Cuando Emilia entró a su casa encontró a su mamá leyendo una novela en el sillón de la sala de estar. Gabriela la vio correr a su habitación y eso la preocupó aunque también llegó a ver que su hija traía una sonrisa de oreja a oreja.
La madre tocó la puerta de la habitación de su hija.-Emi, ¿todo bien ahí?
-Sí mamá, disculpame si te preocupé.
-Bueno hija... me alegro. -dijo la mujer. Logró escuchar la voz de la joven con un tono distinto, como nerviosa.
Emilia no pudo disimular mucho frente a su mamá. No quería que ella se enterara aun porque se iba a ilusionar más que ella misma.
A decir verdad, ni siquiera Emi podía creer lo que había vivido ese día. ¿Quién besa tres veces a un desconocido? Lo conocía desde hacía tres días y ya estaba confiando ciegamente en él. En ese momento, mientras se daba un relajante baño de espumas y sales se propuso llevar las cosas con más calma, no quería terminar con el corazón partido.
Ella nunca tuvo relaciones formales, las pocas veces que estuvo cerca, todos ellos la desechaban. El último chico fue el más doloroso y todavía se encontraba superándolo, aunque habían pasado años. Siempre daba todo de sí y aun así no había vez que no hubiera salido gravemente herida. Emilia no sabía amar a medias. Siempre ponía todo lo que tenía al servicio del otro.
Por su lado, Gabriel condujo de vuelta a su casa, que quedaba a una cuadra de la facultad. Tarareaba la canción que escuchaba en el estéreo del auto cuando se dio cuenta que Emilia se había olvidado en su auto un pañuelo que usaba a modo de bufanda. La tomó en sus manos y se la llevó a la nariz. Estaba totalmente impregnado del perfume dulce y fresco que usaba la morena. Por un momento pensó en volver a su casa para llevárselo pero no quiso incomodarla.
Al llegar a su casa buscó su usuario de Instagram. Ella había compartido unas cuántas stories ese día. La primera era con su amiga Lorena en una cocina. La segunda era la captura de lo que había escuchado en Spotify: Olivia de One Direction. La última, en cambio, le interpeló. Era una foto de una mariposa que decía "Lo mejor está por llegar".
El joven buscó la opción de mensajes directos para avisarle que había encontrado su pañuelo.
*Hola bonita.
*Hola...
*Te olvidaste tu pañuelo rosa en mi auto.
*Ahhh, no me había dado cuenta de que no lo tenía.
*Mañana te lo llevo a la facultad.
*Yo curso hasta los miércoles. Mañana no voy a la facultad.
*Entonces voy a tener que llevártelo a dónde sea que estés ;)
*Puedo pasar por él mañana si querés.
*Perfecto, te espero para merendar entonces.
*Genial, nos vemos mañana.
*Que descanses Emi.
*Gracias, igualmente Gabi.
Hacía muchos años no escuchaba que alguien le dijera Gabi, sólo lo hacía su mamá y no la veía desde hacía unos siete años. La extrañaba a montones pero él no podía viajar y ella tampoco.
Emilia pensó en cómo contarle a su amiga que estaba comenzando a sentir algo por Gabriel. Había pensado en verla al día siguiente, quizás de nuevo para desayunar, ya que a la tarde había hecho planes con Gabriel. Decidió llamarla para quedar con ella.
-Hola Lore, ¿podemos hablar?
-Sí Emi, ¿qué pasa?
-Necesito verte mañana temprano... tengo que contarte algunas cosas.
-Ya sé que se cortó la luz hoy en la facultad.
-No es eso, ¿querés que nos encontremos en la plaza de tu barrio?
-Perfecto, a las 9 nos vemos allá.
-Nos vemos mañana amiga.
-Chau chau.
........................................
A las ocho sonó la alarma y Emilia se apuró a salir de la casa. Hacía un día hermoso, un poco fresco pero esos eran sus días favoritos. Pasó por una panadería para comprar algo para el desayuno, ya que su amiga llevaría el mate. Al llegar la vio estirando una lona en el pasto bajo un árbol. Se sentó junto a ella y le dio un sonoro beso en la mejilla.
- Cuente cuente... -dijo Lore mientras cebaba el primer mate.
-Bueno ayer pasaron cosas...
-¿Con cierto colorado lindo?
-Puede ser.- dijo tímidamente Emilia
-¡Noooo amiga! ¿ por qué esas cosas pasan cuando yo no estoy?- gritó Lorena con evidente sorpresa.
-Dejame contarte... Ayer salí sola a las escalinatas en el recreo. Estaba sola afuera y él vino a sentarse a mi lado. Se le ocurrió que nos escabulleramos a la terraza para ver el atardecer. Fui con él, como unos fugitivos. Vimos el atardecer y me besó, así de la nada.
-Woooow.
-Todavía no terminé.
-Sigue, sigue.
-Bueno, después de eso yo salí corriendo con la excusa de las clases, aunque en parte era verdad. Pero me sorprendió. Yo no lo conozco prácticamente y ya me estaba besando. Después de eso la profesora de Lengua no vino y de la nada se cortó la luz en la facultad y suspendieron las clases. Yo salí y me fui a la parada del bus. Ahí apareció de nuevo y me pidió que vayamos a la cafetería. Fui con él y le confesé que me encantó el beso.
-¡Me encanta amiga!
-Te juro que vi sorpresa en su cara, no esperó que le dijera eso. Y ahí de nuevo me besó. Fue muy tierno. Me llevó en su auto a mi casa y ahí... uuff... la cosa se puso hot. Nos besamos muy apasionadamente. Pero cortamos ahí porque... bueno no somos nada.
-Tampoco es que haga falta que sean algo para acostarse. Te lo digo yo y cualquiera.-Lorena me lo decía muy tranquila. Ella era muy adepta al sexo casual, no le gustaba estar en relaciones serias.
-Bueno, no es el caso. Ahí yo me bajé y me metí en mi habitación con una cara de tonta ilusionada. Hasta mi mamá se dio cuenta. Al rato me mandó un mensaje directo en Instagram diciéndome que me había olvidado mi pañuelo rosa en su auto. Quedamos hoy en vernos así me lo devuelve.
-Y de paso unos besitos. -Lore se reía mientras me pasaba un mate.
-No me voy a negar, ja ja.
-Así me gusta.
Siguieron charlando de otras cosas hasta que se despidieron y cada una siguió su camino a casa. Al final no había sido tan difícil contárselo a su amiga. Se lo había tomado con calma y no se enteró toda la plaza que ella se había besado con el profesor.
ESTÁS LEYENDO
Enséñame a amar
Любовные романыLa vida era muy monótona para Emilia, pero como dicen por ahí... lo mejor tarda en llegar. Así es como comienza una nueva etapa que es digna de compartir. ------------------------------------------------------------------ Esta historia está ubicada...