ITS OKAY IF IS YOU | HUNHAN

18. Detrás de esta belleza, existe un ser despreciable.

LuHan sostuvo con fuerza la mano de SeHun cuándo cruzaron la puerta de metal oxidado que daba la bienvenida a la habitación de Irene con una expresión aterrada por el estado en el que se encontraba.

La chica, estaba sentada en el suelo hecha ovillo mientras murmuraba oraciones incompletas e incomprensibles.

Sobre su cuerpo llevaba un traje blanco con gotas rojizas secas y su brazos atados a su espalda sostenidos por esposas, como si se tratará de un criminal. Su cabello negro estaba despeinado y cortado de manera asimétrica, su rostro estaba sucio y maltratado.

Era un caos, hecho persona.

—¿Irene? —la llamó SeHun, su voz rebotaba en las cuatro paredes creando un eco.

Irene seguía en la misma posición, perdida en sus pensamientos.

Ahora fue LuHan quien la llamó.

—I-irene, soy LuHan —la voz de LuHan era temblorosa.

El aspecto de la chica lo tenía abrumado, era difícil creer que la chica linda y de carácter decidido que lo había tratado mal antes ahora estaba perdida en su mundo.

Hecha pedazos.

—Ella ha tomado sus calmantes y por eso no les presta atención —les explicó un hombre canoso de bata blanca que se detuvo a su lado —. Por favor tomen asiento, haré que ella hable con ustedes.

Ambos asistieron mientras el hombre se acercaba a Irene poniéndose a su altura, acercó sus labios a los oídos de la chica y susurró un par de cosas que ninguno de los dos pudo entender.

Apenas se alejó, Irene se puso de pie girándose hacia ellos con una expresión pasiva y una sonrisa en el rostro.

—SeHun, viniste —le susurró emocionada mientras lo abrazaba con fuerza.

El cuerpo de SeHun se tenso por el contacto, busco la mirada de LuHan y cuándo la encontró quiso alejarse de la chica. LuHan lo miraba fijamente con una expresión molesta.

—Hola Irene —la saludó empujándola levemente para que se alejará.

La chica se alejó mirando despectivamente a LuHan, el chico sonrió con la boca cerrada. Pero su expresión cambio cuando Irene se acercó y lo abrazó.

—Lulu, me alegra conocerte. SeHun me ha contado maravillas de ti —le susurró con complicidad —. Eres muy lindo, ¿puedo llamarte "oppa"?

LuHan miró confundido a SeHun quién se encogió de hombros.

—Claro, yo te llamaré: nonna.

El doctor intervino separándolos, como si en cualquier momento pudiese atacarlos.

Y LuHan creía que era posible.

—Irene, toma asiento allá —le ordenó señalando la mesa del fondo —. Señores, por favor salgan un momento.

Ambos asintieron siguiendo al doctor hasta el pasillo, fuera de la habitación. Irene los miraba fijamente con una sonrisa inocente en el rostro.

—Es necesario que les informe esto —comenzó el doctor con tono serio —. Ella no recuerda con exactitud la actualidad, en su mente, ella vive atrapada en la vida que llevaba hace dos años, justo antes de la muerte de sus padres.

SeHun entendió la amabilidad que había utilizado, la última vez lo había recibido con insultos y maldiciones.

Le agrada más en ese estado.

—¿Le hablaste de mí antes?

—Tal vez.

LuHan soltó un bufido rodando los ojos.