Capitulo 9: "Historia de un asesino"

84 11 2
                                    

"𝓛𝓸𝓼 𝓪𝓷𝓲𝓶𝓪𝓵𝓮𝓼 𝓼𝓪𝓵𝓿𝓪𝓳𝓮𝓼 𝓷𝓾𝓷𝓬𝓪 𝓶𝓪𝓽𝓪𝓷 𝓹𝓸𝓻 𝓭𝓮𝓹𝓸𝓻𝓽𝓮, 𝓮𝓵 𝓱𝓸𝓶𝓫𝓻𝓮 𝓮𝓼 𝓮𝓵 𝓾́𝓷𝓲𝓬𝓸 𝓹𝓪𝓻𝓪 𝓺𝓾𝓲𝓮𝓷 𝓵𝓪 𝓽𝓸𝓻𝓽𝓾𝓻𝓪 𝔂 𝓵𝓪 𝓶𝓾𝓮𝓻𝓽𝓮 𝓭𝓮𝓵 𝓹𝓻𝓸́𝓳𝓲𝓶𝓸 𝓼𝓸𝓷 𝓭𝓲𝓿𝓮𝓻𝓽𝓲𝓭𝓪𝓼 𝓮𝓷 𝓼𝓲́ 𝓶𝓲𝓼𝓶𝓪𝓼."-𝓙𝓪𝓶𝓮𝓼 𝓐𝓷𝓽𝓱𝓸𝓷𝔂 𝓕𝓻𝓸𝓾𝓭𝓮, 𝓗𝓲𝓼𝓽𝓸𝓻𝓲𝓪𝓭𝓸𝓻 𝓫𝓻𝓲𝓽𝓪́𝓷𝓲𝓬𝓸.


Sudes (sujeto desconocido)

La primera vez que maté a alguien fue por accidente, tenía 15 años, corrí asustado donde mi padre y él lo encubrió todo, no pregunto ¿porque lo hice?, mucho menos pregunto ¿si estaba bien?

Simplemente se limitó a decir.

-Te olvidaras de esa chica y lo que has hecho, nadie puede saber jamás sobre esto- con su voz tenebrosa y de advertencia- esto no puede volver a pasar o la próxima vez por lo menos no dejes pruebas y no vengas corriendo hacia mí. - agrega- es hora de que aprendas a preocuparte de tus propios asuntos, ya no eres un bebe.

-Si papá, lo prometo- aunque nunca le dije que era exactamente lo que prometía. Lo tome como un "puedes seguir con esto, pero no me metas a mí en tus problemas".

No corría asustado a él por haber matado a alguien, corrí porque no sabía cómo ocultar lo que había hecho. Con el tiempo comprendí que no era necesario ocultar los cadáveres siempre y cuando me asegurara de, como dijo mi padre: "no dejar pruebas".

No me malinterpreten, trate de reprimir esta naturaleza por mucho tiempo, pero simplemente no puedes negar lo que eres, tomar la vida de alguien es lo más cercano a un Dios que podemos estar.

Los años que siguientes comencé a obsesionarme con series policiales y anime de asesinatos, quizás porque buscaba las fallas en esos crímenes que llevaron a que fueran atrapados o porque durante un tiempo ayudo a saciar la sed de sangre que sentía todo el tiempo, como un vampiro que esta recién convertido.

Fue en uno de los animes donde mencionaron a Jack el destripador que comencé a fascinarme por su historia, algunos dicen que existió, mientras otros más escépticos dicen que es solo una historia inventada. Yo claramente creo que es real y lo que más me fascina de él, es que jamás lo atraparon, se burló de la policía muchas veces, se camuflo tan bien que nadie podía decir si era alto o bajo, moreno o blanco, si vestía elegante o como un vagabundo, todos tenían una versión diferente, lo único claro era la forma en la que el asesinaba, que las víctimas eran todas prostitutas y sus características cartas.

Claramente hoy en día se complica hacerlo a su manera, con el avance de la tecnología no se puede ser tan descuidados, con programas especiales recocerían mi letra si escribo cartas a mano y si lo hago a través de un computador podrían rastrearme. Digamos que soy algo así como un Jack más moderno.

Como dije, eso solo ayudaba a saciar un poco la sed se sangre, pero llego el momento en donde no pude controlarme más y los demonios en mi mente tampoco ayudaban a no hacerlo. Así que volví a matar, esta vez ya no fue por accidente, fue por el puro placer de infringir dolor, de escuchar el exquisito sonido de los gritos de auxilio que jamás serian escuchados.

La primera después de años se llamaba Sarah, era una hermosura, cabello color chocolate, ojos cafés, nariz pequeña y estatura baja. La observe por varios días, siempre tenía la misma rutina y era la típica chica invisible, así que fue bastante sencilla de atrapar. ¿Como lo hice?, fácil, a las chicas solo hay que decirles mentiras que suenen bonitas y las tienes a tus pies, más aún si es una chica que no llama la atención, porque seamos sinceros soy un hombre bastante apuesto, ninguna chica se resiste, mi carisma es difícil de ignorar, eso facilita mi trabajo.

Broken SecretsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora