Capítulo 33

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Seungcheol y Jihoon caminaban tomados de la mano yendo hacia la casa del mayor, Jeonghan los había acompañado hasta la mitad del camino, donde tuvieron que separarse para tomar distintos caminos. Seungcheol llevaba en la espalda la mochila de Jihoon, la cual pesaba bastante.

—¿Qué tanto traes? Creí que dejarías tu computadora en casa de Soonyoung.

—La computadora la deje— dijo con una ligera sonrisa.

—¿Y entonces por qué pesa demasiado?

—Es un secreto.

—Jihoon— llamó regañándolo suavemente.

—No voy a decirte aunque uses ese tono conmigo.

—Jihoonie— esta vez usó uno de sus hermosos pucheros para que el menos cayera ante sus encantos.

Jihoon negó con la cabeza —ni por que pongas esa hermosa cara voy a decírtelo, así que deja de insistir o no habrá nada.

—¿Es algo para mí?

—Si te portas bien, sí, sino tendré que castigarte.

Seungcheol suspiró, aunque estaba muy ansioso por saber de qué se trataba, prefería quedarse por el momento con las ganas de saberlo y luego enterarse de lo que tramaba su pequeño novio. En poco tiempo llegaron a la casa, y el hambre comenzó a invadirlos, así que el mayor propuso prepararle a Jihoon una rica cena, algo no tan elaborado para que no terminaran muriéndose de hambre.

Jihoon aceptó, desapareciendo de la vista de Seungcheol. El mayor sabía que Jihoon no estaba muy acostumbrado a involucrarse en la cocina, y aunque le hubiese gustado que se quedara a su lado para admirarlo como mínimo, no le dijo nada y dejó que se quedara en su habitación, haciendo quién sabe qué.

No le llevó mucho tiempo preparar un par de sándwiches y freír papas congeladas como acompañamiento —Jihoon, la cena está lista— creyó que el menor vendría enseguida, pero no obtuvo ni una respuesta —¿Jihoon?— caminó hacia la habitación y al abrir la puerta, se quedó con la boca abierta.

—¿Te gusta?— Jihoon estaba sentado en el borde de su cama, ligeramente de lado y con sus piernas cruzadas, mostrando la curva de su trasero perfectamente delineado por el traje ajustado. Su cabello estaba adornado con una diadema de audífonos en color negro con rosa; en su rostro, debajo de sus ojos tenía una líneas gruesas en color rosa y una de sus manos llevaba la pistola de luz tan característico del personaje del cual estaba vestido.

Seungcheol se quedó sin palabras, no podía creer que finalmente su novio estaba haciendo el cosplay que tanto le había pedido en el último mes. Lo miraba de pies a cabeza, el traje era una réplica bastante exacta, aunque eso era lo de menos, pues el cuerpo de Jihoon lucía igual de hermoso con él que sin él.

—¿Te comió la lengua el ratón?— preguntó Jihoon con las mejillas sonrojada por la muy atenta mirada de su novio sobre de él.

—T-te... te ves muy hermoso.

—Es tu regalo de cumpleaños— dijo con una dulce sonrisa, pero a la vez bastante coqueta —iba a esperar para tu cumpleaños, pero no sabía si tendríamos la oportunidad o no, así que preferí hacerlo ahora.

—E-está bien, es un buen regalo.

Jihoon rió —Cheol, ni siquiera sabes lo que estás diciendo.

—S-sí, eres hermoso.

El menor bajó ligeramente la cabeza y luego volvió a mirarlo —¿no quieres tocar tu regalo?— deslizó una mano desde su pecho hasta la curvatura de su trasero, haciéndolo de una manera lenta y sensual, provocando a Seungcheol.

Gamers in Love [JiCheol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora