Gamers in Love [JiCheol]

Capítulo 8

Las manos de Seungcheol eran demasiado inquietas, se movían por todo el cuerpo de Jihoon un tanto apresuradas. Tomó al menor de las caderas, atrayéndolo a su cuerpo mientras él empujaba las propias hacia adelante, consiguiendo que su pene chocara con el trasero del menor en repetidas ocasiones.

—De verdad... eres un pervertido— dijo Jihoon con la respiración pesada.

—Y te encanta— murmuró cerca de la piel de su cuello, haciendo que se erice.

Jihoon no reprochó ante eso, estaba volviéndose loco y quería más, pero el temor que se instaló en su cuerpo lo hacían pedirle que se detuviera —p-por favor Cheol, detente.

Seungcheol detuvo los besos que tan entusiasmadamente estaba brindándole al menor en el cuello —¿de verdad quieres que me detenga?

—N-no... es decir, sí, no sé, tengo miedo.

El mayor tomó de la barbilla a Jihoon y lo hizo girarse ligeramente para verlo a los ojos —¿a qué le tienes miedo?

Las mejillas de Jihoon estaban enrojecidas, en parte era por los toques de Seungcheol en su cuerpo, pero también por la vergüenza que tenía por decirle —¿me dolerá mucho?

Seungcheol sonrió —tiene que hacerlo, Jihoonie, pero te prometo que haré todo lo posible para que el dolor pase rápido y sea menos intenso. Pero si de verdad no quieres hacerlo ahora, no hay problema, lo haremos cuando estés listo.

Aquellas palabras y la cálida sonrisa que Seungcheol le brindó, lo tranquilizó un poco —no estoy listo para hacerlo ahora. Pero no quiero que vayas al baño a deshacerte de tu erección— al ver la sonrisa apenada de SeungCheol, continuó —sé que últimamente nuestros besos te ponen duro demasiado rápido, también a mí en ocasiones, pero llega un punto en el que te detienes y vas al baño, y los dos sabemos que no vas a hacer pipí.

SeungCheol rió —si, no voy a hacer pipí— suspiró —a veces sólo quisiera tomarte y...— dejó la frase en el aire cuando tomó las caderas de Jihoon y las jaló hacia su pelvis en un fuerte movimiento, haciéndolos gemir sonoramente a los dos —pero como no sé si tú quieres continuar, mejor me detengo y voy a calmarme.

—Lo siento— Jihoon sonrió con un poco de tristeza y bajó la cabeza —yo... me gustaría continuar, pero... no me siento listo todavía.

—Y está bien— dejó un pequeño beso en su coronilla —podemos hacer otras cosas— dijo con una sugestiva sonrisa.

—¿Cómo qué cosas?— lo miró con curiosidad.

—¿Qué te parece si te doy clases, y luego me enseñas lo que aprendiste— levantó una ceja en un movimiento rápido y repetitivo.

—¿A caso eres un experto?— hizo una mueca de desagrado —¿ya lo haz hecho con alguien?

SeungCheol no pudo evitar reír a carcajadas —soy igual de noob que tú en esto, pero yo si veo videos en internet, Jihoonie— guiñó un ojo.

—Eres un pervertido, bien me lo decía SeokMin.

Ambos rieron, pero dejaron a un lado el tema para pasar a las clases. Seungcheol hizo que el menor se levantara de sus piernas y lo tomó de la mano para acercarlo hasta la cama. Besó sus labios con intensidad, profundizando el beso con sus lenguas; hasta que ambos tuvieron suficiente y se separaron.

El mayor tiró del hilo que sujetaba los pantalones deportivos de Jihoon para soltarlo de su cintura y que los pantalones pudieran bajar con facilidad. Miró atentamente el rostro de Jihoon al tomar del bóxer, que para su tristeza, no eran los del oso que mandaba besos; y los deslizó con lentitud por sus muslos, dejándolos a medio camino para que bajaran solos hasta sus tobillos, donde Jihoon se los terminó quitando.

El pene de Jihoon estaba totalmente duro, ligeramente húmedo y las venas se marcaban con intensidad a lo largo de la piel. Seungcheol jamás había probado un pene, era igual de virgen que Jihoon y le encantaba la idea de que ambos pudieran aprender juntos; había visto demasiados videos, y también se había imaginado demasiadas veces cómo lo haría con Jihoon, pero ahora que tenía su miembro expuesto ante él, estaba un poco nervioso.

