-Creo que no entiendes la situación Sam. Estás pidiendo ayuda a un demonio.
-No. Te la estoy pidiendo a ti, Tobías. - sentándose a su lado en el sofá.
-Yo soy un demonio. - la miró con sus ojos rojos.
-Deja ya el truquito. No me asustas. - le dijo tocando su mejilla - Eres un demonio, lo sé. Pero creo que eres mucho más que eso.
-Crees mal.
-Y tú mientes fatal.
Entonces Sam acercó lentamente sus labios dándole un tierno beso.
-Quiero conocerte Tobías.
-Que gracioso. La última vez que te explique algo de mi, me pateaste las bolas.
-Lo siento. Enserio. No volverá a pasar. - Entonces Sam le volvió a besar de una manera más atrevida que la anterior.
- Hoy no quieres esto. -
- Si no lo quisiera no lo estaría haciendo. - le dijo besando su cuello.
-Hoy no voy a ser gentil contigo Sam. - separándose del beso y mirándola fijamente. - Vete si no quieres que te haga daño. - le dijo mientras le acariciaba suavemente la mejilla .
Siendo incoherente con sus palabras.
-No voy a irme. - dándole un apretón en su mano - Estás enfadado, lo sé, te han hecho daño.. pero se que no me lo harás a mi.
-No me conoces.
- Pues déjame intentarlo. - suplico.
Entonces Sam se sentó a horcajadas encima de él, arremangando su ligero vestido verde y depositando un reguero de besos de sus labios hasta su torso desnudo, teniendo cuidado con sus heridas.
-¿Estás segura de esto? Hoy no se si podré controlarme.
-No lo hagas, no te controles por mi. Muéstrame tal y como eres.
-¿Estás dispuesta a acostarte con un demonio?
-Estoy dispuesta a ti.
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¿Ángel o Demonio?
RomanceSam se consideraba una persona normal, tenía amigos, un trabajo , incluso cuenta de Netflix. De un día para otro, toda su vida cambia de repente, acaba rodeada de ángeles y demonios. Intentan matarla y no sabe porqué. Solo un ser podrá ayudarla...