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Hershey's Parte I.
Lunes 31 de marzo.
Narradora omnisciente:
-Perdón Finnie.-Susurra apenas audible la castaña, ofreciéndole una barra de chocolate Hershey's, haber pasado un fin de semana aburrida en casa sin su mejor amigo había sido una tragedia para ella.
Sus ojos estaban un poco rojos y se notaba que poco a poco comenzaban a cristalizarse, el pelinegro notó como los bonitos ojos de su castaña favorita estaban aguandose y automáticamente sintió un dolorcito en el pecho.
-Te perdono, Mills.-Le dice y le da una sonrisita, su amiga cierra los ojos y le sonríe, haciendo que las lágrimas acumuladas en sus ojos caigan por sus rosadas mejillas.-No llores, no me gusta verte llorar, tonta.-Suelta el, acompañado de una risa, que la ojimiel le devuelve.
-No vuelvas a dejarme todo el fin de semana sola, ¡Mis padres han ido de viaje y me han dejado con la señora Ratthis! Me ha llevado a la cama a las siete de la noche, ¡Las siete Finnie!-Reprocha.
-Oh por Dios es un monstruo.-Exclama el sorprendido con la boca ligeramente abierta.
-¡Lo sé! ¡Eso le dije!
-¿Le dijiste monstruo a la señora Ratthis?-Pregunta anonado.
La señora Ratthis era la niñera de confianza de ambas familias, una señora de sesenta años y la enemiga más fuerte de ambos niños, le gustaba hacerlos dormir a las siete y detestaba que coman dulcesdespués de las cinco, los despertaba temprano y desayunaban cosas saladas. Lo bueno de aquello, era que casi siempre estaban juntos, convirtiéndoseasí en el dolor de cabeza más grande de Ratthis, dos niños de ocho años eran su peor pesadilla.
-Bueno, le insinúe.-Respondió.
-¿Qué?-Preguntó confuso el pelinegro.
-Le dije que debería ir a actuar en Sherk.-Soltó ellajunto a una risita.
-Oh por Dios Millie.-Comenzó a reír su amigo.-Esa es mi chica.-Terminó sacudiendo el pelo de la más bajita.
Desde aquel día, si alguno de los dos se enojaban por alguna razón, debían regalarse un Hershey's, en símbolo de lo tontas que podían llegar a ser sus peleas y lo felices que podían llegar a ser recordándolo.