Hizo que Jihoon tomara asiento en la cama, él se arrodilló y se metió entre sus piernas, observó su pene por unos cuantos segundos y luego lo tomó desde la base y se deslizó hacia arriba con lentitud. Miró hacia arriba dándose cuenta de que Jihoon estaba mirándolo a él y no a su mano en su pene.

—Ya vi que sí eres noob— dijo Jihoon con una sonrisa.

Seungcheol sonrió —no es lo mismo tocar el pene de alguien más, que el tuyo propio.

Jihoon asintió —tómate tu tiempo, tenemos toda la noche.

El mayor no borró su sonrisa y regresó la mirada al miembro de Jihoon. Cerró los ojos por unos segundos, recordando algunas de sus fantasías, o de los videos que había visto recientemente. Abrió los ojos y se dispuso a empezar con la masturbación. Comenzó lentamente, subiendo y bajando suavemente, sacó su lengua y la deslizó por el glande, provocando un jadeo en Jihoon. Detuvo el movimiento de sus manos sólo para que pudiera meter el trozo a su boca, alcanzando a cubrir un poco más de la mitad.

Sin tener la menor idea de qué hacer, sacó el falo de su boca y miró hacia arriba, Jihoon estaba mordiéndose el labio, tenía una mano apoyada sobre la cama y otra en los cabellos de Seungcheol, acariciando con suavidad. En cuanto sus miradas se cruzaron, sonrieron.

Aunque comenzaron lentamente y con un poco de nerviosismo, poco a poco Seungcheol fue tomando la confianza para introducir el pene de Jihoon en su boca, comenzando a comprender cómo mover su lengua para causarle esa sensación de cosquilleo que se acumulaba poco a poco para eventualmente estallar en chorros. Sabía que estaba haciéndolo bien por los sonoros gemidos del menor, además de que sus caderas respondían al estímulo y terminaban dando ligeros empujones hacia el interior de la boca de Seungcheol.

Seungcheol no lo hacía nada mal, la sensación era mucho mejor y más placentera que cuando se masturbaba con la mano o contra la almohada. Pero el mayor no conocía el cuerpo de Jihoon, ni sus zonas más erógenas, apenas se estaba dando la tarea, así que les tomó tiempo llegar a ese punto en el que Jihoon terminó lanzando su semen contra la garganta de Seungcheol.

La respiración de Jihoon se había agitado por su reciente orgasmo, y estaba fascinado con que Seungcheol se la haya chupado de tal manera, pero ahora, era momento de que demostrara lo que aprendió. Después de poco tiempo de recuperarse, se apresuró en dejar desnudo a Seungcheol de la cintura para abajo, estaba ansioso por demostrar lo que había aprendido de su mayor.

Seungcheol definitivamente no se decepcionó, Jihoon había aprendido bastante bien, su lengua era escurridiza y muy juguetona sobre su miembro. No estaba seguro si era por la falta de atención en su miembro que estaba más sensible ante el tacto, o si realmente Jihoon sabía dar una buena chupada.

—¿Dónde ah a-aprendiste... a hacer esto, ah Jihoonie?— preguntó entre gemidos.

Jihoon sonrió y sacó el miembro de su boca, haciendo que un pop se escuchara al final —tu me enseñaste— sonrió al ver la ceja levantada de Seungcheol, porque era más que obvio que el mayor fue muy torpe y tímido —también veo videos, Cheol. Y me gusta mucho ver esto en particular.

Seungcheol abrió ligeramente más los ojos en sorpresa y sonrió asintiendo —continua.

Nuevamente el menor introdujo el pene de Seungcheol a su boca, y en unos cuantos movimientos donde su cabeza se deslizaba de arriba hacia abajo, Seungcheol terminó corriéndose en la boca de Jihoon.

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Decidí que si voy a corromper mi historia dulce e inocente de dos adolescentes cofcofMenoresDeEdadCofcof enamorados, con algo de sexo intenso, lo haré hasta el final... Así que, aquí tienen la cereza del pastel, sin el pastel(?). De nada 😉