¡Ya deja de sonreír! KookTae

¿Celos?

La clase había comenzado hace apenas unos minutos. Ese día el profesor planeaba desarrollar por completo la ultima unidad del temario.

Todos prestaban atención al profesor, a excepción de una persona, TaeHyung.

Estaba nervioso, ansioso con escalofríos insistentes e incontrolables.

Dar aquella clase era sólo excusa para ver como salieron cada uno de los alumnos en el último parcial que definía su calificación.

Era lamentable recordar para TaeHyung lo mal que le había ido en esa materia en toda la cursada.

Si bien, álgebra pudo sacarla con una buena calificación, calculó podía considerarse su peor pesadilla en la realidad.

Y no es porque le fuese complicado entender las cosas, sino que cualquier mínimo error que su profesora encontraba anulaba sin piedad todo el punto, importándole poco si el procedimiento era el correcto o si llegaba al mismo resultado con un distinto método al inculcado.

Su pierna derecha no paraba de moverse de arriba a abajo por el golpeteo suave de su talón con el suelo.

Acarició con su mano izquierda su pierna del mismo lado en busca de calor para calmar esos escalofríos.

Juraba que en cualquier momento iba a salir corriendo del aula para ir al baño a llorar o gritar de la frustración.

Porque él ya sabía lo que venía, no tenía ni siquiera una mínima esperanza de salir bien en el último parcial y todo por su culpa, por prestar más atención a las otras cuatro materias y no tanto a eso.

Se sentía incompetente, todos sus compañeros parecían avanzar sin tener los problemas que el tenía, el estrés comenzaba a enfermarlo y una mala nota podía matarlo en vida por la desilusión de no poder aprobarla nunca y pensar que eso lo atrasaría en toda la carrera.

Suspiro con fuerza y siguió copiando todo lo que escribía el profesor en la pizarra. Enserio, deseaba acabar con eso ya.

Después de todo, aunque intentará tranquilizarse por esa situación, había otra que estaba a punto de colapsarlo.

Estaba a unas cuantas horas de que le tomen su último examen para aprobar por completo una de las cinco materias que estaba cursando.

Afortunadamente, ya tres de ellas las había aprobado exitosamente y sólo le faltaba la que hoy rendía y la que hoy sabía que tendría que sacarla libre.

Empezó a jugar con su lapicera cuando cercioró la hora en su reloj de muñeca, viendo que sólo quedaban veinte minutos para que los profesores hagan presencia en el aula.

Su juego con la lapicera comenzó a ser brusco y para cuando lo quiso detener la misma había volado hasta la fila contraria de donde él estaba sentado.

Observó con desesperación donde había caído exactamente su lapicera y la encontró en el medio de entre un chico desconocido y JungKook.

Pensó en levantarse para ir a buscarla pero el chico desconocido se le adelanto y con cuidado de no molestar a otros levantó la lapicera y se la entregó al rubio.

--Gracias-- susurró el rubio viendo sonreír al contrario. Este se ubicó nuevamente en su lugar al igual que él decidió hacerlo.

Ahora estaba molesto. ¿Por qué estaba molesto?¿Enserio le había molestado que JungKook no le haya pasado la lapicera?.

Miró hacia el pelinegro con una expresión sería en su rostro y fue cuando sucedió aquel accidente.

Una chica, la chica que tiene el título de ser la más inteligente del curso, se le había caído la lapicera al igual que a él en el medio de ambos muchachos.