Capitulo 3:"Los Fundadores"

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  ➳"𝑇𝑢𝑠 𝑑𝑒𝑐𝑖𝑠𝑖𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑠𝑜𝑛 𝑙𝑎 𝑝𝑙𝑢𝑚𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑙𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑐𝑟𝑖𝑏𝑒𝑠 𝑡𝑢 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑜"-𝐴𝑛𝑜𝑛𝑖𝑚𝑜➳


Isabella

El auto se había estrellado contra un poste de luz, al acercarme pude ver a un chico, el airbag se había activado pero sangre brotaba de su cabeza, sé que lo correcto era no moverlo pero sentía que algo andaba mal , podía sentirlo como una corazonada ,supe que era cuando agarre su muñeca y coloque dos dedos, su pulso era muy débil, en ese momento recordé las palabras de mi padre: "Si sabes cómo ayudar hazlo , luego afrontas las consecuencias". Le dije a 2 hombres que estaban mirando que me ayudaran a sacar al chico del auto, cuando lo lograron, nos alejamos un poco del auto y lo dejaron en el suelo.

El chico era castaño, tez blanca, nariz aguileña, cejas espesas, labios finos, pero no en exceso y una leve barba muy bien perfilada, realmente era hermoso. ¡Diablos!, no tengo tiempo para admirar a este Eros, debo actuar rápido.

Sangre iba desde la cabeza hasta la mandíbula, mire su pecho para ver si aun respiraba, pero no subía ni bajaba.

- ¡Mierda!¡mierda! ¡mierda!, esto está mal, muy mal- Me puse de rodillas a un costado de él, agradezco a los santos que mi padre me obligo a hacer un curso de primeros auxilios años atrás, de lo contrario no podría ayudarlo. Si no respiraba eso significaba una sola cosa, estaba teniendo un paro, coloque mis manos en medio de su pecho, una sobre la otra para realizarle RCP- ¡MATT! ¡¿DONDE MIERDA ESTA LA AMBULANCIA?!, ¡¡¿PORQUE CARAJOS AUN NO LLEGA?! -le grito mientras realizo la reanimación- por favor no te mueras, no te mueras, por favor, no podría cargar con tu muerte también- le susurraba al chico misterioso.

-La ambulancia ya viene Izzy no te preocupes- dice Matt acercándose a mi lado.

- ¿QUE NO ME PREOCUPE? ¡TIENES QUE ESTAR JODIENDOME MATT!, ¡EL CHICO SE ESTA MURIENDO Y TU ME PIDES QUE ME CALME! - no lo observo, solo le grito, estoy demasiado concentrada contando- 15,16,17,18,19....

No estoy segura cuanto tiempo estuve así, cuando estaba a punto de rendirme, el chico respiro profundamente, abrió los ojos, eran de un perfecto celeste que me recordó al mar cristalino. Lo miré fijamente, necesitaba saber si reaccionaba, pero cuando iba a preguntarle si se encontraba bien, los volvió a cerrar. Se había desmayado, pero por lo menos había logrado que volviera respirar, aunque con un poco de dificultad.

- ¡Ahí viene la ambulancia! - escucho que alguien grita, yo aun no podía apartar la mirada de aquel chico, me sentía en estado de alerta, tenía miedo que si dejaba de mirarlo podría dejar de respirar de nuevo. No fue hasta que los paramédicos llegaron que por fin pude salir de ese estado.

- ¿Lo movieron?, ¿por qué? - me pregunta el paramédico algo molesto.

-Estaba entrando en un paro cardiorrespiratorio, por eso solicite ayuda para sacarlo del auto, le realice RCP, hasta que logre que respirara de nuevo, pero se nota que le cuesta respirar, probablemente tenga alguna costilla presionando uno de los pulmones- mi respiración es un poco agitada por el esfuerzo del RCP, pero aun así le contesto fríamente, mientras me levanto para dejar a los paramédicos hacer su trabajo.

¿Que esperaba este imbécil?, sé que está haciendo su trabajo, pero ¿quería que lo dejara morir?, pues lo siento, pero más vale pedir perdón que pedir permiso.

-Señorita solo estoy haciendo mi trabajo, pero gracias por su ayuda, desde ahora nos encargamos nosotros, no se preocupe. - comienza a examinarlo, mientras otro paramédico trae la camilla.

Broken SecretsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora