Finn y Millie, por siempre y para siempre.

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Finn y Millie, por siempre.

Jueves 27 de marzo.

Narradora omnisciente:

Después de haber dejado a Sadie en su casa -cerca de las una de la madrugada- Wolfhard y Brown decidieron ir a dormir a casa del pelinegro, por dos razones:

Ninguno de los dos tenían padres en casa, y no querían aburrirse solos.

Encaminaron el auto hacia el hogar del recién nombrado, y se pasaron el camino hablando de temas triviales, por lo menos antes de que Millie hablara.

-¿Qué vamos a hacer?. -Preguntó con poca angustia, sin embargo, su mejor amigo pudo notar la desesperación en su voz. -Digo, la única vez que hemos peleado hemos sido tú y yo. -Prosigue. -Y nosotros no sobrevivimos el uno sin el otro. -Espeta. -Pero no creo que Caleb pida disculpas, mucho menos Sadie.

Era cierto, lo menos probable es que la rojita pida disculpas, no lo haría, ambos  lo sabían, incluso Caleb lo sabía.

-No lo sé. -Contesta. -Pero si algo sabemos es que tenemos que hacer que se reconcilien. -Da un largo suspiro, la castaña pone sus pequeñas manos en sus ojos y se tapa la cara, frustrada.

-Todo estaría bien si esa estúpida no hubiese aparecido. -Concluyó seguido a otro pesado suspiro.

-No lo sabemos, quizás ellos estaban destinados a discutir.

Millie levanta la cabeza rápidamente con molestia en su semblante.

-¿La estás defendiendo?.

-Estoy diciendo que Caleb y Sadie no iban para buen rumbo. -Explica. -Los amigos no pueden verse de esa forma, siempre habrá algún obstáculo.

-La estás defendiendo. -Asegura. -Te juro que si la estás defendiendo déjame bajarme del auto y irme a casa sola.

-¿Por qué tanto escándalo en un problema que es de ellos?.

-Por que son nuestros amigos, no podemos dejar que discutan y cada uno tome un rumbo. Si Sadie no mató a Tina hoy, lo haré yo mañana.

Finn abrió la boca para articular alguna palabra, pero el tono de llamada de Millie interrumpe totalmente.

Ambos miran el nombre de Jaeden en la pantalla y el bufa mirando a otro lado, ese chico aún no le caía bien, algo no cerraba y le molestaba totalmente.

En cambio Millie, sonríe y lo toma, hasta que el recuerdo que la dejó plantada viene a ella y su sonrisa desaparece, se borra por completo y su semblante es más frío, apaga su teléfono y vuelve a ponerlo donde ya estaba antes.

-¿Estás molesta conmigo o con él? -Preguntó Finn viéndola mirar hacia la ventana, justo como el lo hacía hace un momento.

-Con ambos quizás. -Acota ella.

-Oh vamos, yo no te he dejado plantada. -Indica el.

-Lo has hecho una vez.

-¡En cuarto grado! ¿Acaso no vas a superarlo?. -Soltó una carcajada.

-No puedo creer que me hayas plantado Wolfhard. -Se hizo la indignada, ganándose que el le lance una mirada rápido y una risa antes de frenar en el semáforo.

-¿Te das cuenta de que eres una estúpida? -Pregunta el.

-Más estúpido serás tú. -Contestó y rió de nuevo. -Me siguen preocupando Sadie y Caleb, además de que Noah tenía la carita golpeada. -Dijo tiernamente.

-¿Ahora te gusta Noah?, diablos Millie. -Molestó Finn.

Ella hizo una mueca de asco y ambos volvieron a reír.

-Noah está enamorado de Sadie, es eso lo que me entristece, ella no lo ve ni como hombre, Noah es como una chica más para ella. -Vuelve a hablar la castaña. -Y sé que su relación no se va a dar, ¡Menos ahora! El estará carcomiendose por dentro con culpa.

-Realmente no creo que se fuera a dar ni antes ni ahora, Noah ha salido con Lilia la otra vez, quizás tiene algo entre manos. -Empezó el. -Y bueno, Caleb y Sadie tampoco tienen un futuro juntos, debemos admitirlo.

-Es cierto, pero ¿Noah y Lilia? Noah muy en el fondo quiere algo serio, y Lilia no puede dárselo, está dispuesto a algo más que un polvo y ella no, es simple.

-Bueno, tienes razón.

-Siempre la tengo, Finnie. -Sonríe orgullosa y mira las luces del alumbrado de la calle. -¿Y Maddie qué?.

-¿Maddie y Noah? -Dijo Finn asqueado, no era una buena combinación por donde sea que los mires.

-¡No! Te hablo de que Maddie ha defendido a Sadie, ¿Crees que solo se quiere llevar bien con nosotros o es por Caleb?.

-Yo creo que solo no quiere problemas, es entendible.

Maddie Ziegler era una chica popular, poderosa y feminista, dispuesta a defender a cualquier chica en aprietos, a diferencia de la élite, ella por más de tener dinero no se metía en el peleas y cosas por el estilo, era calmada y le gustaba hacer yoga, prefería aquello antes de intimidar a los demás y por eso era bastante querida en el instituto.

De lejos pueden visualizar la casa de los Wolfhard, entonces Millie toma el control que abre la reja y toca el botón rojo que tiene un "1" dentro.

El gran portón negro se abre, permitiéndoles pasar, una vez dentro, la castaña vuelve a tocar el botón, esta vez el que tiene el "2" y este se cierra.

El auto se estaciona y caminan hasta la puerta sin decir ninguna palabra, una vez dentro el pelinegro cierra de nuevo con llave y la mira.

Millie venia desde la cocina con una cuchara y un pote de helado de vainilla en manos, lamiendo la cuchara y tomando el pote con su extrema fuerza para que no cayera.

El alzó una ceja.

-¿Qué? Winona siempre me dice que también es mi casa. -Le saca la lengua y vuelve a lamer la cuchara.

El, por milésima vez en el día vuelve a reír.

Millie era su mejor amiga.

Finn era su mejor amigo.

Ellos eran Finn y Millie, por siempre y para siempre.

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Hola de nuevo:)

No puedo creer que logre subir capítulos diarios, me siento totalmente bendecida.

El próximo capítulo va a girar en torno a Caleb por que me di cuenta que estoy escribiendo bastante poco de él.

¿Cómo les cae Jaeden? ¿Creen que sea bueno para Millie?.

¿Les parece bien que Finn haya medio defendido a Tina? ¿Sospechas?.

Nos leemos pronto♡.

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