Hoseok se encontraba sentado frente al espejo, Jin su sirviente cortaba su cabello para acomodarlo mejor, sus rizos caían sobre su cara y sus ojos se encontraban inchados y rojos de tanto llorar.
-Listo -Comento Jin- e terminado mi señor.
Hoseok toco uno de sus rizos con su mano derecha y las ganas de llorar llegaron denuevo, él no había traicionado al principe, solo llevaba un día y una noche ahí, como era posible que lo traicionara así de rapido.
Hoseok tallo sus ojos con su hanbok y miro a Jin, este acuno su cara entre sus manos y se dispuso a decir.
-Mi señor no este triste -Sonrio amablemente- ya vera que su cabello crecera rapido.
Hoseok asintio y se volvio a ver al espejo, un broche fue colocado en su cabello, este era de la flor se vainilla su olor favorito de Hoseok, con sus dedos lo toco mirando a Jin atravez del espejo.
-Fue un regalo del genral Namjoon y su esposo Jackson.
Hoseok hizo una o con su boca y sonrio, sin embargo vio la mirada triste de Jin.
-Aun le amas, verdad -Jin le miro a los ojos.
-O mi señor -Dijo Jin apresuradamente y tomando sus manos- usted sabe que cuándo el se confeso a Jackson mis sentimientos murieron.
-¿Por qué mientes? -Le miro tristemente- no que es el amor, pero no quiero enamorarme.
Jin asintio y se levanto, ambos salieron de la casa comenzando a caminar, Hoseok logró ver a Jimin tomando el té junto al general Jungkook, este solo bajo su mirada y continuó caminando, al llegar al jardín pudo ver a la reyna quien le sonrio de manera amable y calida.
-Veo que mis flores han vuelto a nacer.
Hoseok sonrio y se acerco a ella.
-Claro mi señora -Dijo mientras se incaba a tomar un jacinto- mientras las ama ellas daran de sí.
La reyna observo su cabello.
-Lo lamento -Solto al fin- mi hijo no suele ser así a menos que este enojado.
-No se preocupe, después de todo no es nada.
La reyna le sonrio. -Mandare a traer otras flores, digame cuáles recomienda usted.
Hoseok le miro con ojos brillos -Rosas blancas -Solto feliz- las rosas blancas son hermosas y logran confundir la nieve.
La reyna solto una risita y se retiro no sin amtes mandar a alguien a buscar dichas flores que tardarian una semana. Taehyung entro al jardín molesto de ver a Jungkook y Jimin juntos, observo a Hoseok quien regaba sus plantas.
-Acaso no fue sufiente ayer, ahora quiere que lo azote.
Hoseok le miro sorprendido pero luego nego.
-Es mejor que se retire de los jardines si no quiere ser azotado.
Taehyung miro el cabello de Hoseok y observo el broche de la flor de Vainilla.
-Aun que use un broche usted sigue igual, sigue siendo el mismo.
Hoseok toco el broche y sus ojos se agudaron, Jin se acerco a él y por fin volvió a hablar.
-Lamento que me entromenta principe Taehyung -Jin estaba nervioso- la reyna autoriso la presencia de Hoseok en el jardín a ordenado a cuidarlo.
Taehyung solo bufo y se fue, Hoseok aún seguía tocando el broche en su cabello y Jin le abrazo.
-Debemos de mandar estas observaciones al templo sacerdotal mi señor.
Hoseok no escucho nada.
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//Esta es la flor de Vainilla que Hoseok traía en su broche//
