Capítulo 53

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—¿De verdad crees que se hayan ido juntos?— preguntó Mingyu a su novio mientras caminaban por el pasillo de la casa hacia la pista de baile.

—Claro que sí, la gente no desaparece y ya en una fiesta. Seguro andan en alguna habitación— respondió tranquilamente.

—No sé, tengo miedo.

—Ay no seas un bebé, no estamos en una película de terror.

—T-tal vez no, pero ¿has visto películas de terror? En las películas dicen: "no estamos en una película"— dijo en un tono burlón —y sí lo están.

—¿Ves cámaras por aquí? ¿Eres actor acaso?— preguntó Wonwoo viendo a su novio, esperaba una respuesta de su parte, pero Mingyu sólo miró su alrededor —olvídalo, ¿sí?

Llegaron a la pista de baile y Wonwoo le dio un largo beso a su novio para que se calmara, el que estuvieran en una fiesta justo el 31 de octubre, no significaba que algo terrorífico pasaría como en las películas de terror. Sin embargo, mientras ellos estaban distraídos bailando, fuera del jardín estaba sucediendo algo realmente fuera de lo común.

Jeonghan y Joshua habían salido a tomar un poco de aire al jardín, había tanta gente dentro de la casa que comenzaba a costarles trabajo respirar adecuadamente, además, estaban agitados y sudados por el baile, lo que lo dificultaba aún más. Se acercaron a algunos amigos para platicar, aunque la música aún se escuchaba fuera de la casa, no era tan fuerte y las conversaciones eran más claras, así como el grito aterrador de una chica.

Todos los que se encontraban afuera, voltearon inmediatamente al escuchar el grito, viendo a una chica aterrada y preocupada por su amigo, quien había caído al suelo desmayado. Muchos pensaron que ya había bebido demasiado y por eso terminó desmayándose, pero cuando alguien se acercó y dijo que no tenía pulso, varios se asustaron.

—¿Será cierto?— preguntó Joshua aferrándose al brazo de su novio.

—No lo sé.

Ambos trataban de ver lo que sucedía, la gente se había amontonado para ver lo que había pasado y para corroborar lo que el chico había dicho del que cayó al suelo. La chica seguía asustada, y había comenzado a llorar mientras trataba de explicar lo que había sucedido.

—Sólo estábamos conversando, me dijo que había encontrado esa cosa en el baño— señaló el objeto que estaba en la mano de su amigo— y cuando lo pegó a sus labios, cayó desmayado.

—Es sólo un silbato— dijo alguien recogiendo el artefacto. Lo pegó a sus labios con la intención de soplarlo, pero al hacerlo, comenzó a tener dificultad al respirar y de pronto, también se desvaneció.

La chica nuevamente gritó asustada y expresó horrorizada —¡eso fue lo que ocurrió!

Varios chicos supersticiosos comenzaron a asustarse y alejarse del lugar para evitar que algo similar les sucediera, pero eran más las personas curiosas las que estaban ahí que el jardín comenzó a llenarse de más personas en cuanto el chisme llegó al interior de la casa.

—Vamos adentro— dijo Jeonghan —tal vez sea una broma.

Broma o no, Joshua no dudó en dejarse guiar por su novio y entraron a la casa, la cual parecía un poco más vacía de lo que había sido hace unas horas. Algunos chicos y chicas se acercaron a ellos preguntando por sus amigos, quienes al parecer estaban desaparecidos; la pareja no los conocía a todos y algunos que sí, pero a pesar de eso, realmente no los habían visto desde hace un tiempo, así que no eran de ayuda para ellos.

Aún había gente divirtiéndose, bebiendo y bailando por toda la casa, aún era temprano, aunque ya era de madrugada, la fiesta todavía continuaría por un largo rato más. La pareja de ángeles fue hasta la cocina, necesitaban algo para beber, calmar su sed y el ligero susto que invadía sus cuerpos; en el pasillo hacia la cocina, se toparon con sus amigos, quienes aún no sabían lo que había pasado afuera.

—¿Todo bien?— preguntó Wonwoo viendo a Joshua un poco pálido, aunque no recordaba si era parte del maquillaje, o de verdad lo estaba.

—Creo que están haciendo bromas allá afuera— respondió Jeonghan a cambio.

—Bromas de muy mal gusto— expresó Joshua.

—¿Por qué?— esta vez preguntó Mingyu.

—Dicen que hay dos chicos muertos por un silbato maldito— dijo Jeonghan —no creo en esa basura.

—También hay gente desapareciendo— se apresuró a decir Mingyu un poco más asustado.

—No exageres, Min— se quejó Wonwoo —sólo fueron dos personas, y bien pudieron haberse ido juntos, o a lo mejor estaban tan ebrios que se fueron sin ser conscientes.

—A nosotros nos preguntaron tres personas si habíamos visto a sus amigos, porque no saben dónde están y creen que desaparecieron— dijo Joshua algo preocupado.

Wonwoo rió ligeramente —estamos en una fiesta, no puede desaparecer gente sin que alguien los vea, seguro se fueron.

—O es una broma— dijo Jeonghan.

—También.

Mingyu era el más asustado de los cuatro, él si pensaba que realmente estaba sucediendo algo extraño en el lugar, mientras que Wonwoo y Jeonghan simplemente pensaban que era una especie de broma; Joshua tampoco estaba muy seguro, no se sentía con tanto miedo como Mingyu, pero no le estaba gustando lo que estaba sucediendo.

—Estaremos bien, sólo no se separen el uno del otro— dijo Wonwoo —¿quieren ir a bailar?

La pareja de ángeles aceptó, el ambiente aún estaba encendido, habían las suficientes personas divirtiéndose como para seguir preocupándose por algunas pocas personas desaparecidas; querían hacerse a la idea de que Wonwoo tenía razón, únicamente la gente estaba desapareciendo porque estaba yéndose del lugar sin decirle a nadie.

Los cuatro se movían en la pista de baile con pasión y diversión, aún quedaba mucho tiempo de fiesta y los anfitriones estaban haciendo lo posible para que todos la pasaran bien y olvidaran el incidente del jardín. Sin embargo, Mingyu se quedó con la idea en la cabeza, y aunque estaba bailando junto a su novio y sonriéndole o besándolo cada vez que lo miraba, no podía evitar mirar a su alrededor y encontrar algo sospechoso en el lugar.

No era tan fácil suponer si había alguien extraño en la fiesta llevándose a las personas, habían disfraces tan buenos, tan elaborados e incluso intimidantes, que cualquiera podría ser sospecho, incluso algunos actuaban de forma alocada e intensa, pero no era más que la actuación por el personaje del que decidieron vestirse, o eso quería pensar el hombre lobo.

A veces su mirada chocaba con la de alguien y Mingyu descartaba la idea en su cabeza de que esa persona era quien estaba provocando todo, pero también a veces se topaba con gente que miraba hacia la nada, con una mirada perturbadora y aterradora. Rápidamente regresaba la mirada a su novio cuando se topaba con esas miradas, temía que por estarlo viendo demasiado, él podría terminar siendo una de las víctimas desaparecidas.

Joshua no pensaba tan distinto del moreno, aunque no se sentía tan asustado como el menor, había una persona en la esquina que miraba a todos en silencio y de forma aterradora, lo que comenzaba a asustarlo.

Gamers in Love [JiCheol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora