¿Alexia o Alexandra? Princesa vampiro *Completada*

Capítulo 18

-Sigo pensando que debí ir tras él - le digo a Dorothy mientras tomo de mi infusión.

-Necesita pensar, ésto ha sido un duro golpe para él, que probablemente el alpha de su manada matase a su madre, no es una noticia para tomarse a la ligera - me responde.

Hace ya casi una hora desde que Alec se fue a saber dónde, nadie sabe de él, no sé dónde está, no sé si está bien, no sé nada de él, y eso me frustra. Por suerte Dorothy viéndome tan alterada, preparó un poco de una infusión relajante que ella hace, la verdad es que es deliciosa, y me viene muy bien cuando estoy nerviosa, es agradable volver a tenerla en el castillo.

-Lo sé, y lo entiendo, pero eso no quita que me preocupe por él.

-Es admirable lo mucho que te preocupas por él, cualquier otro vampiro habría rechazado a su pareja por ser de la especie rival, y más siendo un omega, y tú sin embargo estás encantada - me dice Dorothy mientras toma de su infusión.

-Alec es más de lo que podía desear, es tierno, dulce, sensible, y sobre todo, me ama por quién soy y no por mi título o poder - digo con una sonrisa al pensar en él - durante el tiempo que llevo siendo vampira, cada vez tenía más claro que tendría la mala suerte de tener como pareja un idiota que se cree el mejor por ser de la nobleza o al menos de buena familia.

-Te entiendo amiga, a mí me pasa algo parecido - me dice con una mueca - todos los chicos que se me acercan es por interés, y eso me molesta y me cansa.

-¿Y tu madre?, ¿sigue empeñada en casarte?

-Ag, sí, y cada candidato es peor que el anterior - dice con cara de asco, no me lo quiero ni imaginar.

-¿Entonces qué vas a hacer?, ¿te vas a quedar en el castillo? - pregunto emocionada, me encantaría que se quedase de forma definitiva.

-Esa es mi intención, si me quedo a vivir aquí, mi madre no podrá influir sobre mí, solo espero que el rey me acepte.

-¡Claro que te va a aceptar!, seguro estará encantado, yo misma se lo diré.

-De acuerdo, pero voy contigo, de todas formas tengo que hablar con él.

-Está bien, Marta también se pondrá muy contenta con la noticia.

-¿Quién es Marta? - me pregunta confundida.

-Es mi dama de compañía, o mi doncella, como prefieras verlo.

-¿Y a qué familia pertenece?

-Seguro no has oído hablar de ella, Marta viene de familia humilde, ella era una sirvienta, pero la convertí en mi dama de compañía para poder hablar con ella sin miedo de su parte.

-Tan dulce como siempre - dice y suelta una risita.

Ruedo los ojos, para Dorothy soy dulce y tierna, así es como me describe, la verdad es que la echaba de menos, hacía casi cinco años que no la veía, bueno, en realidad no tanto, pues de vez en cuando ella ayudaba a mi padre con algún asunto en el que se necesitaba magia, pero sí que hacía casi cinco años que no hablábamos.

Como bien le dije a Alec, Dorothy es una de las brujas más poderosas de hoy en día, por lo que sus servicios están muy solicitados; además de que la odiosa de su madre quiere obligar a Dorothy a casarse, y no con alguien que Dorothy quiera, no, sino con magos seleccionados por ella, y que según ella, son los más prestigiosos y de mejores familias; de ahí que deteste a su madre.

A pesar de que no pasamos mucho tiempo juntas debido a...las circunstancias, se podría decir que somos amigas. Las brujas y los magos, a diferencia de lo que muchos puedan pensar, tienen un envenenamiento bastante lento, por eso Dorothy, a pesar de que tiene casi 60 años, parece una veinteañera, y también es por eso que no poder hablar durante 5 años, no es tanto tiempo, ni para ella, ni mucho menos para mí.

Pero el tiempo no pasa igual para todas las personas con magia, se podría decir que las brujas y los magos envejecen más lento porque son los más poderosos, pero a parte de ellos hay otros grupos de personas que hacen magia, están los hechiceros y hechiceras, ellos tienen un nivel de magia medio, por lo que su envejecimiento no es tan lento, pero sí lo es más que un humano normal; y luego están los magics, la gran mayoría son humanos que nacieron con magia, aunque hay casos de familias de magics, su magia es muy pobre y su envejecimiento es igual a un humano.

El término brujo o maga no se utiliza en el mundo mágico, el cual tiene una organización como la humana, con un gobierno y distintas instituciones que regulan todos los aspectos de la vida de las personas mágicas, porque sí, son tan idiotas como para definir así la especie, cuando el resto del mundo los denomina brujas y brujos, pero bueno, eso es lo que hay, y por el momento, que yo sepa, no se va a cambiar.

-Señorita, por fin la encuentro - me alegra que haya venido, pero detesto que me llame así.

-Alexandra, no señorita - le digo a Marta - en fin, Marta, te presento a Dorothy, Dorothy, te presento a Marta, es de quien te hablé.

-Encantada - dice Dorothy.

-Igualmente - dice Marta haciendo una pequeña reverencia.

-No hace falta que hagas eso - le dice Dorothy a Marta incómoda.

-Tú debes ser Dorothy Kyteler, la bruja real, es un honor conocerla - dice Marta demasiado formal.

-Bueno, de vez en cuando ayudo a esta familia, pero no soy la bruja real - dice Dorothy cada vez más incómoda.

-Por ahora, mi padre feliz de que lo seas - le digo emocionada.

-Estoy de acuerdo, el rey estará feliz de tener a una bruja tan poderosa como la bruja real.

-Marta, deja de ser tan formal por lo que más quieras - le regaño.

-Perdón.

Continuamos nuestro camino hacia el despacho de mi padre, por el camino Marta y Dorothy empezaron a hablar, y una vez que le das cuerda a Marta, creo que podría hablar durante un siglo sin cansarse, pero Dorothy dice que le agrada, por lo que las dos se hicieron amigas enseguida, lo cual no me sorprende, ambas son muy agradables y se parecen mucho, solo que Marta es más habladora, y Dorothy más callada.

Yo por mi parte no intervine en ningún momento de la conversación, mi mente estaba ocupada con Alec, no me agrada nada no saber de él, esta es la primera vez que paso tanto tiempo sin saber de él, ya que de lunes a sábado sé que está entrenando cuando yo no estoy, y está conmigo cuando sí estoy; además de que el hecho de que sea de noche, solo hace que me preocupe más, los licántropos no tienen tan buena visión nocturna como los vampiros, por no decir que apenas tienen, por lo que está más expuesto ante el peligro.

-Adelante - salgo de mis pensamientos al escuchar la voz de mi padre, ni siquiera me di cuenta cuando llegamos al despacho.

-Hola - le saludamos ambas.

-Hola estrellita, hola Dorothy, me alegro de verlas, ¿qué os trae por aquí?

-Verás, durante bastante años he estado ayudándolo, y me gustaría saber si...bueno, si usted...

-Dorothy quiere ser la bruja real y quedarse a vivir aquí, ¿verdad que puede? - le digo yo finalmente, a su velocidad no acabaríamos ni para pasado mañana.

-Claro - dice mi padre muy animado - para mí sería un honor que fuera la bruja real, pero me sorprende que quiera atarse a este lugar, tenía entendido que buscaba pretendientes para casarse.

-Esa es su madre - digo con mala leche.

-De acuerdo - dice riéndose por mi reacción - ¿le gustaría tomar asiento y acordar las cláusulas del que sería su contrato?

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Ya sé que este capítulo no es muy interesante, pero espero que os haya gustado.

¿Qué les ha parecido Dorothy?, ¿dónde creen que se haya metido Alec?, ¿quieren que el próximo capítulo lo narre Alec o Alexandra?