14. TODO POR ELLA

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- Para sacarla de aquí primero debo deshacer el pacto de sangre con Kai, la única que podría hacerlo es Seulgi, pero cuando intenté pasar al primer infierno la puerta estaba sellada, seguramente el maldito de Kai lo hizo. Así que necesito que le pidas a Ryujin que nos traiga la joya de transporte, esa que está en la entrada principal y transporta las almas a los infiernos. Con ella podremos ir directamente al reino del orgullo sin la necesidad de pasar por la puerta. "

Como Ryujin es la única capaz de volar, puede alcanzarla a la altura que está –

- ¿Y por qué no se lo pides tú?...-

- Ya sabes que Ryujin es bastante volátil y si yo se lo pido sólo jugará conmigo, en cambio contigo es más seria, te escuchará –

- Comprendo... ¿y el segundo favor?...-

- Ese sería en caso de que no hallemos a Seulgi a tiempo, tendré que recurrir a la segunda opción...-

- ¿Te refieres a...-

- Sí, mataré a Kai. Sé que por propia voluntad no la liberará así que no me dejará más opción que matarlo para romper el pacto...-

- ¿Estás seguro de hacer eso?... sabes las consecuencias...-

- Sí, por eso el segundo favor sería que si algo me pasa tú seas quien la saque de aquí luego de liberarla –

- Entiendo...-

- Lamentablemente todo está en contra de ella, Nayeon me dio un plazo de tres días para sacarla de aquí, pero de la forma que este lugar le afecta, no resistirá... y para peor Kai quiere convertirla en un demonio a riesgo de que pueda morir –

- ¿Convertirla en un demonio?... definitivamente está loco –

- Al paso que va ni siquiera podré sacar su alma de aquí, ese desgraciado la tendrá para siempre... ¿Qué dices?, ¿Me ayudarás? –

Lia hizo un breve silencio, miró hacia dentro del palacio y vio a Jennie acariciando a los perros de Lisa

- Dime... ¿De verdad vale la pena ir tan lejos por ella?...- preguntó.

Lisa volteó a verla y respondió - No tienes idea... haría cualquier cosa por ella. Tal vez si algún día te decides a salir al mundo exterior te enamores de alguien así como lo hice yo –

- No gracias... Prefiero seguir así y no exponerme a hacer tantas estupideces como ustedes - dijo con sarcasmo Lia.

- Ja ja, tienes razón... pero es algo que no se puede controlar. ¿Me ayudarás? –

- Esta bien... Iré a hablar con Ryujin...-

- Sabía que podía contar contigo, te estaré siempre en deuda –

- Dejémoslo ahí... volveré apenas tenga novedades –

- Entiendo, gracias –

Lia hizo un gesto de saludo en silencio y se marchó.

Mientras tanto, en el segundo infierno, Kai acababa de regresar a su palacio, topándose con el rastro de sangre y destrucción que había dejado Lisa a su paso. Cuando fue a la habitación donde tenía a Jennie, se encontró con la jaula destruida y unas pocas plumas que habían quedado en ella.

- Así que se la llevó la infeliz... –

- Disculpe señor Kai, no pudimos detenerla...- dijo el sirviente.

- No te preocupes, conozco a Lisa, sé de lo que es capaz - respondió mientras tomaba una de las plumas y la admiraba

- Actuó más rápido de lo que esperaba... pero sólo necesito pensar como la salvaje de mi hermana para adivinar qué hará... y creo que ya sé que es lo que planea... pronto la recuperaré...-.

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Luego de todo lo sucedido Lisa fue hasta su habitación, allí estaba Jennie, se había quedado dormida nuevamente debido a la falta de energía. Se sentó a su lado en la cama y notó que ella lloraba entre sueños, era la primera vez que la veía así. Delicadamente con su mano secó sus lágrimas y ante ello Jennie despertó

- Disculpa no quería despertarte - se disculpó Lisa.

- No te preocupes... estoy bien - respondió ella mientras se sentaba a su lado en la cama.

- Es que te vi llorando y pensé que tenías un mal sueño –

- No era eso... de verdad estoy bien... pero tú sí te ves preocupada, ¿Qué ocurre? –

- Debo sacarte de aquí lo antes posible... Lia me ayudará, pero igual siento que el tiempo se agota...-.

Jennie sólo la miraba en silencio

- Pero no temas, encontraré la manera, te lo prometo - continuó Lisa.

Ella toco su mano y dijo –no tengo miedo, confió en ti... Lisa-

- Eh?...- se sorprendió la joven Diabla e inesperadamente Jennie le dio un tierno besó en la mejilla. Lisa quedó impactada por aquella acción, pero no sólo por eso, también por la forma en que dijo su nombre con tanta confianza

- No puede ser... Jennie... tú... - trató de preguntar Lisa. Ella sólo la miró con una dulce sonrisa

- Siempre fuiste tú verdad?... eso tan importante que no podía recordar... eras tú...- dijo y una lágrima rodó por su mejilla.

Aquellos gestos de amor y frases sueltas al azar habían hecho un sendero de migajas en la mente de Jennie, logrando armar parcialmente un rompecabezas en su cabeza mientras dormía, y llegando a recuperar parte de sus recuerdos tan preciados...

Perdón si es muy cortico, espero que les guste.

Nathaly_1236

El Demonio Que Se Enamoro Del Angel  | JenLisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora