ÉLITE

Problemas en el paraíso

Problemas en el paraíso

6 de abril

Narrador omnisciente

─Ni siquiera te molestes.─ Articula Maddie a la defensiva. Evitando todo contacto con su ahora ex-novio.

─Madds, Dios, escúchame por favor.─ Imploró el de rizos, con la voz cargada de culpabilidad.

Así que era esto lo que ocultaba.

Había estado con Lilia.

Y no se lo dijo.

─Bonita, te juro que no es como tu piensas. ─Dijo él. Su voz sonaba distinta, rota.

─¿Ah si?. Lo encara ella, volteandose bruscamente. ─¿Entonces no te acostaste con mi mejor amiga? ¡Días después de que nos besamos! ¡Eres un jodido idiota!.

─¡Apenas estábamos hablando! ¡No creí que terminaríamos saliendo!.

─Olvídate de mí. Hablo en serio, Gaten. ─Advirtió frívola. Lo odiaba. Odiaba haber vivido en una fantasía donde era amada por su novio y haber caído tan rápido a la realidad. Donde él había mantenido contacto íntimo con su amiga.

Su mejor amiga.

─Si me dejas explicarte bien las cosas estoy seguro de que te darías cuenta de lo patético que es discutir por eso. ─Exclamó desesperado.

─¿Osea que si quiero puedo follarme a Noah? ¿No te importaría?. ─Preguntó con veneno en su voz. ─Como no significaría nada. ─Ironizó una vez más.

─¡No es el punto! ¡No es ni remotamente parecido!.

─¡Por supuesto que lo es! ¿Cómo te sentirías si te enteraras por un extraño loco que tu novia y el único amigo en el que confías plenamente tuvieron algo, y para colmo lo ocultaron?.

─Maddie, yo te amo. ─Comenzó.─ Ni siquiera sabía que Lilia era tu amiga en ese entonces. Pero si sabía que me gustabas, tenía miedo de que lo hicieras. ¡Traté de ignorarte tantas veces! Pero...─

─¡Deja de mentir, todos en la escuela saben que es mi mejor amiga, idiota!. ─Chilló, dejando caer la primera lágrima que más tarde sería acompañada por muchas más. ─Olvídate de lo que sea que hayamos tenido, Gaten. Hablo en serio. ─Terminó, marchándose, dejándolo ahí. Solo.

¿Quién demonios le había mandado esas fotos?.

[☆]

─Cariño...─Lo llamó la rubia, sintiendo un nudo en su garganta formarse. Impidiendole continuar hablando.

¿Cómo le explicaría esto?.

─Ni siquiera lo intentes, Lilia. ─Contestó el, frívolo, esquivando las manos de su novia. Aún observando aquellas imágenes que tenía en la mano.

Imaginarla con alguien más era el puto infierno.

─¡Si no escuchas mi versión lo malinterpretarás todo! Son fotos viejas, mucho, de hace unos meses. ─Se defendió, aún tratando de acercarse a él.

─No te importó meterte con el novio de tu amiga. ─Susurró incrédulo, mirándola con el ceño fruncido y molesto al mismo tiempo.