pendiente que no pudimos retrasar - Siguió Fred.

- Pero sabemos que te agradará lo que hicimos - George mordió el lóbulo derecho de Draco.

- Esta bien... pero me agradaría mas si dejarán de parlotear y metieran sus deliciosos miembros en mi boca y se corrieran dándome un tentempié para antes de la cena - Los gemelos se rieron de su ángel mandón.

- Bueno, para eso tú... - Fred lo tomo de la barbilla besándolo con fogosidad.

- Tienes que arrodillarte frente a nosotros - Dijo George besándolo de la misma forma que su hermano.

- Y abrir esa boquita sucia que tienes - Fred lamio los labios de Draco.

- Y succionar como si la vida te fuera en ello, hasta dejarnos secos - George tomo entre sus dientes el labio inferior de Draco.

- Un Malfoy jamás se arrodilla - Dijo el rubio a modo de broma, hace tiempo que eso ya había pasado y jamás le molesto hacerlo, podía permanecer horas sobre sus rodillas si eso significaba estar con sus gemelos de esa forma ya que su recompensa seria probara sus gemelos.

- Bueno pequeño travieso, al parecer... - Siguió Fred.

- Tu no eres de todo un Malfoy, ya que lo has hecho ángel - Termino George.

- Pero sabes que... - Dijeron los gemelos al mismo tiempo con esa voz que volvía loco a Draco, y hacia que sus piernas fueran gelatinas - Eso es bueno, porque... tu serás un Weasley en el futuro - Terminaron de decir casi como si fuera un hecho, Draco los miro sorprendido, eso no era lo que esperaba escuchar en esos momentos.

El Ángel acechado (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora