Gamers in Love [JiCheol]

Capítulo 73

Caminaron hacia la habitación con sus labios unidos, batallando ligeramente con sus lenguas, pues Seungcheol estaba más concentrado en mirar el camino que en batallar. Llegaron a la habitación, la cual cerraron con seguro, luego de la interrupción de hace varias semanas de Soonyoung, no querían volver a ser interrumpidos. Fue cuestión de segundos para que la ropa desapareciera de sus cuerpos, cada uno se hizo cargo de sus prendas sin importarles dónde la dejaban.

Se acercaron para besarse y continuar estimulando sus cuerpos con caricias y deslices de sus manos sobre la piel. Con pasos torpes y en medio del beso, llegaron hasta la cama, donde Jihoon no lo pensó ni dos veces para ponerse de rodillas y manos sobre el colchón; Seungcheol aprovechó y fue el lubricante para que fuese más fácil deslizarse en el interior de Jihoon, pues no había dilatado demasiado la entrada y no quería esperar más para estar dentro.

Seungcheol subió a la cama y se arrodilló detrás de su novio, deslizando su mano lubricada en su miembro, y también dejando un poco en el ano de Jihoon, tanto por fuera como en el interior.

—¿Estás listo, amor? No hay tiempo para prepararte más.

Jihoon rió porque sabía que eso no era cierto, pero los dos estaban tan ansiosos que respondió —sólo no me rompas el culo.

—No prometo nada— rió suavemente y alineó la cabeza de su pene en la pequeña abertura.

La piel fue expandiéndose lentamente, abriéndose paso hacia el interior, Seungcheol estaba haciéndolo cuidadosamente para no lastimar a Jihoon, entraba despacio y salía de igual forma, haciéndolo de poco en poco hasta que el miembro entro completamente. El mayor sentía su miembro siendo aprisionado de manera exquisita y Jihoon sentía como su cuerpo comenzaba a relajarse.

—Agh Hoonie— gimió Seungcheol al introducirse completamente —dime cuando estés listo.

Jihoon suspiró y asintió, dejando caer su cabeza entre sus hombros y sosteniéndose ahora de sus antebrazos, dejando levantado el trasero.

La vista era maravillosa para Seungcheol y no podía evitar deslizar sus manos sobre la blanquecina piel, tentándose a nalguear esos redondos glúteos, pero se contuvo, esperando que Jihoon se acostumbrar al intruso. De lo que no pudo contenerse fue el mordisquear la piel de la cadera de su novio, dejaba ligeros besos sobre la piel y donde podía, alcanzaba a morder ligeramente, no tanto para dejar una marca, pero si lo suficiente para que Jihoon lo sintiera.

Poco tiempo después las caderas de Jihoon comenzaron a empujarse hacia atrás, chocando con la pelvis del mayor y provocando que Seungcheol también comenzara a mover sus caderas, pero hacia adelante. Con forme el ritmo de las embestidas iban aumentando, el sonido de sus pieles chocando también lo hacían, combinándose con el sonoro gemir de los dos.

—Agh... precioso— gimió el mayor tomando con firmeza de las caderas de Jihoon, moviendo con más fuerza sus caderas.

—Ah ah ah... sí.. ah agh Cheol ah— gemía en cada estocada.

Las manos de Jihoon se tensaron, envolviendo la sábana que comenzaba a desordenarse por el movimiento de sus cuerpos. Seungcheol se inclinó hacia adelante, haciendo que Jihoon se levanta un poco para sostenerlo de los hombros, encontrando una mejor estabilidad para golpear con fuerza hacia el interior de su novio. Jihoon arqueó la espalda y no dejó de gemir tan alto como podía, disfrutando del amor que Seungcheol estaba dándole.